El Madrid dimite

Gatillazo infame.- Pocas veces he visto m¨¢s enfadado al madridismo militante. Estoy con ellos hasta el tu¨¦tano. Con 0-1 y despu¨¦s de veinte minutos imperiales es inexplicable el apag¨®n colectivo e individual del equipo, la desidia en la presi¨®n, la falta de pasi¨®n en el desempe?o, el extrav¨ªo del compromiso defensivo, la frialdad en los balones divididos, la falta de rebeld¨ªa con el marcador en contra... El Madrid jug¨® hasta el minuto 20 como debe hacerlo un aspirante a todo y del 20 al 90 como un equipo abandonado a su suerte que arroja la toalla sin valorar que este tipo de deslices te pueden apartar de la lucha por la Liga. Esta vez no me vale ni el comod¨ªn arbitral. El tiro en el pie se lo pegaron los propios jugadores para desesperaci¨®n de Ancelotti, que no encontr¨® las f¨®rmulas para sacar de la abulia a sus hombres, ensimismados tras el 0-1 en un estado de hibernaci¨®n provocado seguramente por la perspectiva del ¡®euroderbi¡¯ con el Atleti. Pero es peor a¨²n. Ganar al Atleti este martes pasaba por vencer al Betis de Pellegrini y mantener el estado del bienestar reflejado por los blancos en estas ¨²ltimas semanas. Hasta que el Betis acept¨® la gentil invitaci¨®n que le hizo su rival para entrar en la pelea, justo en el momento en el que la lluvia arreciaba sobre Heli¨®polis...

Isco fue el due?o.- El malague?o tiene duende. Talento. Magia. Y hambre. Que nadie olvide que el genio de Arroyo de la Miel conquist¨® cinco Champions con el equipo que le hizo cumplir todos sus sue?os como futbolista. Tuvo un bajonazo en el Sevilla, pero desde que se puso la verdiblanca ha recuperado la luz de su f¨²tbol fantasista. Y lo incre¨ªble es que no le encimaron ni le intentaron parar. Encontr¨® una autopista hacia el cielo del Villamar¨ªn y dio una master class que abrillant¨® poniendo el sello de la victoria metiendo el penalti con firmeza. Isco nos record¨® al de los grandes d¨ªas...

Estaban avisados.- Lo m¨¢s inaudito de todo es que los pupilos de Carletto estaban avisados. El Betis tiene esta temporada en su cuaderno de bit¨¢cora liguero un triunfo sobre el Atleti del Cholo y sendos empates ante Bar?a y Athletic. Este estadio tiene embrujo. Y con el 0-1, gol de Brahim tras una genialidad de Mbapp¨¦ y una gran asistencia de Mendy, se dedic¨® a mirarse al espejo y recordar lo guapos que somos. Esa autocomplacencia se paga cara en el f¨²tbol de elite. Sabemos que la Liga del ¡®Tripartito¡¯ se ha puesto cara, pero si encima les haces a Bar?a y Atleti regalos de Navidad en pleno mes de marzo, pues mal vamos.

Espabila G¨¹ler.- Lo del adolescente turco es un enigma. ?Es delantero? ?mediapunta? ?centrocampista? Con actuaciones tan inocuas como la del Villamar¨ªn es dif¨ªcil asignarle una misi¨®n como era la de remontar el partido ante un Betis crecido. El chaval tuvo m¨¢s de media hora y solo dej¨® p¨¦rdidas absurdas de bal¨®n, falta de br¨ªo y muchas caras de impotencia. Jugar en el Madrid son palabras mayores y su entorno deber¨ªa empezar a aceptarlo. G¨¹ler est¨¢ pidiendo una cesi¨®n a gritos.

No es justo.- Este patinazo no evita que me acuerde de gente que se llev¨® un berrinche que no merecen. Me duele porque la derrota amarg¨® el s¨¦ptimo cumplea?os de Cayetana, la peque?a de nuestro Gabi ¡®Teletipo¡¯. Y no me olvido de mi amigo Jes¨²s Jim¨¦nez, taxista madrile?o enamorado de La Covatilla y de su paisaje. Y, sobre todo, me duele por Sergi Calvo, un andorrano que lleva el Madrid tatuado en su piel. Ayer se peg¨® un madrug¨®n de ¨®rdago para cubrir los 1.089 kil¨®metros que separan el precioso Principado de Sevilla. Lleg¨® a tiempo al Benito Villamar¨ªn y se llev¨® un disgusto de ¨®rdago. ?Eso es madridismo! Ojal¨¢ el Bernab¨¦u y la Champions obren el cambio. Ante el Atleti debe rugir otro Madrid.