El mal estudiante
No puede sostener un solo futbolista, Braithwaite, las opciones de ascenso directo. Tampoco el Espanyol enchufarse unos minutos y a vivir. Ni reparar en Elche lo da?ado ante el Andorra.


Braithwaite asiste (con un pase de la muerte que es medio gol) en el 0-1. Braithwaite anota el 1-2. Braithwaite tiene la ocasi¨®n final, un cabezazo franco para el 2-3, en el ¨²ltimo segundo del partido. En conclusi¨®n: pr¨¢cticamente todas las opciones de subir del Espanyol pivotan alrededor del dan¨¦s, pero un solo futbolista ¨Cque encima juega mermado¨C no es suficiente para que ese ascenso sea directo, como se supone que tendr¨ªa que ser. Entre otras muchas cosas, porque ese mismo Braithwaite que lleva 20 goles en esta infartante Segunda Divisi¨®n qui¨¦n sabe si estar¨¢ en una promoci¨®n en junio, coincidente con la Eurocopa¡
Como suele suceder con este equipo poli¨¦drico desde la mediocridad, el empate contra el Elche (2-2) arroja diversas lecturas. La m¨¢s inmediata es que la media inglesa, que se quebr¨® ante el Andorra pero que pod¨ªa reconducirse en el Mart¨ªnez Valero, ha quedado definitivamente desbaratada. Vamos, que para alcanzar esos dos primeros puestos al final habr¨ªa que ganarlo pr¨¢cticamente todo, o sea, conseguir m¨¢s victorias en las cinco jornadas restantes que en las 12 anteriores. Dif¨ªcil. La siguiente es que, una vez m¨¢s, el equipo dej¨® escapar demasiadas oportunidades, dos ventajas en el marcador, muchos minutos derrochados sistem¨¢ticamente¡ Y otra lectura inevitable es pensar que el efecto Manolo Gonz¨¢lez pueda haberse desinflado, por mucho que ciertamente sigue invicto.

La historia del Espanyol en los ¨²ltimos tiempos es la historia de una decepci¨®n tras otra. En Elche, aun con destellos de superioridad, abus¨® el equipo del juego directo, se arrug¨® sobre todo en la primera mitad en ayudas, en ausencia de apoyos para el pase (el llamado tercer hombre), le quem¨® el bal¨®n en un centro del campo gaseoso y atr¨¢s cometi¨® demasiadas faltas y p¨¦rdidas en errores no forzados. Y en la reanudaci¨®n, cuando parec¨ªa haber enderezado el rumbo, concedi¨® una falta lateral mortal de necesidad.
Y, aun as¨ª, aisl¨¢ndolo del urgente contexto actual, un empate en el Mart¨ªnez Valero no deber¨ªa considerarse un mal resultado, como tampoco lo ser¨ªa el cosechado dos semanas antes en Legan¨¦s. Pero el Espanyol est¨¢ obligad¨ªsimo a seguir remando a contracorriente no por este 2-2 sino por los tropiezos frente a Andorra Alcorc¨®n, Huesca, Eldense, Villarreal B¡ Y, adem¨¢s, llega un d¨ªa en que los resultados del resto de rivales directos dejan de acompa?ar.
Gr¨¤cies als m¨¦s de 700 pericos que ens heu acompanyat avui. Que tingueu una bona tornada a casa.#ElcheEspanyol #RCDE pic.twitter.com/BeF78R1nj2
— RCD Espanyol de Barcelona (@RCDEspanyol) April 27, 2024
Tan s¨®lo el enfado monumental que se desprend¨ªa de las caras de los jugadores, de las frases del entrenador, y la perogrullada de que restan todav¨ªa 15 puntos en juego y nada es matem¨¢tico ayudan a paliar la desconfianza en una plantilla que ha defraudado en demasiados momentos en que no pod¨ªa ni deb¨ªa fallar. Vaya, el s¨ªndrome del mal estudiante que lo deja todo para el final apoyado en el ¡®mientras hay vida, hay esperanza¡¯. Pero es que no bastar¨¢ con aprobar, en cinco jornadas hay que sacar matr¨ªcula de honor. O caer a la promoci¨®n.
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