El gigante Tavares y el esp赤ritu de Belgrado
Hay una jugada que describe el cuarto partido de la final de la Liga ACB, el choque que decidi車 el t赤tulo. Rebobinamos el v赤deo hasta el tercer parcial, a falta de 2:48 minutos. El marcador est芍 50-43 a favor del Real Madrid. El Bar?a encara una r芍pida transici車n en mayor赤a. Laprovittola conduce el bal車n, pero se topa con Tavares en la zona, as赤 que decide asistir a Davies, que tampoco opta por tirar, pivota, y le pasa el marr車n a Calathes, que se da la vuelta para iniciar jugada nueva. La sola presencia del gigante de Cabo Verde en la pintura atemoriz車 a los tres jugadores cul谷s. Ninguno se atrevi車 a mirar la canasta. Acto seguido, Edy Tavares pidi車 el cambio. Estaba reventado de cansancio.
Tavares ha sido decisivo en la reconquista de la corona liguera para el Madrid, con una actuaci車n impresionante: 25 puntos, 13 rebotes y 41 de valoraci車n, en 30:33 minutos en cancha. Pero por encima de sus n迆meros, que este domingo fueron excelsos, est芍 su intimidante figura, que condiciona el juego de sus rivales, siempre temerosos de recibir un tap車n, casi siempre humillados en la lucha por el rebote. El Madrid tir車 51 veces de dos, por 31 del Barcelona. Eso significa que tuvo 20 oportunidades m芍s para anotar. El rebote ofensivo fue determinante. La lucha. La intimidaci車n. El alma. En definitiva, el influjo de Pablo Laso, presente en la grada, inyectado en la direcci車n de su segundo, Chus Mateo.
El Real Madrid ha ganado la Liga porque ha cre赤do m芍s en ella. Y porque ha llegado mejor al desaf赤o. Pero sobre todo porque supo levantarse de su terrible crisis, de aquellas 17 derrotas en 28 partidos, para resurgir en el momento adecuado, para golpear en el lugar preciso. Los blancos iniciaron la resurrecci車n en las proximidades de la Final Four de la Euroliga, y la culminaron con su victoria ante los azulgranas en el partido de semifinales. Ah赤 cambi車 la tendencia. El Barcelona lleg車 a esta final de la ACB con un balance favorable ante el Madrid de 5-2 en la temporada, de 11-4 con Jasikevicius en el banquillo, de 0-6 en el Palacio# Y ya ven c車mo ha terminado la cosa. El esp赤ritu de Belgrado dio la vuelta a la historia.