El presente y el futuro son blancos
El solvente, justo y espl¨¦ndido triunfo del Real Madrid alev¨ªn en LaLiga Promises pude disfrutarlo junto a un centenar de pe?istas en Ar¨¦valo (?vila) que acabaron entusiasmados con el nivel de juego de nuestro cachorros. No hace tanto, este tipo de partidos los sol¨ªa ganar La Masia, que presum¨ªa de ADN y de un gen ganador que dejaba entrever que el Madrid estaba en la ruta equivocada. Pero en los ¨²ltimos a?os, La F¨¢brica de Valdebebas funciona con sentido com¨²n, buen criterio y sabidur¨ªa en los formadores, como reflejan los resultados, que mantienen a los asiduos a Valdebebas orgullosos de lo que hay y de lo que viene. Este fin de semana he visto una veintena de partidos de LaLiga Promises y tengo que decir que el talento y el alto nivel competitivo del campe¨®n madridista me ha enamorado. Es imposible evitar personificarlo en Alberto Ruiz. Un cr¨ªo de 12 a?os (manchego ten¨ªa que ser) con una zurda de seda, una conducci¨®n excelsa y una calidad en el regate y en el remate final s¨®lo al alcance de los elegidos.
Soy consciente de que es s¨®lo un ni?o y que pasado el tiempo te encuentras a muchos juguetes rotos por el camino, pero pude hablar un rato con Esteban Granero (?grande El Pirata!) y me confes¨® que podemos estar muy orgullosos de este grupo porque no hay egos, ninguno se cree m¨¢s que nadie y la colectivizaci¨®n de la humildad es lo que reina en el vestuario del campe¨®n. Alberto Ruiz conquist¨® con sus compa?eros La Cer¨¢mica y en el Bar?a se han llevado en el plazo de una semana el segundo revolc¨®n de La Masia ante La F¨¢brica. No hay que mirarse el ombligo porque eso debilita, pero es evidente que hay que seguir por este camino para poder recuperar tiempos inolvidables como los de La Quinta del Buitre. Se?oras y se?ores, esto es el Madrid.