FERNANDO ALONSO
El d¨ªa que Alonso cumpli¨® el sue?o de todo un pa¨ªs
Hoy se cumplen 15 a?os de la consecuci¨®n de su primer t¨ªtulo mundial de F¨®rmula 1 en Brasil.
El objetivo m¨¢s anhelado
El momento de la rabia, de la felicidad desatada, ese m¨ªtico ¡®Toma, toma, toma¡¡¯ que emo-cion¨® a todo un pa¨ªs y simboliz¨® la consecuci¨®n de su primer t¨ªtulo mundial de F¨®rmula 1. Fer-nando Alonso terminaba tercero el GP de Brasil en Interlagos despu¨¦s un a?o casi perfecto, con siete victorias y ocho podios, cuatro segundos y cuatro terceros. Subi¨® el caj¨®n todas las carreras que pudo acabar, excepto M¨®naco y Hungr¨ªa, con un abandono y la carrera de India-n¨¢polis que no corri¨® por los neum¨¢ticos Michelin. Ese d¨ªa de hace tres lustros fue el m¨¢s joven en conseguir proclamarse campe¨®n de F1. ¡°En las ¨²ltimas vueltas, comenc¨¦ a escuchar muchos ruidos en el coche. Solo cuando vi la bandera a cuadros pude permitirme sentirme feliz¡±, dijo aquel 25 de septiembre de 2005.
Malasia, el comienzo de todo
Un par de temporadas antes, Alonso ya hab¨ªa sorprendido al mundo con su primera pole en Malasia y en el a?o de su primer t¨ªtulo lograr¨ªa tambi¨¦n su primer triunfo en el circuito de Sepang. Arranc¨® desde la pole, abandonaba a su compa?ero Fisichella, que hab¨ªa ganado en Australia, y completaban el podio Trulli y Heidfeld. Por primera vez en la historia, un espa?ol lideraba el Mundial. Fernando ganar¨ªa tambi¨¦n la tercera carrera en Bahrain.
Contra la leyenda de Schumacher
¡°Uno de los pistones del propulsor RS25 estaba seriamente da?ado en su cabeza desde el GP de Bahrain. Para que aguantara la carrera de Imola, decidieron inutilizar casi en su totalidad el funcionamiento del cilindro afectado, que perd¨ªa compresi¨®n de forma radical. Es decir, que Alonso gan¨® a Schumacher con un cilindro menos de los diez de su coche y un alt¨ªsimo riesgo de rotura¡±. As¨ª contaba AS la gesta del asturiano en aquella apasionante carrera. M¨¢s tarde, Alonso logr¨® otra de sus victorias m¨¢s recordadas en San Marino, aguantando vuelta tras vuelta las once que Schumacher intent¨® sin ¨¦xito superar al espa?ol. Era una suerte de en-trega del testigo del ¡®Kaiser¡¯ a la promesa que ya era una realidad, aunque en 2006 volver¨ªan a luchar por el t¨ªtulo.
Nace la ¡®Alonsoman¨ªa¡¯
Con un circuito de Barcelona absolutamente entregado al piloto espa?ol, la Alonsoman¨ªa y la marea azul tomaron las gradas. Alonso luch¨® hasta el l¨ªmite contra el McLaren-Mercedes de Kimi Raikkonen, pero finalmente termin¨® segundo tras un problema con uno de sus neum¨¢-ticos. Esos compuestos de Michelin, en cualquier caso, y c¨®mo se adapt¨® Fernando a ellos fueron claves para su ¨¦xito.
Sin podio en M¨®naco
En M¨®naco se qued¨® fuera del podio por primera vez en el a?o, cuarto despu¨¦s de que un accidente le hiciera perder tiempo en boxes. Pero lleg¨® Nurburgring y en el GP de Europa gan¨® con una de sus geniales remontadas. Sal¨ªa sexto, pero desde el inicio fue ganando posi-ciones con su Renault azul hasta lograr la victoria, presionando a Raikkonen hasta provocar el error del finland¨¦s, que sufri¨® un accidente.
Su primer fallo en Canad¨¢
Iba l¨ªder, buscaba la victoria, pero esta vez lleg¨® el error humano. Siete vueltas despu¨¦s de que abandonara por un fallo mec¨¢nico su compa?ero Fisichella, Alonso se fue largo tras la curva cuatro de Montreal y choc¨® contra el muro. Lleg¨® a boxes, pero tuvo que retirarse. Y en la novena del a?o, Indian¨¢polis, no particip¨® por problemas de seguridad con los neum¨¢ticos Michelin, lo hicieron solo los seis pilotos de Bridgestone. Un espejismo en un a?o sensacio-nal¡
De regreso a Europa y al ¨¦xito
La carrera de Francia, en casa de Renault, fue un ¨¦xito total para Alonso en Magny Cours, sal¨ªa en la pole y logr¨® una victoria, como dir¨ªa un cl¨¢sico, sin paliativos. Kimi, su gran rival ese a?o, arrancaba decimotercero, pero solo pudo llegar al segundo puesto. En Silverstone ser¨ªa se-gundo, mientras que en Alemania lograr¨ªa el triunfo en una de esas carreras en las que se demostraba que el motor Mercedes era m¨¢s r¨¢pido que el V10 del Renault, pero menos fia-ble.
Templado hasta el ¨¦xtasis final
A partir de Alemania, Alonso no volver¨ªa a ganar, ni en Hungr¨ªa, (su peor resultado del a?o con un und¨¦cimo puesto tras el toque con el coche de Ralf Schumacher), siendo segundo en Turqu¨ªa, Italia y B¨¦lgica. As¨ª lleg¨® a la cita decisiva de Brasil, donde pod¨ªa proclamarse cam-pe¨®n matem¨¢ticamente. Fernando logr¨® la pole y Raikkonen le ten¨ªa que quitar cinco puntos para arrebatarle el Mundial. En carrera Fernando vio que los McLaren eran significativamente m¨¢s veloces y se conform¨® con ser tercero tras Kimi y Montoya.
El resultado necesario
Raikkonen gan¨®, pero solo le rob¨® dos puntos al genio astur gracias a su tercera posici¨®n. Y lleg¨® el ¨¦xtasis, el momento para el que hab¨ªa luchado toda su vida y con el que hizo feliz a todo un pa¨ªs. Parec¨ªa una utop¨ªa, pero se convirti¨® en una realidad. Y es que siempre, siem-pre, hay que luchar por los sue?os.
La locura en Oviedo
Unos vaqueros, una camisa blanca y un chaval asturiano de veinticuatro a?os que, desde ese momento, se convert¨ªa en una leyenda del deporte. Fernando Alonso se?alando a una multi-tud en Oviedo, banderas azules al aire celebrando un imposible, que un piloto espa?ol logra-se el t¨ªtulo mundial de F¨®rmula 1. Hasta ese momento solo un podio en la prehistoria de la F1 por el Marqu¨¦s de Portago; ahora, tras Alonso, a¨²n esperamos la victoria de otro espa?ol en un gran premio¡ y ojal¨¢ que nuevas coronas.
