Binder es un ¡®Springboks¡¯: ¡°Nos vamos a cargar a los All Blacks¡±
¡°Me encanta ver cualquier tipo de deporte, pero por supuesto que la Copa del Mundo de rugby es especial, y m¨¢s especial cuando Sud¨¢frica est¨¢ en la final¡±, dice.
Entrenido s¨¢bado en el paddock del Chang International Circuit de Tailandia m¨¢s all¨¢ de lo que deparen las motos en la pista. Hay mucho futbolero entre la caravana mundialista, con lo que el cl¨¢sico de esta noche entre Bar?a y Real Madrid da que para m¨¢s de una charla prepartido y para la organizaci¨®n de planes nocturnos, porque con la diferencia horaria viene mucho mejor la hora del partido estando en esta parte del mundo (21:15) que estando en casa para los espa?oles (16:15), la hora de la siesta o la sobremesa familiar. Pero adem¨¢s de eso, que es mucho, tambi¨¦n se disputa hoy la final de la Copa del Mundo de rugby, un apasionante Nueva Zelanda-Sud¨¢frica que tiene inquieto y esperanzado a un piloto de MotoGP...
El sudafricano Brad Binder, como no pod¨ªa ser de otro modo, es un Sprinboks y conf¨ªa en los suyos a muerte: ¡°Creo que nos vamos a cargar a los All Blacks, pero ya veremos....¡±. El campe¨®n de Moto3 le dijo esto a AS ri¨¦ndose, y al preguntarle si era muy seguidor de los suyos, contest¨®: ¡°S¨ª, por supuesto. Me encanta ver cualquier tipo de deporte, pero por supuesto que la Copa del Mundo de rugby es especial, y m¨¢s especial cuando Sud¨¢frica est¨¢ en la final¡±. Se nota que lo siente, porque desde hace varias carreras lleva detr¨¢s visible ¡®GO BOKKE¡¯, que es el grito de guerra de los sudafricanos para animar a los suyos y, adem¨¢s, tiene desplegada en su oficina del circuito la bandera de su pa¨ªs.
Sud¨¢frica y Nueva Zelanda llegan a este partido bautizado como la madre de todas finales con tres t¨ªtulos cada una, con lo que la selecci¨®n que gane lograr¨¢ el cuarto t¨ªtulo, m¨¢s que nadie. Al preguntarle a Binder por d¨®nde pasa la clave de la victoria, se borra: ¡°Ni idea, est¨¢s preguntando al tipo equivocado. Me gusta mucho verlo y apoyar a mi equipo, aunque no s¨¦ demasiado m¨¢s all¨¢ de esto. Hemos hecho algunos buenos mundiales, como la final de 1995, que fue ¡®the special one¡¯ (la de Mandela entregando la copa), y espero que se pueda repetir este fin de semana¡±.