Forjando nuestro destino

La franquicia Way of the Samurai se ha prodigado poco por nuestras tierras. Los dos primeros t¨ªtulos aparecidos en 2002 y 2004 para PlayStation 2 no tuvieron mucho ¨¦xito fuera de Jap¨®n; m¨¢s si tenemos en cuenta que el primero, aunque lanzado en territorio PAL, no se distribuy¨® en Espa?a, relegando la saga s¨®lo a los m¨¢s entusiastas del estilo samur¨¢i. Pese a ofrecer un mundo abierto con una ambientaci¨®n muy atractiva del Jap¨®n feudal, los dos primeros videojuegos no causaron mucha expectaci¨®n entre p¨²blico y cr¨ªtica, obteniendo notas poco m¨¢s que regulares por parte de la prensa especializada. El desarrollo de la aventura es siempre el mismo: tomamos el rol de un ronin (un samur¨¢i sin amo del Jap¨®n feudal) para decidir que papel tomamos en las luchas entre clanes con total libertad.

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Y es que la susodicha libertad de decisiones es total; ¨¦ste es quiz¨¢s el aspecto m¨¢s positivo de un t¨ªtulo con demasiados altibajos. De esta manera, podemos hacer lo que nos venga en gana, hablar e interactuar con la gente, realizar trabajos y encargos para ellos, ingresar en un clan para ayudar a conseguir la victoria sobre los enemigos o trabajar para ambos lados y convertirnos en el nuevo amo de las tierras. As¨ª, nos queda un planteamiento muy atractivo, con un correcto dise?o para intentar, a priori, exprimir todas sus opciones una y otra vez. Y digo intentar porque una vez hayamos avanzado lo suficiente para familiarizarnos con su jugabilidad, nos daremos cuenta de las excesivas carencias que presenta la ¨²ltima propuesta del estudio japon¨¦s Acquire.

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A pesar de ofrecer un mapeado abierto con una ambientaci¨®n m¨¢s que notable, el tama?o del mismo no es suficientemente grande como para exprimir las posibilidades de un videojuego tipo sandbox. Los anteriores cap¨ªtulos pecaban de lo mismo, y en esta nueva aventura no se ha sabido solucionar correctamente, aun contando con las nuevas posibilidades a nivel de hardware. En este sentido, se podr¨ªa hablar de Way of the Samurai 3 como m¨¢s de lo mismo con mejor apariencia. Incluso as¨ª, no podemos estar seguros sobre su acabado t¨¦cnico, con gr¨¢ficos que parecen de la generaci¨®n anterior pero en alta definici¨®n. En conjunto, unas primeras impresiones no muy positivas.

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La historia nos sit¨²a durante la era Sengoku (1467-1568), en el Jap¨®n feudal, una ¨¦poca convulsa de guerra civil y violencia, con numerosos clanes luchando por el control de las tierras. Una vez empecemos una nueva aventura, podremos crear nuestro propio samur¨¢i, desde un joven espadach¨ªn hasta un curtido guerrero; eso s¨ª, las opciones no son muy numerosas y a medida que avancemos en la aventura, podremos modificar aspectos f¨ªsicos del protagonista, dependiendo de las decisiones que tomemos. Y es que a pesar de contar con elementos con tintes RPG, nuestro personaje no mejorar¨¢ sus habilidades; no as¨ª nuestras armas, que podr¨¢n ser mejoradas en diversos aspectos. Las secuencias CG nos narran la historia, pero pecan de poco carism¨¢ticas, con falta de emoci¨®n.

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La gran baza del t¨ªtulo es la libertad que tenemos para hacer lo que nos venga en gana, con las consiguientes repercusiones a nivel de desarrollo. Cuando hablamos con un personaje, podemos decidir empezar un combate; en este sentido, cabe remarcar que podemos matar a quien nos plazca, a excepci¨®n de los ni?os. As¨ª, nuestras acciones afectar¨¢n a la aventura de manera que cuando un personaje importante muera, lo estar¨¢ el resto del juego. Aun as¨ª, ciertos personajes secundarios ser¨¢n sustituidos por otros con las mismas funciones, recortando las posibilidades a nivel de libre albedr¨ªo. Por ejemplo, si queremos eliminar un personaje para conseguir algo de ¨¦l, en ciertas ocasiones otro personaje le reemplazar¨¢ y ser¨¢ como si nada hubiera pasado.

