Toyota no quiso m¨¢s sorpresas
Los japoneses, superados en la clasificaci¨®n, hacen doblete en Sebring, con triunfo para el #7. Podio de Molina con el Ferrari #50. Costa, cuarto en LMP2.
Las carreras de resistencia no se ganan al principio, pero s¨ª se pueden perder. Evitar los problemas en pista, accidentes y acertar con la estrategia, acercan el triunfo. Y de eso sabe m¨¢s que nadie Toyota, que adem¨¢s impuso su ritmo en carrera. Tras ceder la pole ante Ferrari en las 1.000 Millas de Sebring, la marca nipona se llev¨® la prueba americana con doblete. El triunfo fue para el Toyota #7 de Conway, Kobayashi y L¨®pez, seguido por su gemelo el #8 de Buemi, Hartley e Hirakawa. Para los dem¨¢s qued¨® la pelea por el ¨²ltimo pelda?o del podio, que fue para el Ferrari #50 de Molina, Fuoco y Nielsen. Un buen resultado para Maranello, que une este tercer puesto con la pole conseguida en su redebut en el ¡®endurance¡¯. ¡°La base es buena y debemos seguir trabajando y hemos aprendido mucho¡±, dijo el espa?ol en la celebraci¨®n.
En los primeros compases se fueron eliminaron rivales para los japoneses. El caso del 499P #50, coche de la pole, sancionado primero por adelantar mientras el Safety Car estaba en pista y luego por infracci¨®n en boxes. Abri¨® la veda de abandonos el Peugeot #94, con problemas desde la misma salida y luego el¨¦ctricos (regres¨® al asfalto en los ¨²ltimos minutos s¨®lo con el objetivo de recabar informaci¨®n), continu¨® el Glickenhaus con problemas en la caja de cambios, y m¨¢s tarde el gemelo de la casa francesa, el #93 tuvo un toque con el Vanwall que le hizo perder demasiadas vueltas, que este ¨²ltimo a su vez perd¨ªa por puro ritmo.
Pronto se le puso de cara la carrera a Toyota, antes de cumplirse las tres horas. S¨®lo quedaba por dilucidar el orden de los dos coches japoneses en meta y qui¨¦n les acompa?ar¨ªa en el ¨²ltimo escal¨®n del podio: uno de los Ferrari, uno de los Porsche o el Cadillac. Por entonces, Miguel Molina defend¨ªa ese lugar ante el acoso de Kevin Estre con el Porsche #6 en una pelea a brazo partido de los dos coches europeos por los baches y entre doblados, del que sali¨® vencedor parcial el autom¨®vil alem¨¢n. Una gota de agua en el oc¨¦ano, pero que puede servir de muestra de lo que est¨¢ por venir.
Y lo que vino m¨¢s inmediatamente en la segunda mitad de la carrera fue una lucha estrat¨¦gica en los Hypercar con los Toyota sin asumir riesgo en su camino a la primera victoria del a?o, una remontada en LMP2 de Albert Costa con el coche #34 (sal¨ªa 11?, lleg¨® a estar cerca del podio y con la vuelta r¨¢pida de la categor¨ªa gran parte del tiempo como carta de presentaci¨®n en su debut) y un error en el Porsche del Iron Dames que le mand¨® al fondo del grupo de la clase GT tras perder parachoques trasero y difusor en una excursi¨®n por el sembrado. En esta clase, se impuso el Corvette #33, y en la LMP2, el Team JOTA #48, con el coche del Inter Europol de Albert Costa, cuarto. O d¨¦cimo de la general, por delante de los Peugeot, el Vanwall y el Glickenhaus.
Volviendo a la categor¨ªa reina, seg¨²n fue cayendo el sol, accidente del Ferrari #51, cuando iba Pier Guidi al volante (golpe¨® a un GT a la hora de doblarlo, por lo que adem¨¢s fue sancionado), problemas del Vanwall cuando Villeneuve iba a los mandos con la suspensi¨®n da?ada y Porsche cediendo terreno y dejando al podio en un mano a mano entre Cadillac y el Cavallino Rampante. Con la puesta del sol confirm¨® Ferrari, con su unidad #50, del que forma parte Miguel Molina, con Antonio Fuoco y Nicklas Nielsen, su podio en su vuelta a la m¨¢xima clase de la resistencia tras una ausencia de 50 a?os.