Avance
Impresiones finales de Star Wars Outlaws. Buscar la libertad en una galaxia de criminales y cazarrecompensas
Probamos durante m¨¢s de 4 horas el esperado juego de Massive Entertainment, que saldr¨¢ a la venta el 30 de agosto en consolas de nueva generaci¨®n y PC.
La Primera Estrella de la Muerte ha volado por los aires. Sus restos se han dispersado por la galaxia y se han convertido en un s¨ªmbolo, en la chispa de la esperanza para la Rebeli¨®n. Los insurgentes aprietan y el Imperio Gal¨¢ctico responde con mano de hierro: orden, control, opresi¨®n y castigo, el modus operandi de toda tiran¨ªa. En un r¨¦gimen corrupto y totalitario como el de Palpatine, el crimen organizado florece y opera con la impunidad de saberse intocables. Ambientado entre ¡®El Imperio Contraataca¡¯ y ¡®El Retorno del Jedi¡¯, Star Wars Outlaws es un videojuego que desciende hasta los bajos fondos, un submundo de g¨¢nsteres y pistoleros que viven por y para los cr¨¦ditos.
Kay Vess es como una equilibrista. La protagonista del nuevo t¨ªtulo de Massive Entertainment interact¨²a con los sindicatos, colabora con ellos, cumple contratos y viaja de aqu¨ª para all¨¢ en busca de la libertad. Pero, ?es posible conseguirla cuando el peligro es real y constante? Favorecer a unos conlleva el desprecio de otros, alimenta la venganza y fomenta el baile de vibrocuchillos. Todos luchan por la hegemon¨ªa porque rige la ley del m¨¢s fuerte. Sin embargo Kay no es leal a un ¨²nico grupo, pues su objetivo no es ascender en la jerarqu¨ªa de Crimson Dawn o de los Hutts, sino liberarse de las cadenas y recorrer su propio camino. En otras palabras, resulta imposible contentar a todos, por lo que las decisiones influyen en las relaciones con los diversos sindicatos, lo que tiene su reflejo en la jugabilidad.
Las telara?as del crimen se ha explorado en otros productos de la saga, era uno de los ejes centrales de Star Wars 1313, un videojuego altamente esperado en su d¨ªa, pero que fue cancelado tras el cierre de Lucas Arts. La producci¨®n de Ubisoft recupera la tem¨¢tica y la expande a trav¨¦s de un mundo abierto que recorre la galaxia. Lo hab¨ªamos visto en v¨ªdeo, pero ahora por fin hemos podido viajar por uno de estos mundos. Dec¨ªa el director creativo Julian Gerighty que su estudio tiene un ADN particular, puesto que no siempre ha sido parte de Ubisoft. Y tiene raz¨®n, Outlaws no es Far Cry o Assassin¡¯s Creed con la skin de ¡®Star Wars¡¯, en un t¨ªtulo con una identidad distintiva.
As¨ª es el mundo abierto de Star Wars Outlaws
La luna de Toshara es uno de los planetas in¨¦ditos que Massive Entertainment ha dise?ado junto a Lucasfilm. Su ciudad se esculpe en la monta?a, un concepto muy potente en lo visual, que da paso a una urbe de callejuelas, peligros y diversi¨®n. En sus avenidas viven ciudadanos de todas las especies, humanos y alien¨ªgenas de alta y baja estofa. Tambi¨¦n se puede ver a algunos soldados de asalto, as¨ª como a imperiales de mayor rango. La urbe es, dig¨¢moslo as¨ª, el centro neur¨¢lgico donde confluye todo. De ah¨ª que los sindicatos controlen sectores enteros, accesibles solo para miembros y personas autorizadas.
Pero no todo sucede en las ciudades, los m¨¢rgenes tambi¨¦n son importantes. Star Wars Outlaws construye su mundo abierto como una caracter¨ªstica intr¨ªnseca de su dise?o, que en parte transmite la vastedad de la galaxia. Las sensaciones a bordo del speeder son fant¨¢sticas, no solo porque viajar sobre este veh¨ªculo te hace sentir en el universo de ¡®Star Wars¡¯, sino porque hacerlo es tambi¨¦n muy divertido. Como en otros t¨ªtulos, los desarrolladores han implementado algunos eventos de mundo que crean situaciones emergentes. Por ejemplo, un tiroteo que deviene en una persecuci¨®n de kil¨®metros por las llanuras de Toshara. En este tipo de previews nunca da tiempo a profundizar lo deseado, ya que se suele seguir la historia principal, pero parece que el mundo est¨¢ cargado de contenido principal y secundario.
