Un mundo raro
Un mundo raro. As¨ª se llama una de las canciones que m¨¢s me han emocionado en el repertorio de esta gira latinoamericana de Serrat y Sabina que acaba de concluir en San Jos¨¦ de Costa Rica. Una maravillosa canci¨®n del insigne Jos¨¦ Alfredo Jim¨¦nez. Pues bien, al d¨ªa siguiente de terminar esta gira el d¨ªa 17, nos toc¨® pasar un d¨ªa libre en el hotel de San Jos¨¦ antes de volar a Espa?a el 19. Por eso no sab¨ªa si llamar a esta columna Un mundo raro o Un partido raro.
El partido raro se jug¨® el 18. Un partido raro por las circunstancias sociopol¨ªticas que lo han rodeado, con un resultado raro que nadie preve¨ªa, visto en un lugar raro, un hotel de San Jos¨¦ de Costa Rica, a una hora rara: la una de la tarde.
Un mundo raro.
Tan raro fue ese partido para m¨ª, que me enter¨¦ de que hab¨ªa un jugador que no conoc¨ªa llamado Mendy y pens¨¦ que hab¨ªa escuchado Melendi. Deformaci¨®n profesional o despiste supino. Con lo que queda demostrado mi escaso conocimiento del f¨²tbol. Tan escaso que me sorprendi¨® ver que hab¨ªa dos Valverdes. Comenzamos a ver el partido en el bar del hotel varios compa?eros del staff de la gira. Hab¨ªa dos o tres que iban con el Madrid, uno que iba con el Bar?a, y otros tres que ¨¦ramos del Atleti y que ve¨ªamos sufrir a los partidarios de los otros dos equipos con la sonrisa que nos caracteriza a los del Atleti en estos casos, esa sonrisa de Lee Van Cleef en El bueno, el feo y el malo.
A nosotros nos interesaba un 0-0, pero en caso de que hubiera marcado alguno hubi¨¦ramos preferido que marcara el Bar?a, siempre que no fuera Griezmann, y preferentemente que lo hiciera Messi, para distanciarse m¨¢s si cabe del peluquero de la Juve, y tambi¨¦n hubi¨¦ramos preferido que fuera un gol por debajo de las piernas de Courtois. Y en el 93' a poder ser.
Un mundo raro.
Por cierto, el flamante avi¨®n de Iberia que nos ha tra¨ªdo de San Jos¨¦ a Madrid se llamaba SELECCI?N ESPA?OLA DE F?TBOL.