Cine
Cr赤tica de Barbie, el Barbenheimer tiene una clara ganadora
Fresca, divertid赤sima y provocadora. Greta Gerwig (Lady Bird, Mujercitas) se marca con Barbie la pel赤cula del verano junto a unos Margot Robbie y Ryan Gosling plet車ricos.
El Barbenheimer tiene un claro ganador. Bueno, dos. El primero son los espectadores. El segundo es Greta Gerwig. La directora de Lady Bird y Mujercitas ha vuelto a demostrar su talento, su capacidad para condensar la esencia contempor芍nea en historias y retazos de nuestro pasado. Si anta?o fue una novela, hoy es una mu?eca. En ambos casos un producto inherente de la cultura occidental. En ambos casos un pelicul車n. Fresca, divertid赤sima y provocadora. Capaz de llevarte de la carcajada a ese fren谷tico parpadeo con el que todos hemos evitado alguna vez que se nos escape la lagrimita. Tenemos una mala noticia para todos aquellos a los que les da fobia el color rosa: Barbie es una maravilla.
S赤, es verdad, tiene a Mattel detr芍s. Rinde homenaje a una marca que a buen seguro aprovechar芍 el tir車n para engrosar a迆n m芍s sus arcas. S赤, tambi谷n es cierto, los mensajes sobre el heteropatriarcado y el estado actual de la causa feminista est芍n a la orden del d赤a durante todo el metraje. M芍s de uno (y de una) se ver芍n parodiados y de ellos depender芍 si abrazar la broma o cruzarse de brazos y refunfu?ar. Y s赤, comparte premisa con un buen n迆mero de pel赤culas del g谷nero fast food plataformero. Al fin y al cabo es el relato de un personaje imaginario que da el salto al mundo real y colapsa al ver c車mo funcionan las cosas por aqu赤. ?Cu芍ntos bodrios empezaron as赤? Muchos, demasiados. En cualquier caso, lejos de rechazar estros tres s赤es, Barbie los admite, refleja y caricaturiza.
Porque tal y como sospech芍bamos con Gerwig detr芍s, la pel赤cula guarda mucho m芍s de lo que aparentaba en los tr芍ileres. Su humor golpea a diestro y siniestro. Las pinceladas con las que retrata nuestra sociedad son bromas mordaces que no hacen rehenes. Ahora entendemos por qu谷 hasta la propia Mattel quiso censurar una escena en su d赤a. Es cr赤tica incluso consigo misma y nunca sabes por d車nde va a salir (?chiste del Snyderverse incluido!). Todos los espectadores deber赤an dejar los prejuicios en casa y darle una oportunidad. Es triste que a迆n los haya, pero vale la pena espantar temores. Ni es solo para chicas ni enjuicia a los hombres ni tonter赤as similares.
Barbie es un parque de atracciones en el que cabe todo. Persecuciones en coche, batallas campales, coreograf赤as y secuencias musicales, voces en off, momentos road movie, juegos de montaje, rupturas de la cuarta pared e incluso referencias a El Padrino, Matrix, Odisea del espacio y lo m芍s granado del s谷ptimo arte. Pero lo mejor es que la emoci車n y la reflexi車n tambi谷n tienen cabida entre broma y broma. La pel赤cula nos invita a ser algo m芍s compasivos con nosotros mismos, a descubrirnos, conocernos y querernos, a abrazar los miedos de la vida y recordar eso, que al menos estamos vivos. Un mensaje precioso y repleto de luz con el que uno abandona la sala con una sonrisa en la cara y ganas de hacer cosas. Tan liberadora como una sesi車n con el psic車logo.
No podemos terminar sin hacer menci車n a Margot Robbie y Ryan Gosling (o a la aportaci車n del desternillante Will Ferrell). Ambos logran que nos creamos esos escenarios de pl芍stico y esas situaciones impostadas. Se dejan mecer por los aires y golpear, cantan y bailan, r赤en y lloran. Lo hacen todo. Siempre diligentes, siempre maravillosos. Se lo pasan en grande y se nota. Adem芍s saben en qu谷 gesto, en qu谷 min迆sculo detalle reside la gracia de una escena y tan pronto se tiran agua a la cara como fingen desplomarse y echan a rodar por los suelos como si fuera algo improvisado. Y como ambos son tan buenos, si hay una pausa que apela a lo emocional, tambi谷n son capaces de cambiar de registro y ponerse melodram芍ticos. Son lo mejor de la pel赤cula y ojal芍 se les reconozca como debe.
Dec赤an que a un desastre nuclear s車lo sobreviv赤an las cucarachas. Se equivocaban. Al Barbenheimer han sobrevivido tambi谷n las barbies y el color rosa.