Valkyrie Elysium, an¨¢lisis. Un reflejo diferente del Ragnarok

Ya se nos avis¨® desde un principio que Valkyrie Elysium no era una entrega principal de Valkyrie Profile, sino una especie de spin off/reinvenci¨®n/juego inspirado o como se quiera llamar. Una forma de curarse en salud antes de que empezaran los lloros por demandar un nuevo RPG protagonizado por Hrist o cualquier personaje principal de la saga. Nuevos personajes, nuevas motivaciones, nuevo mundo, algo con lazos pero no atado al juego de Tri-Ace.

El segundo aviso de navegantes era el estudio que estaba detr¨¢s de ¨¦l: Soleil, un equipo muy centrado en juegos de acci¨®n que tienen todav¨ªa por lograr su primer gran t¨ªtulo (en su lista cuenta con proyectos como Travis Strikes Again, Naruto to Boruto, Ninjala, o el infame Devil¡¯s Third). En su descargo, hay que decir que el estudio tokiota parece tener buenas ideas y buena actitud, pero siempre enfrent¨¢ndose a serios problemas de ejecuci¨®n motivados por, entre otras cosas, lo que parece que es un presupuesto m¨¢s que ajustado, algo que no parece haber cambiado en este ¨²ltimo proyecto.

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Lejos del Valhalla

Desde el principio, Valkyrie Elysium desprende la impresi¨®n de ser un proyecto realizado con oficio y teniendo muy claro lo que se pod¨ªa hacer y lo que no (terminar juegos, aunque no sea brillantemente, no es algo balad¨ª hoy en d¨ªa). Pese al sello de Square Enix y pese a pertenecer nominalmente a una saga que est¨¢ entre la nobleza del g¨¦nero, lo cierto es que estamos ante algo completamente alejado de la fastuosidad de los Lenneth y Silmeria.

Puestos a definir Elysium, ser¨ªa un ARPG con m¨¢s ¡°A¡± que ¡°RPG¡±, que se marca como objetivo principal contar con un combate entretenido, con muchas posibilidades diferentes fruto del uso de elementos propios de la saga como los Einherjar, o las combinaciones elementales. A la misma vez, narra lo que ser¨ªa una destilaci¨®n en sus elementos m¨¢s b¨¢sicos de los pilares tem¨¢ticos cl¨¢sicos de los Valkyrie Profile. B¨¢sicamente, somos una nueva Valkyria creada por Odin para ayudarle en el Ragnarok, con una Midgard ya pr¨¢cticamente asolada. Esto es muy conveniente porque lo cierto es que apenas veremos a un alma en nuestro discurrir por las tierras mortales, s¨®lo monstruos a los que ¡°purificar¡±, as¨ª que hay una buena excusa para la permanente sensaci¨®n de vac¨ªo que desprenden los escenarios.

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El combate, el principio y el final de todo

Las buenas noticias son que el combate, el elemento principal con mucha diferencia, funciona razonablemente bien (con algunos matices). Controlamos exclusivamente a nuestra protagonista, con la posibilidad de invocar hasta a dos Einherjar a la vez para que nos ayuden por tiempo limitado de forma aut¨®noma. Nuestro set de movimientos cambiar¨¢ seg¨²n la naturaleza de nuestra arma, que podemos alternar entre dos posibles de una selecci¨®n m¨¢s amplia que vamos coleccionando y ampliando a nuestra discreci¨®n. La diferenciaci¨®n entre armas no es tan grande y las mec¨¢nicas b¨¢sicas no cambian mucho entre ninguna, as¨ª que elegir es m¨¢s una cuesti¨®n de gustos que otra cosa.

Es un juego de pocas sutilezas, en el que el contador de combos se cuenta por cientos de impactos. Tiene elementos de finura en forma de esquivas, bloqueos en el ¨²ltimo momento y counters, adem¨¢s de distintas variaciones de combos realizados con dos botones. Pero a la hora de verdad, lo que cuenta es enlazar un gran n¨²mero de ataques seguidos para sobrepasar las defensas enemigas y eliminarlos a la vez que evitamos que ataques. Se pueden hacer coreograf¨ªas bastante trabajadas, pero son raramente innecesarias dentro del ritmo mata-mata que permea el desarrollo de la aventura.

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M¨¢s que los movimientos especiales, lo que realmente marca la diferencia son las combinaciones elementales. Contamos con diferentes hechizos de fuego, electricidad, luz, oscuridad¡­ y esos conjuros no s¨®lo hacen da?o, sino que tambi¨¦n tienen mayor efecto dependiendo de la debilidad elemental de nuestros enemigos. Adem¨¢s de hacer m¨¢s da?o, tambi¨¦n llenan una barra que en caso de completarse hace que el enemigo quede paralizado unos segundos (algo muy propio de Valkyrie Profile). Si le sumamos que nuestros Einherjar tambi¨¦n tienen afinidades elementales, encontramos que una atenci¨®n a este detalle nos facilitar¨¢ la vida y har¨¢ las luchas considerablemente m¨¢s r¨¢pidas.

Es indudablemente divertido. A cada paso surge una nube de enemigos a los que hacer frente y nuestro contador de combos comienza a subir como la espuma. Mientras, la pantalla se llena de efectos visuales a la vez vamos enlazando secuencias de acci¨®n, hechizos y ataques de nuestros aliados, que a veces coronamos con un r¨¢pido pero atractivo movimiento final antes de pasar a la siguiente v¨ªctima. Es r¨¢pido, din¨¢mico y con ese toque hipn¨®tico que tienen los juegos de acci¨®n m¨¢s simples, los que no hay que pensar demasiado y nos dejan en un confortable trance mientras avanzamos.