Por el contrario, si decidimos matar el l¨ªder de un clan y a sus subordinados, podremos convertirnos en el nuevo jefe. As¨ª, la gente de nuestro alrededor nos tomar¨¢ como el nuevo maestro y actuar¨¢ en consecuencia. No queda muy claro en qu¨¦ ocasiones nuestras acciones repercutir¨¢n en mayor o menor medida, pero sin duda, es todo un acierto para el desarrollo de nuestra aventura. Tampoco ayuda mucho al esp¨ªritu sandbox un terreno para explorar a todas luces demasiado peque?o en extensi¨®n. Las ocho localizaciones se antojan algo escasas y en pocas horas las podremos visitar por completo. De igual manera, no podremos indagar por bosques en busca de nuevos campamentos u otras sorpresas; en este sentido, est¨¢ bastante limitado.

Las tareas o encargos a realizar a modo de misiones por parte de los personajes que vayamos encontrando son bastante simples. Tareas como perseguir a un ladr¨®n para infligirle un castigo, buscar a gente desaparecida o entregar mensajes nos recuerdan bastante a otros t¨ªtulos y no aportan personalidad a una aventura un tanto plana y s¨®rdida. Adem¨¢s, s¨®lo podremos tener una misi¨®n activa en todo momento; hasta que no la completemos, no podremos pasar a la siguiente. Asimismo, estas misiones son bastante repetitivas; las iremos completando sin darles mayor importancia. La inteligencia artificial de los personajes deja bastante que desear, con situaciones un tanto rid¨ªculas; si intentamos dar caza a un ladr¨®n blandiendo nuestra espada y somos vistos por unos guardias, ¨¦stos vendr¨¢n a por nosotros en lugar de ayudarnos a atrapar al malhechor. No se ha profundizado demasiado en c¨®mo afectan nuestras acciones sobre el resto de los personajes, dando en todo momento una sensaci¨®n algo arbitraria de los acontecimientos.

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El apartado gr¨¢fico es muy pobre; en ocasiones parecemos estar ante un t¨ªtulo de PlayStation 2 en alta definici¨®n, algo as¨ª como un port de la anterior generaci¨®n remasterizado. Esta declaraci¨®n un tanto demoledora no es para nada gratuita; las f¨ªsicas y animaciones no est¨¢n a la altura de las actuales aventuras de acci¨®n en tercera persona. Las f¨ªsicas implementadas no son para nada realistas. La c¨¢mara tampoco ayuda mucho a seguir la acci¨®n como se merece; en muchas ocasiones quedaremos vendidos al alcance de nuestros enemigos al no poder ver correctamente lo que sucede en pantalla. Lo ¨²nico pasable en este sentido son unas texturas algo m¨¢s trabajadas, pero que en ning¨²n momento cumplen con los m¨ªnimos exigibles a estas alturas de la actual generaci¨®n.

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La presentaci¨®n t¨¦cnica de Way of the Samurai 3 puede achacarse al largo periodo de tiempo que ha tardado en llegar a nuestro pa¨ªs; 2008 quiz¨¢s queda demasiado lejos para nuestros ojos, acostumbrados a acabados gr¨¢ficos mucho m¨¢s pulidos en la actualidad. La banda sonora raya a mejor nivel, con una interesante mezcla de melod¨ªas cl¨¢sicas orientales con temas m¨¢s actuales, dando un resultado bastante atractivo y para nada tedioso. En seg¨²n que momentos m¨¢s intensos, se hace un buen uso de la ambientaci¨®n musical, dramatizando todo lo que sucede ante nosotros. Los efectos de sonido aportan el plus necesario a la buena ambientaci¨®n, con sonidos t¨ªpicos de la naturaleza y del Jap¨®n que se intenta recrear.