No es un videojuego que d¨¦ las cosas mascadas, en el sentido de que el jugador debe aprender a orientarse, colocar marcadores y elegir rutas concretas para los destinos m¨¢s complejos. La situaci¨®n es la siguiente: la nave de Kay est¨¢ averiada y necesita adquirir una serie de piezas para repararla y abandonar el planeta. Pero la vida no es sencilla y la gente no hace favores por las buenas, as¨ª que ha de cumplir trabajillos diversos. Por desgracia, la pieza que requiere se encuentra en el almac¨¦n de los sindicatos, as¨ª que no le queda otra que entrar a robarla.
Infiltrarse puede ser m¨¢s f¨¢cil o dif¨ªcil en funci¨®n de la relaci¨®n de Kay con los sindicatos. El juego incorpora un sistema de reputaci¨®n que afecta a la interacci¨®n de la protagonista con las bandas de g¨¢nsteres y con los escenarios. En nuestra partida, la cazarrecompensas se hab¨ªa congraciado con Crimson Dawn, de manera que estos nos dejaron entrar en sus dominios. Eso no implica que todas las zonas sean accesibles, algunas quedan relegadas a miembros del sindicato, por lo que habr¨¢ problemas si la detectan husmeando.
El sigilo, a veces imprescindible
Retomando el hilo de la infiltraci¨®n anterior, se vislumbran dos alternativas: acceder al sector dominado por los Pyke o hacerlo en el de Crimson Dawn. Teniendo en cuenta que se lleva bien con estos ¨²ltimos, dicha opci¨®n entra?a un menor riesgo. En este punto nos topamos con una de las decisiones de dise?o m¨¢s controvertidas, porque puede conducir a la frustraci¨®n: en partes espec¨ªficas del juego el sigilo es obligatorio, lo que se traduce en que si te pillan no queda otra que repetir desde el punto de control anterior. Si ocurre en repetidas ocasiones, la relaci¨®n con el sindicato amigo se ir¨¢ deteriorando, de modo que al final no te dejar¨¢n entrar y tendr¨¢s que buscar una ruta alternativa.
El juego ofrece herramientas para completar las secciones de sigilo, pero una de las m¨¢s importantes es el amiguito de Kay, el peque?o Nix. Mediante un men¨² de tipo radial, podemos pedirle que despiste al enemigo, que lo ataque o que realice ciertas acciones. Al mismo tiempo, la protagonista ha de tener en cuenta la disposici¨®n de los enemigos, buscar las rutas m¨¢s favorables y explorar los escenarios para activar o desactivar los mecanismos que nos permitan avanzar a la siguiente secci¨®n. Nos ha costado completar esta parte, quiz¨¢ porque hab¨ªa much¨ªsimos enemigos y la disposici¨®n parec¨ªa un tanto err¨¢tica. Encontrar huecos para sortearlos nos result¨® dif¨ªcil y nos pillaron una y otra vez, aunque al final conseguimos abrirnos paso.
Hagas lo que hagas, en ocasiones la situaci¨®n se descontrola y los enemigos se ponen en alerta m¨¢xima. A partir de ese momento, el sigilo deja de ser el ¨²nico camino. Las mec¨¢nicas asociadas a Nix son un soplo de aire fresco e introducen opciones estrat¨¦gicas diversas. Por lo dem¨¢s, este aspecto es bastante conservador y no reinventa la rueda: podemos incapacitar a los enemigos por la espalda, destruir las c¨¢maras de seguridad para que no nos detecten o escondernos entre la hierba alta, a la espera de que uno de los malos se aproxime lo suficiente para dejarlo inconsciente. Si nos descubren es posible que llamen a refuerzos y tengamos que liarnos a tiros contra un sinf¨ªn de enemigos. Por otro lado, hay otro problema que subyace y que es com¨²n a todos los juegos de Ubisoft: la inteligencia artificial no siempre es todo lo precisa que deber¨ªa ser.
Combate en tierra y en el espacio
Coment¨¢bamos en nuestra preview anterior que hay algo del ADN de The Division en los tiroteos, pero sin tanta profundidad y un tanto toscos. Las coberturas son autom¨¢ticas (el personaje se cubre tan pronto como se acerca a una estructura que lo permita) y los tiroteos no ofrecen demasiadas opciones. De alguna manera, los desarrolladores quer¨ªan representar a una protagonista m¨¢s humana, sin conexi¨®n con la Fuerza ni habilidades especiales. El movimiento es algo lento, pesado, sin llegar a ser torpe. Dispone de una pistola bl¨¢ster que tiene varias builds intercambiables, ¨²tiles para distintos arquetipos de enemigos. En este t¨ªtulo, los enfrentamientos son duros y se solucionan en cuesti¨®n de segundos: un despiste, un par de tiros y Kay morder¨¢ el polvo, es humana al fin y al cabo.