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Hay sin embargo algunos problemas espec¨ªficos del combate. Uno es un pecado habitual en el g¨¦nero, pero muy molesto y que separa a los especialistas de los aprendices, que es el de los fallos de c¨¢mara. Cuando en un juego de acci¨®n tienes varios momentos en los que no ves lo que est¨¢s haciendo tu protagonista porque la c¨¢mara se ha empotrado en alguna pared, sabes que es un estudio todav¨ªa no ha dominado los fundamentos. No pasa en un n¨²mero preocupante de ocasiones, pero s¨ª suficientes como para dejar nota.

Otro problema es que resulta un tanto plano. Para que un juego de acci¨®n largo no caiga en la monoton¨ªa es necesario un combate profundo, con bastantes variaciones seg¨²n armas, builds o personajes protagonistas para tener sabores diferentes, y tambi¨¦n es recomendable una buena variedad de enemigos y situaciones. Valkyrie Elysium no destaca en ninguno de esos apartados: s¨®lo hay una ¨²nica protagonista y su desarrollo es lineal, sin grandes decisiones que marquen divergencias en su estilo de lucha; las variaciones entre armas no marcan un punto y aparte en el estilo general; y la variedad de los enemigos no se mantiene fresca en las 15 horas que puede llevar terminar la campa?a, ya que abusa de repeticiones y variaciones menores hasta el punto de que las luchas empiezan a parecerse unas a otras.

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Estos aspectos separan al juego de la excelencia, pero al menos lo que hace lo hace bien y, con un poco de inter¨¦s por parte del jugador, se pueden armar combos y coreograf¨ªas de combate bastante espectaculares. Queda cierta sensaci¨®n de que se podr¨ªa haber hecho m¨¢s porque los mimbres son buenos, pero el resultado se queda a un nivel adecuadamente entretenido, aunque lejos de su potencial. En cuanto a lo que hay fuera de la lucha, lo cierto es que Valkyrie Elysium tiene m¨¢s bien poco que ofrecer.

Un t¨ªtulo gr¨¢ficamente pobre

Gr¨¢ficamente es un juego extra?o, con un planteamiento bastante particular de cel shading que quiz¨¢s buscaba darle una identidad propia, pero que resulta poco convincente. M¨¢s que una b¨²squeda de estilo, nos resulta m¨¢s cre¨ªble la idea de que se ha usado esta est¨¦tica para maquillar carencias t¨¦cnicas, falta de antialising en los escenarios y una distancia de visionado bastante irrisoria a estas alturas. Ver los enemigos y a elementos del decorado aparecer a poca distancia como sombras y siluetas poco definidas dan exactamente la medida de lo modesta que ha sido esta producci¨®n. El mundo a nuestro alrededor tiene poco inter¨¦s est¨¦tico m¨¢s all¨¢ de algunos contados momentos -la recreaci¨®n de Valhalla y algunas pocas partes de Midgard tienen cierto encanto-, pero todo tiene tan poca vida o inter¨¦s que es dif¨ªcil extraer placer de este apartado.

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A esto hay que sumar infinidad de peque?os defectos: problemas obvios con la sincronizaci¨®n de labios y voces, c¨¢maras absurdas en momentos de di¨¢logo, personajes inexpresivos o con posiciones corporales est¨¢ticas. Y no hablemos de momentos puntuales de bajadas de framerate y de gesti¨®n de c¨¢mara, eso jugado en una PS5. No exageramos si decimos que hay t¨ªtulos de PS3 bastante mejores gr¨¢ficamente, por los que nos cuesta entender las limitaciones t¨¦cnicas de Elysium, pero ah¨ª est¨¢n. Nada catastr¨®fico, pero s¨ª molesto y bastante incomprensible.

Y luego est¨¢ la historia, que se mueve con la misma gracia y sutileza que un hipop¨®tamo con zapatos de bailarina. Predecible, t¨®pica e insustancial, un relleno con el que hilar todo. Hay elementos reconocibles de los Valkyrie Profile, pero tan simplificados y apresurados que es dif¨ªcil conectar con ellos. El gran giro argumental se ve a kil¨®metros y cuando se produce resulta tan falto de convicci¨®n y tan pobremente ejecutado que no consigue el m¨¢s m¨ªnimo impacto. Dada la falta de NPCs, se intenta que los Einherjar aporten un poco de calor narrativo y de relaciones interpersonales, pero la verdad es que se queda en un intento. Sus historias personales, con toques interesantes, s¨®lo est¨¢n presentes en forma de audios escondidos en el men¨² y sus di¨¢logos en el juego presentan varios problemas (como repeticiones absurdas).

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El dise?o de los personajes es bastante atractivo, tal y como cabr¨ªa esperar de Yuya Nagai (Nier Automata), pero el desarrollo narrativo se queda a medio camino, a lo que ayuda el doblaje en ingl¨¦s, que se muestra blando y con poca emoci¨®n hasta el punto de que el japon¨¦s es aconsejable. Los textos s¨ª est¨¢n en castellano, lo que se agradece, aunque tampoco es un juego que necesite mucha lectura. Un detalle es que, siguiendo la tradici¨®n de la serie, hay varios finales que afortunadamente podemos ver en una misma partida sin necesidad de grabar en diferentes puntos o realizar intrincados pasos. Es un buen gui?o y una forma de alargar la campa?a, aunque la verdad es que completar los cuatro se hace algo pesado.