Gol de Asensio y lesi¨®n de Camavinga

Ancelotti arriesg¨® esta vez menos titulares que nunca, pero hete aqu¨ª que sali¨® renqueante Camavinga, el hombre-parche para el lateral izquierdo, tambi¨¦n entusiasta y acertado centrocampista cuando el partido le lleva a esa zona. Fue un tantarant¨¢n absurdo de Iglesias, ya cerca del final del partido. La acci¨®n oblig¨® a rectificar un cambio, pues se iba Asensio para que entrara Odriozola, pero el que se tuvo que marchar fue el franc¨¦s con un paso lastimero que preocup¨® a la afici¨®n, y m¨¢s cuando se le vio seguir el final del partido desde el banquillo con hielo en la rodilla. Pero ya en vestuarios, Ancelotti emiti¨® palabras de tranquilidad.

Eso y el gol de Asensio, que tiene un tiro de pierna izquierda como no habr¨¢ m¨¢s de media docena en el f¨²tbol mundial, fue lo que dej¨® el partido. Esta vez su disparo, dirigido a la escuadra contraria, encontr¨® un cuerpo que alter¨® su trayectoria haci¨¦ndola imposible hasta para el excelente meta Soria, que en otra ocasi¨®n le sac¨® al propio Asensio un cabezazo magn¨ªfico. El gol lleg¨® promediando el segundo tiempo, cuando Ancelotti hab¨ªa ido sacando gente importante (Kroos, Modric, Vinicius¡­) en busca de una victoria que no quer¨ªa que se escapara. Quiere acabar LaLiga decentemente, aunque s¨®lo sea por pura verg¨¹enza torera.

Pocos de los suplentes blancos dieron una medida aceptable, pero casi m¨¢s me choc¨® que no la diera el Getafe, del que pienso que debi¨® atreverse m¨¢s ante el inane Madrid de la primera parte. Cierto que les faltaba Enes ?nal, su gran referente en ataque, pero aun as¨ª le falt¨® decisi¨®n y hasta pierna fuerte (excepci¨®n hecha de la acci¨®n de Iglesias, por lo mismo m¨¢s chocante) para ponerle las cosas dif¨ªciles al Madrid. No fue lo que venimos entendiendo como un ¡®equipo Bordal¨¢s¡¯, con ese sello de intensidad y fuerza, sino un grupo pachorr¨®n, sin sangre, que lo fiaba todo a que el Madrid no marcase. Pero por all¨ª andaba Asensio, solt¨® su izquierda y¡­