El Roland Garros m芍s incierto
Los tres Masters 1.000 sobre tierra batida, que suelen ser el mejor term車metro para tomar la temperatura a Roland Garros, han tenido tres finales inesperadas, y muy diferentes entre s赤, que nos han ofrecido pocas pistas sobre cu芍l puede ser el desenlace del Grand Slam. En Montecarlo, Tsitsipas-Ruud, con victoria del griego. En Madrid, Rublev-Auger Aliassime, con triunfo del ruso. Y en Roma, el pasado domingo, Zverev-Jarry, que se adjudic車 el alem芍n. Al menos, dentro del panorama de sorpresas, los campeones fueron tenistas que con anterioridad ya hab赤an sido maestros en estos u otros torneos. Ellos pueden ser considerados tambi谷n firmes candidatos para coronarse en Par赤s, sobre todo Tsitsipas y Zverev, en la edici車n que se presenta m芍s abierta de los 迆ltimos tiempos. Si chequeamos el palmar谷s franc谷s, Stan Wawrinka figura en 2015 como el 迆ltimo campe車n que no fue ni Rafa Nadal, ni Novak Djokovic. Si seguimos hacia atr芍s: Roger Federer, en 2009, y Gast車n Gaudio, en 2004.
El abrumador dominio del espa?ol y el serbio, sobre todo de Rafa, convierte en una rareza el acercamiento de este a?o hacia la Copa de los Mosqueteros. Hace un a?o, Carlos Alcaraz se erig赤a como la alternativa, pero en el presente curso no llega nadie con ese aura. El rendimiento de Alcaraz, con un brazo lastimado, es una inc車gnita. Lo mismo ocurre con Jannik Sinner, el mejor en la primera parte de la temporada, tambi谷n lesionado y sin resultados fiables sobre tierra. Djokovic, que se ha apuntado a Ginebra para terminar de afinar, no ha levantado cabeza en lo que llevamos de campa?a, y menos a迆n en arcilla. Y luego tenemos a Nadal, una ilusi車n. A los viejos rockeros nunca hay que darles por acabados, en especial a Nole, que hace solo un a?o gan車 tres Grand Slams. Pero la realidad, hoy, es que Roland Garros nunca tuvo una previa tan incierta.