XCOM: Chimera Squad, an¨¢lisis

?A qui¨¦n no le gusta una sorpresa? Se llega a casa, se abre la puerta y de repente se enciende la luz, con muchos de tus seres queridos all¨ª dentro d¨¢ndote la bienvenida. Besos por todos lados, abrazos, jolgorio y regalos para amenizar el recibimiento. 2K Games y Firaxis son los familiares, y XCOM: Chimera Squad el regalo que nos han hecho sin esperarlo.

Porque si por algo destaca esta entrega es por su inesperada aparici¨®n. El juego se anunci¨® el pasado 15 de abril y el 24 se pon¨ªa a la venta. Nueve d¨ªas de diferencia para ofrecernos un juego que no revoluciona nada, pero que s¨ª asienta (y mejora) lo que ya hemos podido ver en esta saga. Que, al final, esto es lo de siempre, como los sherpas cuando suben la monta?a: si sabes hacer bien tu tarea por complicada que sea, ?para qu¨¦ vas a cambiarlo?

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Nueva est¨¦tica

Posiblemente, los lectores recuerden por aqu¨ª un fant¨¢stico DLC que sac¨® Ubisoft tras lanzar Far Cry 3, uno llamado Blood Dragon. La est¨¦tica retrofuturista y cyberpunk, con ese toque vaporware caracterizado por las tonalidades moradas, inundaba el apartado visual del juego. Si hacemos referencia a este es porque traer a escena este look es, cuanto menos, arriesgado, ya que necesita de un manejo especial.

Tras apostar por varias est¨¦ticas en entregas anteriores de la saga XCOM, a cada cual m¨¢s variopinta ¨Cuna de ellas de mediados de siglo XX-, esta da el paso ahora a la citada con anterioridad. Y lo hace de manera m¨¢s que eficiente, para ahuyentar miedos. Todo el look visual aparece impregnado de colores metalizados y vivos para reflejar ese futuro Blade Runner que alg¨²n d¨ªa llegar¨¢. De hecho, el juego no s¨®lo lo plasma bien, sino que encima se aprovecha de esta est¨¦tica en puntos muy espec¨ªficos, es decir, saca partido a la misma. Por ejemplo, no incluye cinem¨¢ticas ¡°tradicionales¡±: apuesta por seudo vi?etas de c¨®mics donde estas tonalidades cobran m¨¢s fuerza si cabe. Decisi¨®n dif¨ªcil, pero subsanada con gran maestr¨ªa.

Porque sobre esta est¨¦tica gira lo contextual, pero sin perder de vistas de nuevo un apartado gr¨¢fico robusto y sin fisuras. Que no se espere un gran salto respecto a las ¨²ltimas entregas lanzadas. Lo que se hace es que lo que ya est¨¢ en pantalla vaya fluido, sin problemas. Sin aspavientos. Sin ir m¨¢s lejos, este an¨¢lisis se ha hecho en un PC con una GTX 780, un i7 de cuarta generaci¨®n y 16 GB de memoria RAM de por aquel entonces. Y a pesar de todo, el juego se ha podido correr en alta. Notable optimizaci¨®n para un apartado gr¨¢fico que no desentona en ning¨²n momento. Firaxis, una vez m¨¢s, sabiendo adaptarse a los equipos (y bolsillos).

Todo este apartado gr¨¢fico y est¨¦tico se aprovecha para contar una historia ubicada en momentos posteriores a los sucesos acaecidos en XCOM 2, concretamente, cinco a?os despu¨¦s de este. Formamos parte del Chimera Squad, un escuadr¨®n de ¨¦lite que se encarga de poner ¡°paz¡± ¨Ca base de tiros- en Ciudad 31. Hasta aqu¨ª todo ¡°normal¡±. Sin embargo, tras realizar la primera misi¨®n sucede un tr¨¢gico evento terrorista que tenemos que investigar. Y es aqu¨ª donde empieza la jarana.

