Los problemas desatan y condenan a Al Attiyah

El ¨²ltimo d¨ªa de carrera no dej¨® nada satisfecho a un Nasser Al Attiyah, al que siempre le ha servido una misma t¨¢ctica para ganar el Dakar. Exprimir su velocidad por encima de todo fue lo que llev¨® al qatar¨ª hasta lo m¨¢s alto hasta en cinco ocasiones. Y aunque para esta edici¨®n ten¨ªa claro que la regularidad y paciencia tambi¨¦n eran ingredientes que aseguraban un Touareg, como demostr¨® Carlos Sainz durante el a?o pasado, junto a un coche nuevo el piloto de Dacia decidi¨® apostar por la paciencia. La cabeza siempre fue en una direcci¨®n y los sentimientos por otra, hasta que la carrera le ha obligado a ser el de siempre. Un problema con la suspensi¨®n trasera derecha en la jornada anterior le conden¨® a salir al ataque y durante la quinta etapa, Al Attiyah sali¨® dispuesto a no dejar nada para nadie. Pero las sanciones acabaron con ¨¦l.

Nasser sali¨® a por todas desde que su cron¨®metro empez¨® a correr durante los m¨¢s de 400 kil¨®metros de especial. Asumir tanta distancia con el pie a fondo pod¨ªa entra?ar riesgos, y aunque sobre el terreno su mayor desencuentro fue un pinchazo que a penas tuvo repercusi¨®n en el resto de etapa para el qatar¨ª, lo peor lleg¨® despu¨¦s de haber cruzado la meta. El qatar¨ª recibi¨® una penalizaci¨®n de 10 minutos en la tabla por perder una rueda de repuesto que le dej¨® sin una victoria, la cual hab¨ªa sido indisctuible hasta ese momento. Y de hecho, sanci¨®n incluida, se le escap¨® por tan solo un segundo frente a Quintero.

Antes de vivir ese final, Al Attiyah hizo todo lo que ten¨ªa que hacer sobre el terreno. El piloto de Dacia se aprovech¨® de su posici¨®n de salida, algo retrasada por los contratiempos del d¨ªa anterior, y aprovech¨® las referencias para estar ¡°de vuelta en el juego¡±. Pero la construcci¨®n del Sandrider ha hecho que se le haya vuelto a complicar la partida, despu¨¦s de que una rueda se quedase por el camino despu¨¦s de hacer un cambio tras el pinchazo.

Con Toyota aprovechando los problemas del resto para dorminar de nuevo la etapa, los desencuentros regresaban a la posici¨®n de Nasser por segunda jornada consecutiva, en el que fue ¡°uno de los mejores d¨ªas en el Dakar¡± para Ekstrom. Pero no tanto para Ford. Nani Roma sufri¨® un accidente con Vitse en el kil¨®metro 203, y el Raptor del piloto espa?ol acab¨® bastante afectado en el lateral y la parte frontal del copiloto. Pero afortunadamente, tanto Nani como ?lex Haro pudieron bajar del coche por su propio pie; aunque deber¨¢n esperar a la llegada de la asistencia para continuar.

La pareja espa?ola tiene todav¨ªa un largo d¨ªa por delante y vuelve a recibir un rev¨¦s de esta carrera, en la que sin hacer demasiado, Ekstrom sigue conservando todas sus opciones de ganar el Dakar. Como tambi¨¦n un Lategan que sigue comandando la general. El piloto de Toyota fue incapaz de meterse en la lucha por la victoria y tampoco encontr¨® un hueco en el podio. Pero al menos logr¨® contener a uno de sus principales rivales en la general. Despu¨¦s de un gran d¨ªa para Al Rajhi durante la etapa cuatro, en esta ocasi¨®n el piloto de Overdrive finaliz¨® la especial justo por detr¨¢s de su compa?ero de marca. Un resultado que le impidi¨® alterar la jerarqu¨ªa de una general donde s¨ª se acerca el Ford de Mattias. El sueco est¨¢ a 20 minutos de la primera posici¨®n, mientras que Al Attiyah vuelve a quedarse a tres triunfos de igualar el r¨¦cord de victorias en el Dakar (las 50 de Vatanen y Peterhansel) y 35 minutos de la cabeza.