El imperio del miedo

Hace justo una semana, en el partido frente a la Real Sociedad, el Madrid jug¨® unos treinta minutos con cincos centrocampistas: Valverde, Kroos, Modric, Camavinga y Bellingham. No fue en ning¨²n caso fruto de la casualidad sino una alternativa t¨¢ctica que Ancelotti quiso y supo utilizar. Una de las grandes virtudes del t¨¦cnico italiano siempre ha sido saber adaptarse a todas las situaciones, sobre todo cuando son adversas. Frente al brillante conjunto vasco, que se puso por delante en la primera parte, ¡°Carletto¡± tuvo que gestionar la ausencia de Vinicius, el cansancio de Joselu (que no par¨® de ofrecerse y acab¨® marcando) y el peligro del rival. Ciertos madridistas podr¨¢n criticar esta f¨®rmula con deficiencia de delanteros pero, a m¨ª, me gust¨® mucho. Primero porque result¨® muy eficaz, ya que permiti¨® una victoria sumamente importante contra, repito, un excelente equipo. Y, al final, eso es lo que cuenta de verdad.

Segundo, porque me cuesta ver a cualquiera de estos magn¨ªficos futbolistas sentado en el banquillo. Cada uno tiene unas cualidades distintas y la uni¨®n de ellas es una tremenda capacidad de control y de soberan¨ªa sobre el partido. Sin olvidar la posibilidad constante de una irrupci¨®n creativa que destroza al rival en un pisp¨¢s. Quiz¨¢s este ¡°imperio del medio¡± sea, hoy en casa del vecino, una soluci¨®n desde el once titular.