Rossi vuelve a ganar
El italiano recuerda lo que es vencer en el Circuito de Misano al llevarse su segundo triunfo sobre cuatro ruedas en el Europa GT World Challenge.
Hace ya un a?o que Valentino Rossi consigui¨® su primera victoria en el mundo de las cuatro ruedas y, aunque la segunda se ha hecho esperar, ha sido de lo m¨¢s especial para el italiano. Todo porque lo ha hecho en el Circuito de Misano, en su casa y frente a toda su gente. No solo aficionados, sino que el italiano ha estado rodeado de los pilotos de su academia, que se aceraron hasta el trazado para mostrar apoyo a su jefe de filas y due?o del equipo VR46 de MotoGP. Y les ha dado la suerte que necesitaba, aunque Il Dottore ven¨ªa avisando todo el fin de semana de su nivel en una pista tan conocida. De hecho, con su BMW de equipo WRT, parti¨® desde la pole en los dos sprints.
No hay que m¨¦rito que merece Maxime Martin, compa?ero de equipo de Rossi y primero en salir a pista en la primera prueba de Misano. Cuando lleg¨® el momento de dar el relevo, el italiano ya solo ten¨ªa el objetivo de mantener el ritmo y la posici¨®n hasta el final de la prueba. Pero no result¨® ser tarea f¨¢cil. Al nueve veces campe¨®n del mundo le cost¨® defenderse de los ataques del otro coche de su equipo, pilotado por Vanthoor y Weerts. De hecho, la lucha fue tan apretada que cruzaron la meta a solo 275 mil¨¦simas, dando al coche 46 como ganador de la prueba. Lo cual, desat¨® la locura en Misano.
¡°Fue duro, pero hermoso. La presi¨®n que sent¨ª fue mucha, pero decid¨ª no pensar en ello y al final sali¨® bien¡±, dijo Rossi una vez finalizada la carrera, en la que estuvo arropado por su gente, junto a pilotos como Pecco Bagnaia, Marco Bezzecchi, Franco Morbidelli y Celestino Vietti. Sin embargo, no pudo cerrar la fiesta por todo lo alto. En la segunda prueba del fin de semana, ya con la noche como protagonista sobre el circuito, Rossi no pudo repetir la haza?a. Aun as¨ª, resultado muy positivo, porque el italiano se llev¨® otro podio, siendo tercero para poner el punto final a una fin de semana inolvidable.