Cr¨ªtica
Kepler Sexto B, un entra?able Quijote espacial en la era moderna
Alejandro Su¨¢rez Lozano abraza la f¨¢bula y construye una pel¨ªcula de tem¨¢tica compleja a trav¨¦s de dos personajes dispares.
Kepler, planeta lejano, duro e inclemente. All¨ª se encuentra Jon¨¢s, un astronauta de la NASA aislado en su nave espacial, la Ori¨®n. Su ¨²nica compa?¨ªa es una especie de droide que lo asiste en las tareas cotidianas y que controla los sistemas de a bordo. Los alien¨ªgenas tocan a la puerta y la amenaza se cierne sobre ¨¦l, ya vienen. La realidad, por rara que parezca, es que no hay ni Kepler ni astronauta ni alien¨ªgenas. Kepler Sexto B, la ¨®pera prima de Alejandro Su¨¢rez Lozano, es una f¨¢bula social, un filme que pone en relieve ciertos problemas contempor¨¢neos a trav¨¦s de los ojos de un d¨²o protagonista de lo m¨¢s peculiar.
Karra Elejalde se introduce en la piel de Jon¨¢s, un papel que interpreta con gran sensibilidad y sin dejar de lado los matices. Como Don Quijote de la Mancha, el personaje ha construido un mundo de fantas¨ªa a su alrededor: no imagina caballeros andantes ni gigantes, sino naves espaciales y planetas yermos . El sexto B se ha convertido en un b¨²nker, decorado como una nave espacial. El protagonista se vale de toda una serie de objetos del d¨ªa a d¨ªa, lo que confecciona una escenograf¨ªa que llama la atenci¨®n por el tipo de artesan¨ªa que atesora.
El viaje emocional (y espacial) de Jon¨¢s y Zai
Zai (Daniella Pezzotti) se muda al bloque de pisos en el que vive Jon¨¢s. Esta ni?a hu¨¦rfana vive una situaci¨®n l¨ªmite, pues ha perdido a su madre y se enfrenta a su padrasto, una persona en paro que se da la bebida y que termina maltrat¨¢ndola. En ese contexto, Jon¨¢s y Zai se conocen y forjan una relaci¨®n singular. La ni?a le sigue el juego, se hace pasar por capitana y va descubriendo retazos de su pasado. Al mismo tiempo, el Sexto B se convierte en una especie de refugio para Zai.
En la comunidad de vecinos, no todo el mundo ve con buenos ojos la situaci¨®n del anciano, al que el banco pretende desahuciar. La mezquindad humana sale a relucir porque hay intereses econ¨®micos detr¨¢s. Adem¨¢s, pocos est¨¢n dispuestos a ayudar a Jon¨¢s, aunque uando conoce a Zai la situaci¨®n de ambos cambia poco a poco.
Kepler Sexto B es una f¨¢bula que entreteje una historia sencilla pero profunda, humana y c¨¢lida; deshumanizada y fr¨ªa. Los contrastes surgen de la propia naturaleza de las personas, capaces de lo mejor y de peor. Al final, deja un poso de esperanza que demuestra que no todo est¨¢ perdido, ni en la Tierra ni en Kepler ni el sexto B.