Bar?a dramas

Nos las promet¨ªamos muy felices con el adi¨®s de Ousmane Demb¨¦l¨¦ y el franc¨¦s ha vuelto a Barcelona para ejercitarse con sus todav¨ªa compa?eros en plan venganza. ¡°De m¨ª no se r¨ªe nadie¡±, aseguran que le solt¨® a Xavi en su primera despedida. Veremos cu¨¢ntas m¨¢s nos depara este culebr¨®n de tintes ¨¦picos que comenz¨® con la venta Neymar Jr. al PSG y podr¨ªa eternizarse hasta su regreso, mientras Demb¨¦l¨¦ se ocupa en hacernos llorar.

Dice un primo m¨ªo que nadie puede levantar una presentaci¨®n como la que el extremo franc¨¦s protagoniz¨® en el Camp Nou a finales de agosto de 2017. Aquel d¨ªa, por lo que fuese, a Demb¨¦l¨¦ no le sali¨® ninguno de los trucos que intent¨® ante los miles de aficionados que se dieron cita en el viejo coliseo. No lleg¨® a caerse de bruces, como Marco P¨¦rez, aquel delantero colombiano fichado por el Zaragoza a bombo y platillo, pero casi. Hab¨ªa costado m¨¢s de 120 millones de euros y lo m¨¢s ilusionante de su calamitosa presentaci¨®n fue la certeza de que el Bar?a jam¨¢s pagar¨ªa variable alguna al Dortmund por ganar la Champions League o por ver a Demb¨¦l¨¦ recogiendo el Bal¨®n de Oro.

Pocos clubes en el mundo pueden presumir de un concepto tan dram¨¢tico de la existencia como el Bar?a. Jose Mourinho, que es un poco la Drew Barrymore del f¨²tbol, sol¨ªa achacarlo a ese gusto por el buen teatro tan extendido en Barcelona, vanguardia cultural de Espa?a y, no en pocas ocasiones, tambi¨¦n de Europa. Le falt¨® tiempo al portugu¨¦s para entender a la perfecci¨®n los entresijos sentimentales de un club en el que son¨® para protagonizar E.T, el Extraterrestre y termin¨® encabezando el reparto de Nunca me han besado, algo que nunca llev¨® del todo bien.

El regreso temporal de Demb¨¦l¨¦, el ¨²ltimo cap¨ªtulo del culebr¨®n Neymar Jr., la saga fuga de Ansu Fati, las obsesiones de Xavi por fichar a medio Manchester City, supongo que ante la imposibilidad de fichar a Guardiola, las urgencias financieras¡­ Todo ello conforma el principio aspiracional de un Bar?a que no sabe ser feliz sin abonar de l¨¢grimas el drama suspensorio que todo lo justifica, incluidos seg¨²n qu¨¦ gastos: ma?ana siempre es otro d¨ªa.