Ara¨²jo hizo naufragar el ¡®Viniciusistema¡¯
Lo de ¡®noventa minuti en el Bernab¨¦u son molto longos¡¯ cobr¨® anoche un nuevo sentido. Se hicieron muy largos, s¨ª, pero por aburridos. Fue un partido bien feo, mal arbitrado, con un solo gol, chamb¨®n y milagrero: una p¨¦rdida de Camavinga, una llegada de Kessi¨¦ con remate, rechace de Courtois que pega en Militao, se encamina a la red y en la raya Nacho pifia el despeje. Un gol feo donde los haya, validado por el sexador de pollos despu¨¦s de que lo hubiera anulado en primera instancia Munuera. Kessi¨¦ lanzar¨ªa otro disparo en la segunda mitad que no entr¨® porque lo intercept¨® Ansu Fati. El Madrid no enfoc¨® ning¨²n remate hacia la porter¨ªa. Como lo leen.
El Bar?a sali¨® a verlas venir con mucha gente atr¨¢s y con el acierto de cambiar las posiciones de Kound¨¦ y Ara¨²jo. El primero fue central y el segundo se ocup¨® de Vinicius, por donde fluye el juego del Madrid, en lo que Antonio Romero ha llamado en la SER el ¡®viniciusistema¡¯. De nuevo se busc¨® por ese lado, pero apenas prosper¨®. Ara¨²jo le gan¨® limpiamente. Encima, Vinicius se llev¨® una tarjeta por enmara?arse en un combate de judo con De Jong y se arriesg¨® incluso a la roja por una protesta excesiva a esa tarjeta, una de las contadas que Munuera ense?¨® bien. En general las mostr¨® cuando no deb¨ªa y las guard¨® cuando deb¨ªa sacarlas.
El Madrid puso sobre el campo casi su equipo de gala, mientras al Bar?a le faltaba la flor de su ataque, Pedri, Demb¨¦l¨¦ y Lewandowski, as¨ª que Xavi decidi¨® enfriar el partido, esperando y metiendo cloroformo con alguna posesi¨®n larga. Tras el descanso ya puso el autob¨²s en el ¨¢rea chica dej¨¢ndole al Madrid el campo y el bal¨®n, pero a los blancos les faltaron claridad, nervio y rebeld¨ªa. La Copa no trempa a este club. Mucho Cl¨¢sico, pero el calor del aficionado se agot¨® en los iniciales gritos de ¡°?Hay corrupci¨®n en la Federaci¨®n!¡± y el lanzamiento de billetes con la cara de Laporta. Al madridismo le mueve m¨¢s la hormona el tema de moda que la Copa.