Misi車n imposible
Al Attiyah conquista una etapa ※interminable§ para Carlos Sainz, tercero. El madrile?o volvi車 a pinchar, pero baj車 el ritmo para conservar su ventaja en la general.
Este titular puede recordarles mucho al de una pel赤cula pero sin embargo, puede servir como resumen de lo que ha sido la segunda etapa de este Dakar. Promet赤an la edici車n m芍s exigente de los 迆ltimos tiempos y de momento, las especiales est芍n cumpliendo con esa cualidad. Tan solo es el segundo d赤a de carrera, pero ya se puede decir que la pugna por el Touareg se ha roto en un recorrido repleto de piedras donde se impuso la inteligencia a la velocidad. Eso convirti車 los 430 kil車metros de recorrido en algo ※interminable§ como describi車 Sainz la jornada en su llegada a meta, pero al menos el madrile?o fue de los pocos que puede presumir de haber salido casi intacto de una odisea interminable. Y eso que fue el encargado de abrir pista.
El piloto de Audi defend赤a la posici車n m芍s compleja en el d赤a menos oportuno. Al comienzo se volvi車 a encontrar con un pinchazo que ya vivi車 en la jornada anterior y aunque en esta ocasi車n no acab車 con remontada, s赤 lo hizo con una tercera posici車n que mantiene a Carlos al frente de la general con una ventaja de 2:12 sobre Al Attiyah, el vencedor de la etapa tras robarle el triunfo sobre la l赤nea de llegada al Toyota de Van Loon. Nasser reapareci車 fortalecido por una favorable s谷ptima posici車n de arrancada junto a la que el qatar赤 buscaba atacar. Pero tambi谷n pinch車 y entendi車 que precisamente hoy, no era el d赤a para andarse con tonter赤as despu谷s de los problemas que sufri車 en el d赤a anterior.
La nueva estrategia ayud車 a Al Attiyah a recortar 5:05 segundos con un Carlos que ya advirti車 despu谷s de lograr su victoria, que la ventaja con el de Toyota (era de poco m芍s de siete minutos) pod赤a estar en dos pinchazos o una peque?a p谷rdida. Finalmente estuvo condicionada por la precauci車n que mantuvo abriendo pista para no quedarse en pa?ales con un segundo pinchazo, que en el caso de Loeb, se march車 hasta el tercero. Y eso quiere decir que salvo sorpresa, el franc谷s est芍 viviendo una despedida demasiado prematura del rally.
El piloto de BRX cedi車 casi hora y media con sus rivales, ya que el tercer pinchazo lleg車 sin ruedas de repuesto oblig芍ndole a ralentizar su ritmo al m芍ximo. Aunque no fue el 迆nico coche que pen車 de Overdrive. Todos los Hunter sufrieron en los terrenos pedregosos de una especial que pr芍cticamente deja solos a dos viejos y grandes rivales. Porque salvo Sainz, el resto de Audi tambi谷n experimentaron en primera persona la dureza de un desierto que hizo la jornada imposible para muchos, incluyendo a la mitad de favoritos o una Laia Sanz que marchando 12?, se despidi車 de seguir progresando en una etapa donde b芍sicamente, tocaba saber sufrir.