Final Fantasy VII Rebirth: as¨ª funciona su mundo abierto y esta es la forma de desplazarse entre regiones

Midgar, la ciudad dist¨®pica construida por la macrocorporaci¨®n Shinra, se desmorona entre humo y cenizas. Los reactores Mako son el blanco del grupo ecoterrorista Avalancha, que lucha por la supervivencia del planeta. Mientras tanto, el taimado presidente de la compa?¨ªa manipula la realidad, destruye su propia ciudad y vuelve al pueblo contra sus verdaderos salvadores. Despu¨¦s de irrumpir en la mism¨ªsima sede de la empresa, el equipo liderado por Cloud escapa a duras penas y se esconde en la tranquila ciudad de Kalm. Por desgracia, las tropas de Shinra los persiguen, as¨ª que se ven obligados a abandonar la urbe a trav¨¦s de un pasadizo secreto. Y hete aqu¨ª el vasto mundo, la melod¨ªa de la aventura, el sonido del peligro. As¨ª es el Gaia, el mundo abierto de Final Fantasy VII Rebirth, la nueva epopeya de Square Enix.

La estructura no es la de un mundo abierto al estilo The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom. Aunque la secuela de Final Fantasy VII Remake deja de lado el desarrollo lineal, el jugador se encuentra con ciertas limitaciones. En el juego de Nintendo es posible desplazarse a cualquier lugar del mapa sin barreras ni tiempos de carga. Cualquier lugar es explorable, siempre y cuando Link disponga de las herramientas necesarias o de la resistencia suficiente para alcanzar las zonas m¨¢s inh¨®spitas. En el t¨ªtulo de Square Enix se traslada en cierta medida la idea del mapamundi original, pero adaptada a un mundo abierto contempor¨¢neo. Las distintas regiones se desbloquean poco a poco, seg¨²n avanza la historia.

As¨ª es el mundo abierto de Final Fantasy VII Rebirth

El dise?o del mundo abierto es bastante convencional, en el sentido de que el estudio ha creado una serie de actividades que se repite en mayor o en menor medida en cada una de las regiones: partidas de cartas, cacer¨ªas, fuentes de Mako, misiones secundarias, etc. Dentro de cada zona, Cloud, Barret, Tifa, Aeris, Red XIII, Yuffie y Cait Sith se mueven a pie o a lomos de un Chocobo. Lo interesante es que existen variedades regionales con distintas habilidades, por lo que cada zona del mundo introduce peque?as diferencias a la hora de explorar. Por ejemplo, uno de los Chocobos puede escalar por superficies escarpadas, mientras que los de Ca?¨®n Cosmo son capaces de saltar por rampas y planear en el aire.

Pasar de una regi¨®n a otra a pie no es posible (salvo de la primera a la segunda, que est¨¢ separada por unas minas). El resto se conecta o bien por barco o por avi¨®n.. con truco. Casi al final de la partida, cuando conocemos a Cid, s¨ª podemos subirnos a bordo de su avioneta o utilizar un peque?o barco de manera libre, pero el desplazamiento entre regiones se realiza a trav¨¦s de un sistema de viaje r¨¢pido: pagas unos giles y el crucero te lleva de un punto a otro. Luego, dentro de cada zona, las chocoparadas y los puntos de inter¨¦s activan otra serie de puntos de viaje r¨¢pido.

En general, el mundo abierto de Final Fantasy VII Rebirth sigue los esquemas de otros muchos juegos, aunque Square Enix ha logrado que la sensaci¨®n sea parecida a la de anta?o, en el sentido de que el viejo mapamundi cobra vida. En total hay seis regiones: Los pastizales, Junon, Gongaga, Ca?¨®n Cosmo, Corel y Nibel, cada una con sus caracter¨ªsticas espec¨ªficas.

Final Fantasy VII Rebirth estar¨¢ disponible el pr¨®ximo 29 de febrero en exclusiva para PS5. Lee aqu¨ª el an¨¢lisis de MeriStation, que sigue la l¨ªnea de las cr¨ªticas positivas de la prensa nacional e internacional.