¡°Nosotros est¨¢bamos locos, pero estos lo est¨¢n m¨¢s¡±
Barreda analiza su primera victoria de la edici¨®n, frente a unos rivales con ¡°nivelazo¡±. Ha ajustado la palanca de cambio para no sufrir tanto.
Hab¨ªa ganado Barreda, pero nadie sab¨ªa si Barreda era el ganador. La organizaci¨®n comunicaba una devoluci¨®n de tiempo a Cornejo (25 minutos) con la que bat¨ªa al de Castell¨®n, pero finalmente no fue para tanto y el Dakar vivi¨® otra heroicidad del piloto de HRC. Reci¨¦n lesionado, despu¨¦s de dormir toda la noche con una bolsa de hielo anudada al pie y un dedo que no cab¨ªa en la bota, ha ido encontrando soluciones que le siguen conservando como uno de los grandes favoritos a una carrera donde ¡°el ritmo que llevamos todos es alt¨ªsimo¡±. ¡°Pero ese es el nivel que tiene el Dakar¡± y Joan es consciente de que no hay excusas si el objetivo ¡°es estar ah¨ª (en la lucha por el Touareg)¡±.
El castellonense no las ha puesto en ning¨²n momento. Despu¨¦s de ajustar su posici¨®n en la moto para hacer el cambio de una manera en la que el dedo sufriera lo menos posible, al final ha buscado ¡°la picard¨ªa¡± y ha encontrado soluciones: ¡°Hemos cambiado a una palanca que es m¨¢s alta, porque el problema es cuando meto el pie para levantar la marcha, tengo que tirarme un poco la rodilla adelante para que entre bien¡±. Las horas le han hecho ser consciente de que ¡°con la puntera de la moto, con menos fuerza, entra mejor la marcha¡±, y eso le permiti¨® apretar en una ¨²ltima parte m¨¢s r¨¢pida donde adem¨¢s, los cambios de marcha disminuyeron. El argumento coincide con el momento en el que Barreda comenz¨® a ganar tiempo y a pesar de haber encontrado ¡°algunos puntos dif¨ªciles de navegaci¨®n¡± ha mantenido un buen ritmo que era necesario en una edici¨®n donde ¡°cualquiera de los 12 o 15 que estamos, puede marcharse¡±.
Si quiere ser ¨¦l quien lo consiga, el piloto de HRC sabe que hace falta evitar las ¡°ca¨ªdas y p¨¦rdidas grandes, ese es el gran objetivo¡±. ?Y despu¨¦s? Tocar¨¢ encontrar un h¨ªbrido entre velocidad y seguridad porque eso ¡°de no cometer errores, no sirve. Hoy en d¨ªa tienes que darle gas¡±. Arriesgar tiene sus consecuencias, y si ¡°hay 10 t¨ªos que meten gas, caen 5 o 6, pero los cuatro que quedan son los que ganan¡±. Y Joan quiere estar entre ellos. ¡°El ritmo no para de subir¡±, el castellonense est¨¢ compitiendo ¡°con todo¡±, pero se ha encontrado con un grupo de pilotos que presenta un ¡°nivelazo¡± que coment¨® con Price en el refueling: ¡°Dec¨ªan de m¨ª (que estaba loco), pero ahora hay muchos que lo est¨¢n. Se lo he dicho a Toby ¡®nosotros est¨¢bamos locos, pero estos lo est¨¢n m¨¢s¡±.
En la siguiente etapa le tocar¨¢ defenderse de esas locuras abriendo pista y aunque saldr¨¢ escoltado por un Quintanilla con el que adem¨¢s de marca, tambi¨¦n comparte caravana, hacer el recorrido juntos para que gu¨ªe aquel que lo tenga m¨¢s claro, no es una opci¨®n: ¡°Cuando empiezas a jugar es como MotoGP, pierdes tiempo. Lo mejor es que uno tire y el otro vaya detr¨¢s. Cuando est¨¢s cansado a los 100 kil¨®metros, a lo mejor, si el otro tiene buenas sensaciones puede tirar. Pero hay que hacer tiradas grandes¡±. Ser¨¢ Barreda quien comience con ellas y despu¨¦s, ir¨¢ gestionando durante una etapa en la que si no penaliza demasiado la falta de referencias, puede volver a ganar. Volver¨¢ a predominar la arena y ah¨ª, ha demostrado que puede con todos.