El italiano
Simeone es tan argentino que es casi italiano. O es tan italiano que es casi argentino. La mezcla perfecta entre los dos pa¨ªses, entre las dos nacionalidades. No me extra?a que ¨¦l reconozca que sus mejores a?os como jugador los pas¨® en Mil¨¢n ni que sue?e con entrenar un d¨ªa a ese equipo azul y negro. Disfruta como nadie sufriendo en estos partidos tan temibles, pero tan deseados al mismo tiempo. Es dif¨ªcil comprender lo bien que se lo pasa enfrent¨¢ndose a Juventus, Inter, Lazio, etc¨¦tera. Porque yo sufro como un condenado.
anteayer nos tocaba el Inter. Y perdimos la batalla de San Siro, pero no la guerra. Queda media guerra, o m¨¢s, si hay pr¨®rroga, en Madrid. La batalla de Madrid. Muchos atl¨¦ticos pens¨¢bamos que esta vez ser¨ªa diferente por haber quedado primeros de grupo, y que nos tocar¨ªa un rival m¨¢s asequible segundo de grupo, y con la vuelta en casa... pues toma dos tazas. Dicen los expertos, muchos de los cuales me f¨ªo con los ojos cerrados, que el Internazionale Milano es el equipo m¨¢s en forma de Europa ahora mismo. As¨ª que los del Atleti confiamos ciegamente en ese Metropolitano que tanto se respeta por esos mundos de los dioses del f¨²tbol. ?Ser¨¢ por confiar, somos del Atleti!
¡°Y perdimos la batalla de San Siro, pero no la guerra. Queda media guerra, o m¨¢s...¡±
El Inter de Mil¨¢n demostr¨® su gran nivel de juego, da gusto verles salir, combinando como centellas, con la pelota. Pero hemos sobrevivido. Hemos perdido por la m¨ªnima, y el Metropolitano es una caldera maravillosa cuando toca, y a la vuelta tocar¨¢ ser ese infierno rojiblanco. Tengo sobradas esperanzas, es m¨¢s, creo que vamos a pasar. Es terrible lo de Gim¨¦nez, otra lesi¨®n, y es portentoso lo de Llorente. Una estatua para este chico que es capaz de jugar, y de jugar muy bien, en tres posiciones diferentes en un partido a cara de perro. Witsel y Oblak estuvieron magn¨ªficos, y todo el Atleti merece elogios. Todo.
Solo queda que la afici¨®n rojiblanca, numerosa y espectacular en Mil¨¢n, meta en Madrid el gol que nos clasifique. El otro lo mete Morata.