Del brazalete al banquillo: c車mo gestionar la p谷rdida del rol en el equipo
No es imprescindible ni el deportista destronado ni la nueva estrella rutilante que ocupa su lugar.
Estamos hechos para vivir en sociedad, en comunidad, en familia y s赤, tambi谷n en equipo. Bajo una serie de normas, derechos, responsabilidades, funciones, puntos fuertes y d谷biles. Cada uno aportando su mejor val赤a y dejando espacio a los que tienen otras diferentes.
Cada miembro de un equipo, como cualquier miembro de una comunidad, es imprescindible para que el engranaje funcione a la perfecci車n, pero el papel que ocupamos no es eterno y la influencia que ejerce un individuo en el colectivo tampoco lo es.
Cuando hablamos de un equipo, este peque?o universo adquiere una magnitud enorme y mantener una determinada posici車n no solo es una responsabilidad, tambi谷n es fuente de bienestar, confianza y seguridad.
?Qu谷 pasa si ese equilibrio se rompe?
La entrada de un nuevo jugador o un nuevo t谷cnico puede alterar el orden establecido hasta ese mismo momento. As赤 de f芍cil. De la misma manera que lo hace la llegada de un beb谷 a una familia con, hasta el momento, un solo hijo o hija. Salvando las infinitas distancias (los motivos de esa disrupci車n son claramente otros), la gesti車n del rol es algo que deben tener presente los deportistas, tanto aquellos que juegan en equipo como aquellos que compiten en solitario. Sucede, y no se puede mirar para otro lado o dar una pataleta, como en el ejemplo anterior.
Por ese motivo, hoy vamos a poner el foco en un cl芍sico que no siempre se visibiliza. La p谷rdida de ese poder. De ese rol. El descenso. El relevo. Ser deportista de elite conlleva pertenecer a eso mismo: a una elite. Un grupo muy reducido. Solo unos pocos llegan a estar en lo m芍s alto, y unos pocos m芍s pocos a迆n consiguen ser capitanes o l赤deres de su equipo. Sin embargo, nadie es imprescindible y si un deportista quiere volver a ocupar el lugar que cree merecer, hay que gestionar esa reconquista y trabajarlo desde f赤sica y mentalmente.
Nadie es imprescindible
Nadie es imprescindible. No es imprescindible ni el deportista destronado ni la estrella rutilante que ocupa hoy su lugar. Es una cuesti車n de rendimiento, de resultados, de energ赤a, y en eso debemos fijar nuestra atenci車n. Si un t谷cnico o entrenador ha decidido dejar a un deportista en el banquillo es porque su rendimiento es inferior al esperado o al del resto de sus compa?eros. Es as赤 de sencillo y por eso conviene no dejarse llevar por la frustraci車n, la decepci車n o la rabia. Si el rendimiento ha disminuido solo hay algo que podemos hacer: ?aumentarlo!
?C車mo gestionar mentalmente el banquillo?
Lo primero que tiene que hacer un deportista es identificar aquellos aspectos que influyen en su rendimiento y que dependen 100% de 谷l. No podemos mejorar si no sabemos aquello en lo que estamos fallando y trazar alrededor de eso un plan de entrenamientos. Por otra parte, no podemos dejar de lado nuestras fortalezas. Son claves para anclarnos a ellas y que sirvan al deportista de motivaci車n. Si tomamos como referencia estas 芍reas, podremos evaluar nuestra evoluci車n.
Como dijo William Thomson Kelvin (Lord Kelvin), f赤sico y matem芍tico brit芍nico (1824 每 1907): ※Lo que no se define, no se puede medir. Lo que no se mide, no se puede mejorar. Lo que no se mejora, se degrada siempre§. Es decir, el deportista que es relevado, no puede esperar a que las cosas cambien haciendo lo mismo y sin tomarse el tiempo y el esfuerzo de averiguar en qu谷 est芍 fallando y hacer todo lo que est谷 en su mano por mejorar.
Es importante destacar que hay cosas que no dependen del deportista. Sin ir m芍s lejos, la decisi車n que toma el entrenador o t谷cnico. Solo est芍 en su mano superarse para demostrarle y demostrarse que merece salir, que merece jugar. No con palabras y enfados, sino con hechos.
Un mal com迆n pero no visibilizado
Son muchos los deportistas brillantes que &pierden* ese trono. Que de repente, se ven privados de su responsabilidad o su posici車n -y tambi谷n de cierto confort-. En el caso el caso del Jorge Iglesias, hoy tenista en sillas de ruedas y anteriormente jugador de baloncesto en silla de ruedas, el motivo fue la entrada de un fichaje muy bueno. Un compa?ero ol赤mpico hizo que las reglas del juego cambiaran. Iglesias pas車 de ser la estrella a chupar banquillo.
※De estar arriba a no ser nada§
?Qu谷 ocurri車? Uno y otro, el veterano destronado y el reci谷n llegado y nuevo l赤der, tuvieron que reorganizar puestos, roles, funciones. Tuvieron que reencontrarse para que el equipo s赤 o s赤 rindiera al m芍ximo sin que ning迆n integrante se quedara en el camino. Al fin y al cabo, jugar en equipo no es solo estar en el equipo, sino trabajar para que este llegue a lo m芍s alto: se juegue donde se juegue. Si quieres escuchar c車mo gestion車 Iglesias ese momento, aqu赤 puedes encontrar la entrevista.
Otra gran deportista que chup車 banquillo fue Teresa Bernadas, jugadora internacional de hockey sobre patines que se qued車 fuera de la Selecci車n Espa?ola. No hab赤a hecho un mal a?o, pero s赤 ven赤a de una gesti車n. ※Saber gestionar que no te quieran y quedarte fuera es un momento muy duro y me plante谷 dejarlo y decir hasta aqu赤§, comparte. Por suerte no lo hizo, pero no fue f芍cil. ※Pasar de tener todos los minutos a ser el descarte, si no est芍s acostumbrado, es duro§, explica en esta entrevista Bernadas.
Su consejo: relativizar. Rodearse de gente que le record車 lo que vale y lo que mejor sabe hacer. Solo hab赤a dos opciones: o rendirse o entrenar m芍s fuerte que nunca. Eso hizo. ※Ser m芍ximamente competitiva te ayudar a decir: lo que quiero es esto y voy a por ello§, resume.
En esta entrevista sale un elemento clave: el trabajo mental. No solo para lograr volver a su nivel sino para superarlo. La mentalidad es una palanca de cambio que puede hundirnos o catapultarnos y del trabajo que realice un deportista a ese nivel depender芍 en gran parte pueda volver a disputar los minutos que demuestre merecer.