Jo?o F¨¦lix en Mosc¨², Hazard en Madrid
Esta vez s¨ª podremos ver los dos partidos europeos de los madrile?os. El del Atleti va en el primer horario, acorde con el escenario, Mosc¨². Para esas latitudes se pens¨® lo de adelantar algunos partidos, as¨ª que hoy no habr¨¢ que elegir. El Atleti viaja tranquilo, porque va con el horario previsto. Al fin y al cabo, hay permiso para perder en M¨²nich, aunque el resultado resultara estrepitoso. Luego gan¨® en casa al Salzburgo. Con alguna angustia, s¨ª, pero en noche que sirvi¨® para ver por fin al Jo?o F¨¦lix, que se esperaba y no s¨®lo por sus dos goles, sino por la continuidad de su juego. Y repiti¨® doblete y casi actuaci¨®n en Pamplona. Est¨¢ en buena l¨ªnea.
Con ¨¦l, con Luis Su¨¢rez, que hoy regresa, y con el adelantamiento general ordenado por el Cholo para alimentar a ¨¦ste, el Atl¨¦tico vive m¨¢s cerca del gol. Entre eso y las virguer¨ªas del menino su f¨²tbol puede convertirse en algo igual de eficaz pero menos espeso. Que as¨ª sea. Cuando acabe el Atl¨¦tico en Mosc¨² saltar¨¢ al Di St¨¦fano el Madrid, que no va con el horario previsto, como el Atl¨¦tico, sino en -3 puntos, los que se dej¨® en casa ante el Shakhtar. Y eso gracias a aquel empate in extremis en Alemania, cuando en un rapto de desesperaci¨®n atac¨® el ¨¢rea rival con furia y sin juego una vez que se hab¨ªa visto en trance de despe?arse.
Lo de hoy es una final, dice Zidane. Pero esta vez parece que Hazard s¨ª llega a tiempo, como el S¨¦ptimo de Caballer¨ªa en las pel¨ªculas de mi infancia. Apareci¨® fino y chispeante, abri¨® el marcador con un gol pusk¨ªneo que le acredita como diestro con buena zurda, y se entendi¨® (ya se sab¨ªa), con Benzema. Los dos juegan a lo mismo, un f¨²tbol m¨¢s sabio y reposado que el que propone Vinicius, que levanta al espectador del sof¨¢ pero hace fruncir el ce?o a Benzema, obligado a carreras para llegar al ¨¢rea sin seguridad de recibir el bal¨®n. El Inter llega sin Lukaku y en horas bajas. Bueno para el Madrid, que necesita estos puntos como el aire que respira.