Hacer de lo excepcional una costumbre
El C¨¢diz lleva ya un tiempo malacostumbrando a su gente. Aunque los amarillos empiecen a hacernos creer que seguir en Primera es lo normal, hay que saber darle el valor que se merece. A sus 112 a?os de historia, los de la Tacita de Plata s¨®lo han vivido 15 cursos en la m¨¢xima categor¨ªa, que ser¨¢n 16 el a?o que viene. El equipo con el tercer l¨ªmite salarial m¨¢s bajo de LaLiga (s¨®lo por detr¨¢s de Girona y Elche) continuar¨¢ en Primera por cuarto curso consecutivo. Un equipo que comenz¨® la temporada con cinco derrotas seguidas y 20 de las primeras 22 jornadas dentro de los puestos de descenso. Hay que saber darle valor a esta salvaci¨®n.
Esta permanencia le pertenece al oportunismo de Negredo en el a?adido de Zorrilla o al rodillazo de Sobrino en el 99¡ä ante el Atl¨¦tico. La permanencia es ver a Ledesma vestido de santo d¨ªa s¨ª y d¨ªa tambi¨¦n, el zapatazo de Fede contra el Elche con gol de Escalante, las llegadas de argentino y Guardiola en invierno para sacar al equipo del descenso o el doblete de Bongonda hace s¨®lo unas jornadas. Por resumir, la salvaci¨®n es de Sergio, capit¨¢n del buque amarillo y de todos sus jugadores. Eso s¨ª, si hay un verdadero factor diferencial que hace grande a este equipo, es el de su afici¨®n. Esta permanencia es de los cadistas por encima de todo, que est¨¢n siempre en las buenas y las malas (estas ¨²ltimas suelen ser m¨¢s numerosas) dej¨¢ndose la voz por los suyos, que te llenan el Mirandilla cada d¨ªa de partido y autobuses en los desplazamientos. A fin de cuentas el C¨¢diz es de Primera por m¨¦ritos propios. Y eso que el amarillo estaba maldito para algunos... ?Enhorabuena C¨¢diz!