Helldivers II: ??nete a la lucha por la libertad y la democracia!

Quedan diez minutos en el reloj de la misi¨®n en Helldivers II. Despu¨¦s de recuperar el control de un emplazamiento de artiller¨ªa de la SEAF, rodeado por todos lados por terribles insectos alien¨ªgenas, encuentro el camino a mi misi¨®n bloqueado por un enorme nido de Terminids. Detr¨¢s de m¨ª, los insectos me persiguen liderados por un gigantesco Bile Titan del que hu¨ª, y ahora no tengo oportunidad de llamar una c¨¢psula con munici¨®n. Al llevar un objetivo en mi mano derecha, s¨®lo soy capaz de defenderme con un poderoso pero inadecuado rev¨®lver pesado.

Estoy listo para enfrentar mi destino. De todos modos, es mejor morir por la libertad que vivir en la cobard¨ªa, as¨ª que empiezo a pedir un bombardeo sobre mi posici¨®n. Caer¨¦ luchando por el bien de la S¨²per Tierra. Pero entonces, de repente mis comunicaciones dentro del juego explotan en una cacofon¨ªa de ¡°yeehawwws!¡± y celebraciones.

¡°?Hey amigo! ?Aguanta un poco m¨¢s!¡± dice una voz ronca al otro lado del mundo. Gritos, maldiciones y elogios a la libertad y la democracia llueven sobre el mapa, mientras un escuadr¨®n de tres extra?os elige unirse a mi misi¨®n en sus ¨²ltimos minutos. Una de sus c¨¢psulas aterriza justo encima del Bile Titan, mat¨¢ndolo instant¨¢neamente, y momentos despu¨¦s estos tres soldados aleatorios salen de sus c¨¢psulas con armas cargadas, solicitando ataques orbitales, reabastecimientos, armas pesadas y una enorme bomba de 500 kg. dici¨¦ndome que corra corra al objetivo.

Un ¨¢guila grazna a lo lejos dignificadamente. Derramo una sola l¨¢grima, mientras observo como se hace justicia y se imparte democracia. E inmediatamente despu¨¦s, una granada perdida nos mata a todos mientras corremos hacia la extracci¨®n.

Esto es Helldivers II

Un juego que est¨¢ en su propio nivel

No se puede negar que lo que la gente de Arrowhead Game Studios ha logrado ofrecer con este juego es fant¨¢stico. Si fuera menos, entonces el Internet no estar¨ªa inundado de noticias sobre c¨®mo sus servidores est¨¢n a reventar debido a que todos los jugadores intentan ingresar, ansiosos por unirse a la guerra gal¨¢ctica que han preparado para nosotros.

Es seguro decir que el mundo de los videojuegos qued¨® totalmente sorprendido por lo que muchos asumieron que simplemente iba a ser un t¨ªtulo m¨¢s peque?o, no por su apariencia sino por su tono irreverente, su precio inferior al est¨¢ndar y su lanzamiento simult¨¢neo en PS5 y Steam. Lanzado hace poco menos de un mes, Helldivers II ha sacudido el Internet por completo.

Si de alguna manera no has o¨ªdo hablar de ¨¦l, este juego te pone en la piel de uno de los titulares Helldivers, un soldado de la Super Tierra enviado a los confines de la galaxia para luchar contra fuerzas alien¨ªgenas en nombre de la Democracia. S¨ª, sabemos que suena rid¨ªculo, pero ese es el punto. Al igual que con su inspiraci¨®n muy obvia, Starship Troopers, este juego es una s¨¢tira del complejo militar-industrial que a¨²n te permite disfrutar de una jugabilidad incre¨ªble, mientras lo enriquece con di¨¢logos exagerados sobre la protecci¨®n de un gobierno tir¨¢nico en el nombre del patriotismo.