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Aunque todo parte de la misma historia, es decir, ese suceso f¨²nebre, se podr¨ªa decir que Chimera Squad est¨¢ compuesto por tres campa?as diferentes. En cuanto se produce esto, la historia te deja elegir entre tres facciones a investigar para poner soluci¨®n a qui¨¦n ha podido realizar tal acci¨®n. La clave argumental est¨¢ en que cada una de estas facciones a investigar tiene su propia trama, misiones secundarias, etc., por lo que el ¡°suceso tr¨¢gico¡± inicial permanece de fondo, s¨ª, pero no se diluye ante las propuestas que se investigan; de hecho, incide sobre ellas para mostrar un crisol de posturas y debates en torno a humanos y extraterrestres.

No deja de ser un recurso complejo. Ya se ha visto en otras producciones que cuando se apuesta en demas¨ªa por las secundarias, el olvidar la principal es m¨¢s que factible. Sin embargo, aqu¨ª todas van entrelazadas, hasta tal punto que cuando se finaliza esta primera ¡°l¨ªnea de investigaci¨®n¡± (campa?a uno, dos o tres; se puede elegir la que se quiera para empezar), el juego deja elegir una de las otras dos.

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Lo mejor es que es una unidad indisoluble. Todo sucede en el mismo mundo de Ciudad 31, una urbe compuesta por sectores en los que debemos impedir que la agitaci¨®n los desborde. Si la agitaci¨®n sube mucho en cada sector, la anarqu¨ªa de la ciudad crece. Si la anarqu¨ªa de la ciudad llega al m¨¢ximo, la partida finaliza. Para paliar esto, el juego da una ingente cantidad de herramientas de la estrategia por turnos, funciones que conocer¨¢n los amantes del g¨¦nero. Y aqu¨ª es donde entran en juego los agentes.

Al igual que con Total War o los anteriores XCOM, el juego tiene dos campos bien delimitados. El primero es el de la gesti¨®n de la ciudad como ya hemos dicho, que aunque no es tan complejo como en las producciones de Creative Assembly, s¨ª que tiene una capa de profundidad aceptable; el segundo, por su parte, es el despliegue de los agentes de la Chimera Squad en el campo de combate (tambi¨¦n en la ciudad, aunque de otra manera).

A poco que se haya jugado a anteriores entregas, la mayor¨ªa de conceptos ya se conocer¨¢n: quedarse en guardia, turnos por cada personaje, parapetos, acciones a realizar, etc. No obstante, hay algunas novedades que merece la pena destacar. Una de ellas es que todas las misiones comienzan con ¡°incursiones¡±. En otras palabras, tenemos la ventaja sobre el terreno y nosotros elegimos qu¨¦ hacer: entrar a machete, activar habilidades especiales, defenderse, etc. Sobre la cabeza de cada enemigo, un porcentaje, probabilidad de cr¨ªtico, etc. Esto suena, ?no? Eso s¨ª, los rivales tambi¨¦n pueden responder, as¨ª que mucho cuidado.

A partir de aqu¨ª, el juego hace gala de las se?as de identidad de la marca, pero al estar m¨¢s en el futuro que nunca lo aprovecha con habilidades ante todo dist¨®picas: poderes si¨®nicos ¨Ccomo los bi¨®ticos de Mass Effect-, criaturas extraterrestres con comandos como escupir veneno, armas futuristas, etc. Y c¨®mo no, cada misi¨®n, que puede estar compuesta a su vez de varias incursiones, ofrece experiencia y a?adidos para mejorar a los agentes (y, por cierto, el juego intenta que se apueste por la v¨ªa pac¨ªfica y no letal ante los enemigos, ya que esta otorga ¡°extras¡±).

Es una amalgama de conceptos que le sienta realmente bien, m¨¢s teniendo en cuenta que el t¨ªtulo tambi¨¦n nos obliga a elegir agentes muy diferentes entre s¨ª, cada uno orientados a un tipo de misi¨®n o para combinarlos con maestr¨ªa en conjunto. Reglas del pasado, pero adaptadas al contexto en el que se sit¨²a para dar una historia que nos puede durar entre 15 y 20 horas dependiendo de la pericia controlando la ciudad.