El padre Miguel de ¡®Aqu¨ª no hay quien viva¡¯ revela el secreto tras una de las mejores escenas de la serie: ¡°Sal¨ª del paso improvisando¡±

¡®Aqu¨ª no hay quien viva¡¯ es una de las series m¨¢s queridas y recordadas de la ficci¨®n televisiva patria. No solo destac¨® por las interpretaciones y los divertidos enredos de sus personajes principales, sino tambi¨¦n por su gran elenco de secundarios, como el entra?able padre Miguel. Manuel Mill¨¢n, el actor que dio vida al p¨¢rroco, ha revelado recientemente cu¨¢l fue el secreto del ¨¦xito de una de sus escenas m¨¢s memorables: c¨®mo intent¨® salvar la situaci¨®n en la fallida boda de Emilio y Roc¨ªo. Para ello, improvis¨® la canci¨®n ¡°Vamos, vamos, que nos casamos¡±.

El ¡°Vamos, vamos, que nos casamos¡± del padre Miguel en ¡®Aqu¨ª no hay quien viva¡¯ fue fruto de la improvisaci¨®n de Manuel Mill¨¢n

En un episodio del podcast Casi Lista, Casi Guapa emitido el pasado 24 de febrero de 2025, Manuel Mill¨¢n, el actor del padre Miguel en ¡®Aqu¨ª no hay quien viva¡¯, revel¨® un secreto in¨¦dito de la serie. El m¨ªtico ¡°Vamos, vamos, que nos casamos¡± que cant¨® en la boda de Emilio y Roc¨ªo en ¡®?rase una boda¡¯ (T2E13), fue completamente improvisado. Tal y como contaba ¨¦l mismo: el guion de la secuencia le daba instrucciones m¨ªnimas, por lo que tuvo que usar su imaginaci¨®n y su talento para continuar con la desternillante escena.

¡°Lo de ¡®Vamos, vamos, que nos casamos¡¯ se me ocurri¨®. Tanto Alberto como Laura Caballero nos dejaban... no improvisar, pero bueno, de vez en cuando s¨ª lanzarnos. Entonces, vi que en esa secuencia dice ¡®El padre Miguel canta: vamos, vamos, que nos casamos¡¯, pero solo ¡®El padre Miguel canta¡¯. No te pone ni c¨®mo sigue el ¡®Vamos, vamos¡¯, ni qu¨¦ m¨²sica y tal. Entonces, como vi que la secuencia segu¨ªa grabando, y Laura no cortaba y tal, pues yo me lo invent¨¦ y sal¨ª del paso improvisando¡±, relataba Mill¨¢n.

El resultado de esta improvisaci¨®n del int¨¦rprete fue una de las escenas m¨¢s desternillantes de toda la serie. La boda entre Emilio y Roc¨ªo se fue al traste porque Bel¨¦n interfiri¨® en ella usando el transmisor que utiliz¨® Emilio para copiar en su examen de acceso a la universidad m¨¢s atr¨¢s en el mismo episodio. Bel¨¦n confes¨® su amor hacia Emilio en pleno momento del ¡°S¨ª, quiero¡±, lo que le hizo dudar, y provoc¨® que Roc¨ªo descubriese lo que le estaba diciendo a trav¨¦s del aparato. Esto fue la mecha que prendi¨® la discordia entre otros invitados, como Juan y Andr¨¦s, tambi¨¦n llegaron a las manos por las sospechas de infidelidad con Isabel, culminando en una gran trifulca. Para intentar salvar la situaci¨®n, el padre Miguel se puso a cantar y tocar la guitarra, pero sin ¨¦xito a la hora de apaciguar los ¨¢nimos. Cuando Luc¨ªa le pregunt¨® que qu¨¦ hac¨ªa, el personaje replicaba que ¡°Como esto se hunde, pues como en Titanic, hija m¨ªa, un poquito de m¨²sica¡±.

Este momento no solo fue uno de los m¨¢s divertidos de toda la serie, sino tambi¨¦n un gran punto de inflexi¨®n para el personaje, cuyo desarrollo quedar¨ªa marcado durante el resto de ¡®Aqu¨ª no hay quien viva¡¯. En sus sucesivas apariciones durante el resto de episodios y temporadas, se explor¨® m¨¢s a fondo la faceta de cantautor del padre Miguel, que versionaba canciones como ¡®Buler¨ªa¡¯ de David Bisbal, pero modificando la letra para hacerla m¨¢s religiosa y apropiada para ser cantada en actos lit¨²rgicos.

Este tipo de improvisaciones demuestran que, en ocasiones, los momentos m¨¢s memorables de una serie provienen de guion detallado, sino de la espontaneidad de sus actores. La falta de instrucciones claras llev¨® a Manuel Mill¨¢n a continuar con la escena con creatividad, y lo que podr¨ªa haber sido un simple relleno o una nota c¨®mica para la secuencia termin¨® convirti¨¦ndose en un detalle que defini¨® a¨²n m¨¢s la personalidad del padre Miguel. En el mundo de la ficci¨®n, la naturalidad y la capacidad de reacci¨®n pueden ser tan importantes como el mejor de los guiones, y el ¡®Vamos, vamos, que nos casamos¡¯ es una prueba perfecta de ello.