El arte de la velocidad
Los extremos tambi¨¦n juegan por dentro, aunque su misi¨®n t¨¢ctica sea abrir el campo por los costados. A Demb¨¦l¨¦ se le podr¨ªa definir por lo visto ayer como un extremo centro. Lo suyo es correr, y en Sevilla fue por el eje. Galopando dio el primer gol y a punto estuvo de cerrar el partido antes del descanso.
La aceleraci¨®n es la base de la estrategia. Cuando los alemanes planearon envolver en inferioridad num¨¦rica al ej¨¦rcito franc¨¦s, (m¨¢s de un mill¨®n de soldados parapetados tras la l¨ªnea Maginot, lo nunca visto antes en los tratados militares), Guderian explic¨® al alto mando que se conseguir¨ªa sin necesidad de batir las alas, simplemente concentrando en el centro todo su poder artillero y penetrando hasta el coraz¨®n del enemigo. Los viejos t¨¢cticos de la escuela prusiana le preguntaron recelosos que quien proteger¨ªa sus flancos durante el avance y el innovador estratega les respondi¨® con cierta displicencia insolente: ¡®La velocidad¡¯. Y as¨ª fue. El ej¨¦rcito franc¨¦s quiso frenar el avance alem¨¢n pero lleg¨® tarde siempre a cada cita, cuando los blindados nazis ya hab¨ªan pasado camino de Par¨ªs, como le sucedi¨® a la defensa del Sevilla. Xavi tambi¨¦n ha decidido prescindir de los rodeos en su conquista. De la preparaci¨®n artillera se encarga un ca?onero polaco de apellido Lewandowski.