Todos los jugadores del juego se han tomado en serio este tema y, a la vez, se han sintonizado instant¨¢neamente con la fantas¨ªa del patriotismo extremo por una tierra ficticia. Es ruidoso, grandilocuente y roza en ser propaganda, pero como no es para nada real (ni intenta ocultar lo rid¨ªculo que es), el escenario ayuda a que los jugadores se unan a la causa y encuentren camarader¨ªa real en el lugar menos esperado: en l¨ªnea.

?Vamos simios! ??Quieren vivir para siempre?!

La intensidad es el nombre del juego en Helldivers II. Absolutamente todo lo que haces est¨¢ lleno de intensidad desde el momento en que inicias el juego: un v¨ªdeo de propaganda de la Super Tierra te incita a convertirte en un Helldiver con el grandilocuente tema principal (titulado ¡°A Cup of Liber-Tea¡±) que suena en tus bocinas. Inmediatamente te lanzan al entrenamiento y te dicen que te ganes tu capa, con orientaci¨®n sobre los conceptos b¨¢sicos del combate y la utilizaci¨®n de estratagemas que son llamados desde ¨®rbita baja.

Cuando disparas cualquiera de tus armas, un fuerte retroceso te urge a controlar tu punter¨ªa. Mant¨¦n presionado el gatillo de una ametralladora y tu Helldiver comenzar¨¢ a gritar, ri¨¦ndose por la democracia que est¨¢ otorgando a 1200 disparos por minuto. Cada disparo retumba y resuena en los planetas que liberas, y cada disparo hace que tus manos retumben a trav¨¦s del control DualSense.

Los desarrolladores pusieron mucho cuidado en asegurarse de que el combate sea lo m¨¢s emocionante posible, al mismo tiempo que te hacen sentir fr¨¢gil y asustado, y se nota. Desde la direcci¨®n de arte hasta el dise?o de sonido, las armas se sienten pesadas y peligrosas, tambale¨¢ndose hasta ser incontrolables y provocando que entres en un poco de p¨¢nico cada vez que te encuentras con un insecto o un aut¨®mata. Y son peligrosas, ya que no hace falta mucho para matar accidentalmente a uno o dos compa?eros de escuadr¨®n con fuego amigo.

Este mismo cuidado va m¨¢s all¨¢ de la sensaci¨®n de las armas y se extiende a todo lo dem¨¢s del juego, con una incre¨ªble variedad de entornos hacia los que te lanzar¨¢s desde tu Nave Destructora en cada misi¨®n. Desde islas tropicales hasta tierras ¨¢ridas, campos nevados en medio de una fuerte ventisca o una densa jungla en medio de la noche, todo est¨¢ bellamente representado durante tus misiones con efectos clim¨¢ticos intensos como niebla, lluvia, tormentas de polvo y m¨¢s.

Cuando se trata de jugabilidad, audio y efectos visuales, Helldivers II hace un buen uso de su hiperenfoque en misiones instanciadas para presentar una galaxia en guerra maravillosamente realizada, haciendo exactamente lo que necesitan y dejando que la acci¨®n del combate fren¨¦tico hable por s¨ª misma.

Con preparaci¨®n y disciplina, somos due?os de nuestro destino.

Quiz¨¢s la parte m¨¢s importante del ¨¦xito de Helldivers II hasta ahora es la comunidad que se ha reunido a su alrededor. El t¨ªtulo es un juego de servicio en vivo con una guerra gal¨¢ctica en tiempo real en el centro de todo: cada misi¨®n realizada por los jugadores, ya sea un fracaso o un ¨¦xito, contribuye al esfuerzo de guerra actualmente en dos frentes: la galaxia est¨¢ asediada por los Term¨ªnids (bichos) y los Aut¨®matas (robots), lo que significa que puedes elegir contra qu¨¦ luchar y cu¨¢ndo. El objetivo de los desarrolladores es poder ofrecer una experiencia din¨¢mica semana tras semana, con contenido nuevo llegando al juego constantemente y frentes de guerra respondiendo a las acciones de los jugadores a medida que ocurren.

