Francis Ford Coppola (¡®El Padrino¡¯, ¡®Apocalypse Now¡¯) elige al mejor cineasta vivo del mundo

Es tal y como dice el meme. Si Francis Ford Coppola habla, nosotros escuchamos. Si Coppola tiene 100 fans, nosotros somos uno de ellos. Si s¨®lo tiene un fan, nosotros somos ese fan. Y si no le queda ninguno es porque hemos dejado de existir. A sus 84 a?os, Francis Ford Coppola es historia viva del cine. Demonios, toda la familia lo es. Tampoco vamos a descubrir de Sofia o Eleanor a estas alturas. Pero el caso es que ha sido el director de ¡®El Padrino¡¯ y ¡®Apocalypse Now¡¯ quien se ha lanzado a la piscina en redes sociales y ha elegido al que considera el mejor cineasta vivo del mundo.

¡°Mi viejo amigo Martin Scorsese tiene una nueve pel¨ªcula que se estrenar¨¢ este mes, ¡®Los Asesinos de la Luna¡¯. ?l es una persona maravillosa y el mejor cineasta vivo del mundo. Su nueva pel¨ªcula cumple a todos los niveles¡±.

Todas las pel¨ªculas de Martin Scorsese

Es dif¨ªcil poner alguna pega a la elecci¨®n de Coppola. Raro es no encontrar una pel¨ªcula del gusto de todos cuando uno se fija en todas las pel¨ªculas dirigidas por Martin Scorsese hasta la fecha (que no su filmograf¨ªa, pues abarca mucho m¨¢s como guionista y productor). Para muestra, un r¨¢pido repaso a las obras m¨¢s importantes del director a sus 80 a?os:

La mejor pel¨ªcula de Scorsese

Si le preguntamos a Coppola, el director tiene claro cu¨¢l es la mejor pel¨ªcula de su amigo. Lo dejo m¨¢s que claro en una entrevista para la revista Esquire: ¡°Tengo varias pel¨ªculas favoritas de Martin Scorsese. Me encantan ¡®Malas calles¡¯, ¡®El rey de la comedia¡¯ o ¡®?Qui¨¦n llama a mi puerta?¡¯, pero creo que ¡®Toro salvaje¡¯ es la pel¨ªcula donde orquest¨® mejor todos los elementos ¨Dla actuaci¨®n, las im¨¢genes, el estilo¨D y cont¨® una historia particular (la de Jake LaMotta) que va m¨¢s all¨¢¡±.

¡°En ¨²ltima instancia, el prop¨®sito del arte es iluminar nuestro tiempo y las cosas que son importantes para nosotros, y ¡®Toro salvaje¡¯ lo hace aparentemente sin esfuerzo, como pocas pel¨ªculas lo intentan y mucho menos lo consiguen. ¡®La dolce vita¡¯ y ¡®Ocho y medio¡¯, de Fellini, tienen ese tipo de proporciones. Todas las interpretaciones son excelentes y es gracias al uso que hace Marty de la improvisaci¨®n dentro de una estructura dram¨¢tica, en la que, por un lado, deja que los actores sientan la libertad de la vida, para que puedan decir lo que quieran, pero por otro, los controla para que todo lo que digan y hagan contribuya al conjunto de la pel¨ªcula. Tiene unos efectos visuales espectaculares, un uso maravilloso de la m¨²sica y del ritmo, un bell¨ªsimo montaje y temas humanos universales¡±.

¡°Todos los que hacemos pel¨ªculas estamos tratando de averiguar c¨®mo nadar con las mareas que hacen posible ser un director viable, pero sin dejar de abordar los sentimientos personales en nuestro trabajo. Ser director es como ser Christo, el artista. Parte de su arte est¨¢ en un edificio envuelto, pero otra parte est¨¢ en todo lo que ha tenido que pasar para sacarlo adelante. Incluso despu¨¦s de ¡®Toro salvaje¡¯, nadie le dijo a Marty: ¡°Oye, aqu¨ª tienes el dinero para hacer las pel¨ªculas que te apasionen¡±. Si hubiera nacido en una familia que tuviera 500 millones de d¨®lares por ah¨ª, podr¨ªa hacer una pel¨ªcula de ese nivel cada a?o¡±.

Unas declaraciones que nos recuerdan tambi¨¦n la relaci¨®n de apoyo que les une, pues ambos se han echado un cable en diversos ¨¢mbitos a lo largo de su carrera, incluido el econ¨®mico. Sin ir m¨¢s lejos, Coppola financi¨® una parte importante de ¡®Calle peligrosas¡¯, proyecto que no hubiera salido adelante sin ¨¦l. Entre genios se entienden.