Cuando el tonto coge la linde, la linde se acaba y el tonto sigue
Est¨¢ claro que, en todos los pueblos hay tontos, pero en la caza, se?ores, no nos podemos permitir ese lujo.
Apenas hace un mes de la apertura de la ¡°general¡± y ya ha aparecido ¡°el tonto del pueblo¡±. Como es habitual en esta servidora, siempre hago hincapi¨¦ en el cuidado a la hora de compartir nuestras fotograf¨ªas de caza y, sobre todo, en redes sociales.
Est¨¢ claro que, en todos los pueblos hay tontos, pero en la caza, se?ores, no nos podemos permitir el lujo. Cierto es que, para gustos, hay mil colores, pero ?Cuidao!, en muchas ocasiones somos nosotros mismos los que sucumbimos a que la imagen del cazador, la visi¨®n de la caza, se vea distorsionada. Y ese color, siempre es muy oscuro.
En esta ocasi¨®n se han hecho virales el v¨ªdeo y las fotograf¨ªas de un individuo (que no cazador) que retrat¨¢ndose desnudo con varias perdices, alguna colgada de sus genitales. Poca gracia hace compartiendo estas fotograf¨ªas y v¨ªdeos. Lo ¨²nico que consiguen es da?ar la imagen de todo un colectivo. ?Ya tiene el primer premio a ¡°tonto del a?o¡±!
Como no pod¨ªa ser de otra manera, la fotograf¨ªa y el v¨ªdeo han sido utilizados por la asociaci¨®n animalista PACMA para atacar a todo el sector cineg¨¦tico y acrecentar su campa?a en contra de la caza, culpando a todos los cazadores de lo que hacen unos pocos desalmados que, desde luego, no son cazadores, ni nos representan, tal como entendemos la caza la mayor¨ªa de nosotros.
Como he recalcado en otras ocasiones, del buen uso de las redes sociales, somos responsables cada uno de nosotros. Y en muchos casos, llevar un tel¨¦fono m¨®vil entre nuestros aperos de caza, lo convierte en la peor de las armas y sin seguro. Momento foto, y sin pensarlo, la subimos ¡°al Facebook, Instagram¡¡±. A tomar por el culo¡ Se ha hecho viral.
No es la primera vez que los mismos cazadores cuelgan im¨¢genes en las redes sociales totalmente desafortunadas que solo contribuyen a desprestigiar la imagen de todo un sector. Se me viene a la memoria la de aquel ¡°valiente gilipollas¡±, que se jactaba de patear a un peque?o zorro al que dio muerte sin ning¨²n tipo de escr¨²pulo. O la que los conejos muertos en el suelo formando las letras del nombre de un partido pol¨ªtico (me da igual de qu¨¦ color fuera. No cabe un tonto m¨¢s¡
La caza es algo m¨¢s que abatir un animal o el momento de apretar el gatillo. Suscribo una vez m¨¢s que los cazadores amamos nuestro campo y dedicamos horas y horas de nuestra vida, adem¨¢s de dinero de nuestro bolsillo, en cuidarlo. Pero eso, por desgracia, no se ve.
Somos un colectivo que estamos expuestos a este tipo de ataques, pero en bastantes ocasiones la responsabilidad es nuestra y solo nuestra.
Las fotograf¨ªas tienen que demostrar ese respeto hacia la pieza abatida, hay que cuidar todos y cada uno de los detalles, y ya no solo por ¡°el qu¨¦ dir¨¢n¡±, sino por el amor que le profesamos a nuestros montes y a la actividad que practicamos. Y si de verdad no sientes ese amor, no caces.
Cuantas veces he visto fotos que, incluso a m¨ª que soy cazadora, me han espantado. ?Por favor, se?ores! ?Qu¨¦ no van a pensar los que no conocen nuestra pasi¨®n? y, ni que decir tiene, ?los que nos atacan constantemente? No alimentemos su odio ni les demos motivos para poder atacarnos.
No nos equivoquemos, la responsabilidad es nuestra y solo nuestra, porque no todo vale. Es una cuesti¨®n de educaci¨®n, pero tambi¨¦n de sentido com¨²n.
El uso de las redes sociales ya es algo para la gran mayor¨ªa, cotidiano en nuestras vidas, pero tanto para lo bueno como para lo malo, son implacables. Una vez subida una imagen o video, es p¨²blico y no hay marcha atr¨¢s. Por ello, desde este rinconcito, os pedir¨ªa una vez m¨¢s que, a la hora de plasmar nuestros d¨ªas de caza, con amigos, de nuestras perchas, del resultado de un rececho espectacular¡ en las diferentes redes sociales, lo hagamos primero con respeto a la pieza abatida, que es lo que se merece; segundo, con sensatez y, tercero, demostrando que los cazadores no somos unos meros aniquiladores, que abogamos por la conservaci¨®n y la caza. Y otra vez, a leer insultos, mentiras, barbaridades de unos pocos que no saben ni a que huele una jara; a ver como por la insensatez de alguno, pagamos todos.
Por supuesto que la caza hay muerte ?toma, pues claro! Pero seamos un poco m¨¢s inteligentes (que nos parecemos a los que nos quieren muy poco o nada), pero hay que mostrar esa muerte, de cualquier especie, con sumo respeto.
El respeto por el animal abatido es lo m¨¢s b¨¢sico. Y si no lo sientes, no eres cazador, insisto: NO CACES.
Por ende, os vuelvo a pedir una vez m¨¢s que, por favor, hagamos un buen uso de las redes sociales. Porque, no todo vale, y como le digo a mi hijo de 13 a?os, lo primero es el respeto hacia la pieza, y os aseguro, ya hace fotos con m¨¢s gusto y elegancia que muchas de las que se suben a internet. Con 13 a?os, pero ?sab¨¦is por qu¨¦? Porque ama el campo, la caza y la conservaci¨®n. A¨²n sin haber cogido en sus manos un arma, ya es un CAZADOR, en may¨²scula.
?Salud y buena caza!