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Los combates, por potro lado, no alcanzan ni el nivel ni la profundidad deseados; s¨®lo tenemos a nuestra disposici¨®n dos tipos de movimientos, es decir, uno d¨¦bil y r¨¢pido, y otro m¨¢s poderoso y lento. Como se ha dicho anteriormente, los tintes roleros quedan relegados a las armas, las cuales presentan una escala de atributos en ataque y defensa. As¨ª, tenemos a nuestra disposici¨®n hasta cien armas diferentes, todas ellas personalizables. Cuando debemos afrontar las batallas, somos testigos de unas pautas de dificultad mal equilibradas, resultando en muchas ocasiones frustrantes. La mala implantaci¨®n de las f¨ªsicas tampoco ayudan en este sentido, dej¨¢ndonos en situaciones bastante comprometidas constantemente. Cuando se muestran en pantalla un n¨²mero elevado de enemigos, se aprecian ralentizaciones que enturbian a¨²n m¨¢s el resultado.

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Una nueva caracter¨ªstica es el sistema de compa?eros. Podremos disfrutar de hasta catorce personajes diferentes que nos acompa?ar¨¢n en nuestra aventura. As¨ª, habr¨¢ muchos trabajos que requerir¨¢n de dos personas para ser completados. Podremos decidir acogerlos en nuestro hogar y demandar sus servicios cuando creamos coveniente, aunque nuestras acciones influir¨¢n en su comportamiento, con efectos m¨¢s positivos o negativos; tendr¨¢n sentimientos, ya que por ejemplo, se enfadar¨¢n si estamos ausentes por un largo periodo de tiempo. Sus hablidades ir¨¢n desde ayudarnos en los combates hasta transportarnos armas u objetos. De esta manera se potencia una parte de la jugabilidad m¨¢s social y de estrategia, con todas las posibilidades que ello conlleva; un buen acierto, sin duda.

Con Way of the Samurai 3 podremos disfrutar de buenos momentos de diversi¨®n con las consecuencias que podemos crear a ra¨ªz de nuestras acciones. La aventura se puede completar en unas diez horas; no presenta una durabilidad excesiva, aunque puede verse aumentada considerablemente si dedicamos tiempo y esfuerzo a las misiones secundarias, a los complementos desbloqueables y a ver los m¨¢s de veinte finales distintos disponibles. Cada final quedar¨¢ supeditado a las acciones que hayamos realizado durante nuestra aventura, siendo m¨¢s o menos positivos para nuestro protagonista. Cuando finalicemos el modo historia, seremos recompensados con un t¨ªtulo de samur¨¢i, de entre un total de cincuenta rangos. Asimismo, los puntos obtenidos servir¨¢n para desbloquear los citados secretos, como ropajes o atributos.

Way of the Samurai 3, tanto para PlayStation 3 como Xbox 360, es un t¨ªtulo lleno de contrastes, que gustar¨¢ a unos pocos y aburrir¨¢ a la mayor¨ªa. Tiene buenas ideas, el dise?o general del videojuego es interesante, pero un mapeado limitado en extensi¨®n, unos combates a todas luces deficientes y un acabado gr¨¢fico obsoleto son obst¨¢culos demasiado notorios. Adem¨¢s, el t¨ªtulo llega a nuestro pa¨ªs en perfecto ingl¨¦s, as¨ª que s¨®lo podr¨¢n seguir bien los di¨¢logos y la historia los que dominen bien el citado idioma. Los fans de la cultura medieval japonesa podr¨¢n encontrar cierto encanto en ¨¦l, pero no posee suficientes atributos como para ser considerado una aventura cien por cien recomendable. S¨®lo para seguidores de la saga y los jugadores que gusten del estilo sandbox; a priori un buen ejemplo del causa-efecto en un videojuego, aunque venido a menos.

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- Argumento atrayente

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- Dise?o de personajes

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- Gran variedad de finales distintos

- Buena cantidad de items desbloqueables