Despu¨¦s de robar la pieza del distrito de los Pyke y de escapar con vida de forma ag¨®nica, la muchacha se sube al speeder y llega hasta su nave. Objetivo conseguido: se encienden los motores y la Trailblazer emprende el vuelo. Pese a que la salida a la atm¨®sfera esconde un tiempo de carga encubierto se disimula muy bien, pues el jugador puede seguir controlando la nave. En este caso, toca enfrentarse a algunos enemigos en el espacio. Vale que los combates de naves no sean excesivamente intrincados, pero las luchas son divertidas y funcionan bien. Se implementa un modo seguimiento que permite apuntar m¨¢s f¨¢cilmente. Y s¨ª, el efecto de la velocidad de la luz es magn¨ªfico. No tuvimos tiempo de juguetear con esto, pero ser¨¢ posible realizar modificaciones en la nave.
La siguiente parte de la demo se centra en una infiltraci¨®n en una base imperial. Las mec¨¢nicas de sigilo vuelven a ser protagonistas, pues si alguien activa la alarma tendremos que empezar desde el ¨²ltimo punto de control. En este punto, debemos completar varios puzles para seguir avanzando, principalmente uno de ganz¨²as, que se resuelve escuchando el sonido y pulsando el bot¨®n en el momento preciso, seg¨²n lo precise el ritmo. Tambi¨¦n tendremos que hackear ordenadores eligiendo los s¨ªmbolos correctos. Adem¨¢s, Nix puede pulsar botones y despejar caminos. No existe una ruta fija, los desarrolladores se han asegurado de que haya distintas oportunidades.
Una mano ganadora
La segunda demo es la misma que MeriStation prob¨® durante el Summer Game Fest. Tiene lugar en Kijimi, un planeta nevado que apareci¨® por primera vez en ¡®Star Wars Episodio IX: El Ascenso de Skywalker¡¯. La misi¨®n consiste en robar una reliquia, para lo que el sigilo es recomendable, aunque tarde o temprano tambi¨¦n nos liaremos a tiros. A continuaci¨®n, exploramos la ciudad y probamos alguna misi¨®n secundaria, que nos lleva a jugar una partida a Sabbac, el juego de cartas m¨¢s popular de la galaxia. Las reglas siempre han sido algo difusas, pero Massive Entertainment lo ha adaptado creando una variedad conocida como el Sabbac de Kessel. La partida se desarrolla a lo largo de varias rondas de tres turnos cada una, en las que cada jugador recibe una mano de dos cartas, cada una con un valor de 1 a 6. El objetivo es conseguir una mano de Sabacc o una mano con el menor valor posible. Por supuesto, Kay tiene la opci¨®n de hacer trampas y utilizar a Nix para que esp¨ªe las cartas del oponente. ?Ojo, que te pueden pillar!
Star Wars Outlaws nos ha dejado buenas sensaciones, pero tambi¨¦n alguna que otra duda sobre la profundidad en ciertos aspectos jugables. Toca muchos palos y alguno se queda un poco cojo, como el de las plataformas, que son mucho menos ¨¢giles que las de Star Wars Jedi: Survivor. Con todo, contiene muchos detalles interesantes que estamos deseando probar. El juego saldr¨¢ a la venta el pr¨®ximo 30 de agosto en PS5, Xbox Series X, Xbox Series S y PC. MeriStation estar¨¢ puntual para el an¨¢lisis.
- Acci¨®n
- Aventura
Star Wars Outlaws es una aventura de acci¨®n a cargo de Massive Entertainment y Ubisoft para PC, PlayStation 5 y Xbox Series. Experimenta el primer juego de mundo abierto de Star Wars, ambientado entre los acontecimientos de El Imperio contraataca y El retorno del Jedi, y explora planetas ¨²nicos por toda la galaxia, tanto nuevos como cl¨¢sicos. Arri¨¦sgalo todo encarnando a Kay Vess, una buscavidas novata que busca la libertad y la manera de comenzar una nueva vida junto con Nix, su compa?ero de viaje. Lucha, roba y enga?a a los sindicatos del crimen de toda la galaxia y ¨²nete a la lista de los m¨¢s buscados.