Y como se mencion¨® anteriormente, los jugadores han respondido a estas mec¨¢nicas de manera extremadamente positiva. M¨¢s all¨¢ de caer en el papel de superpatriotismo, gritando tonter¨ªas propagand¨ªsticas sobre la libertad y todo eso, una gran parte de la comunidad ha adoptado el esp¨ªritu de cooperaci¨®n, incluso con jugadores aleatorios. El juego es exclusivamente PvE, lo que significa que sin confrontaci¨®n ni competencia activa entre jugadores, es m¨¢s f¨¢cil que nunca unirse a otras partidas y completar misiones juntos.

El juego en s¨ª est¨¢ dise?ado para fomentar la cooperaci¨®n, con ciertas armas que requieren que dos jugadores act¨²en juntos, como un lanzacohetes pesado que requiere que un jugador dispare mientras otro recarga. Los objetivos a menudo hacen que los jugadores se defiendan entre s¨ª mientras transportan objetivos complicados por todo el mapa, o que trabajen juntos para realinear sat¨¦lites, todo mientras hacen malabarismos con combinaciones de botones para completar objetivos y utilizar las numerosas herramientas ofensivas y defensivas a su disposici¨®n.

Por supuesto, esto no significa que el juego est¨¦ exento de malas hierbas. Pero incluso en las raras ocasiones en que te topes con uno de estos jugadores t¨®xicos, perder en una misi¨®n a¨²n te ayuda a progresar en el juego y te seguir¨¢n dando recompensas por contribuir a la guerra.

Por la democracia. ?Por la Super Tierra!

Hordas de jugadores que intentaron ingresar al juego durante sus primeras semanas provocaron que los desarrolladores se apresuraran y entraran en modo de p¨¢nico para expandir la capacidad de sus servidores, limitando el recuento de jugadores a ¡°s¨®lo¡± 450.000 jugadores a la vez. Como tal, muchos quedaron fuera del juego durante las primeras semanas. El ¨¦xito del t¨ªtulo fue una sorpresa mayor de lo que nadie esperaba, pero esto es algo que ya fue arreglado casi por completo.

Desde el punto de vista del servicio en vivo, Helldivers II tambi¨¦n es bastante diferente a la mayor¨ªa. Si bien puedes comprar una determinada moneda del juego con dinero real y hay un pase de batalla premium que desbloquea ciertos elementos, los desarrolladores han prometido que todo el contenido pr¨®ximo estar¨¢ disponible para los jugadores de forma gratuita. Tambi¨¦n hay una tienda que vende cosm¨¦ticos, mejoras y art¨ªculos en una lista rotativa, pero incluso esa moneda se puede ganar jugando regularmente, lo que hasta ahora hace que su presencia sea bastante inofensiva.

Ahora todo depende de la atenci¨®n que Arrowhead y Sony le den al juego. Este bien podr¨ªa ser un juego de larga duraci¨®n si recibe lanzamientos de contenido y eventos consistentes, algo que PlayStation ha estado clamando desde el lanzamiento de PlayStation 5. Habiendo solucionado todos los problemas de su servidor, ahora pueden mantener un marco saludable de contenido nuevo, as¨ª que es posible que todav¨ªa estemos hablando de esto durante los pr¨®ximos a?os. No hay necesidad de un aburrido mundo abierto lleno de tareas que hacer, ni de hacer que los jugadores sientan que se est¨¢n perdiendo eventos o recompensas por tiempo limitado. Todo aqu¨ª est¨¢ claramente desarrollado teniendo en mente la diversi¨®n del jugador, y es una se?al a la que la industria deber¨ªa prestar atenci¨®n.

Helldivers II ya est¨¢ disponible en PlayStation 5 y Steam. ?nete a la pelea. Entrega democracia y libertad a la galaxia.