Turnip Boy Commits Tax Evasion an¨¢lisis, el nabo justiciero

Si de algo estamos seguros es que pagar impuestos no es muy satisfactorio. No somos los ¨²nicos que pensamos as¨ª, Nabolino, un adorable y alborotado nabo que vive en un pueblo rodeado de impuestos injustos, ha decido evadirlos y enfrentarse a la justicia. Con el alcalde Cebolla al frente, diferentes verduras y frutas como habitantes de nuestro mundo y un viaje corto, pero animado, buscaremos resolver este problema con alguna risa asegurada. Los desarrolladores Snoozy Kazoo con la distribuci¨®n de Graffitti Games traen Turnip Boy Commits Tax Evasion, una aventura inspirada claramente en t¨ªtulos cl¨¢sicos como Legend of Zelda y una jugabilidad semejante a los RPG. Esta fue lanzada para las plataformas Nintendo Switch y PC el pasado 22 de abril.

Una cebolla traicionera

Nabolino ha acabado harto de todo y ha decidido dejar de pagar los impuestos, como consecuencia de esto le han desalojado de su casa y ahora se encuentra en la calle. A ra¨ªz de aqu¨ª nos embarcaremos en una misi¨®n ¨¦pica, sorprendente y atractiva para pagar la enorme deuda que tiene este nabo con el alcance Cebolla, pero nos sentiremos traicionados porque ¨²nicamente nos utiliza como recadero. Este nos mandar¨¢ a buscar algunos objetos espec¨ªficos como un tenedor y un puntero l¨¢ser mientras rastreamos mazmorras y nos pateamos los bosques llenos de criaturas un tanto agresivas. Se?alados como un forajido, nos encontraremos con unos cuantos documentos, incluidos carteles de SE BUSCA o facturas poco interesantes, que podremos romper en el transcurso de nuestra aventura. Todos estos papeles funcionan como una especie de coleccionable y los podremos visualizar en una lista dentro del men¨² de pausa.

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Y as¨ª avanzar¨¢ toda esta breve aventura, correremos como un nabo en una b¨²squeda gloriosa para asesinar animales y hacer algunos intercambios, siendo la ¨²nica manera aceptable de pagar nuestros impuestos. Aunque nos hayamos convertido en una amenaza absoluta y una peque?a molestia para algunos, comenzaremos a descubrir oscuras conspiraciones gubernamentales con un alcalde muy traicionero. Dentro de la narrativa encontraremos la resoluci¨®n de acertijos relativamente simples, adem¨¢s de incluir un humor con diferentes referencias que nos tratar¨¢ de confundir en ocasiones.

Ante todo, hay que ser un buen vecino

Comenzaremos a investigar las ¨¢reas m¨¢s nuevas que est¨¢n cerca de nuestro hogar y hablaremos con todos los habitantes para reunir misiones, escuchar algunas frases c¨®micas y darnos informaci¨®n que ser¨¢ en ocasiones relevante y otras no tanto. Lo que si ser¨¢ importante y valdr¨¢ la pena es hablar con todos los vecinos que veamos, de lo contrario perderemos la oportunidad de poder desbloquear la siguiente mazmorra. Todas las misiones contienen un acertijo, el cual nos piden un objeto y nosotros tendremos que buscarlo y encontrarlo en alg¨²n lugar. A medida que conocemos m¨¢s personajes y realizamos sus respectivas misiones, en ocasiones tendremos que retroceder a otras ubicaciones para completar alguna tarea o incluso resolver un acertijo. Con esto ¨²ltimo, el juego se hubiese beneficiado si, al igual que tiene en el men¨² de pausa todos los coleccionables, hubiese un registro de misiones para ver qu¨¦ tareas tenemos y no hemos completado, as¨ª como tambi¨¦n aquellos personajes relacionados con dichas misiones.

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La jugabilidad no s¨®lo se queda ah¨ª, y es que en Turnip Boy, nuestro peque?o nabo ir¨¢ aprendiendo nuevas habilidades y consiguiendo nuevos elementos que lo har¨¢n a¨²n m¨¢s poderoso. Tendremos una regadera que nos servir¨¢ para cultivar bombas o hacer crecer bloques m¨®viles que aparecen inicialmente como plantas. Esto estar¨¢ complementado con unas botas para patear dichas bombas hacia la direcci¨®n que nos beneficie y unos guantes para empujar los bloques hacia huecos vac¨ªos. Tambi¨¦n tendremos nuestra herramienta para defendernos, una espada que ser¨¢ esencial para acabar con nuestros enemigos o incluso para cortar c¨¦sped alto y que nos abra el camino. Otro de los objetos que m¨¢s tarde tendremos, es una especie de cubo de agua que nos permitir¨¢ crear portales de entrada y salida, una manera de teletransportarnos, tanto a nosotros como a los objetos.

Los controles tendr¨ªan que pulirse en diferentes aspectos, por ejemplo, para cambiar entre los elementos es una tarea problem¨¢tica y se hace tedioso, en m¨¢s de una ocasi¨®n puede ocurrirnos el quedarnos con el objeto equivocado y regar al enemigo en vez de matarlo. Tambi¨¦n ocurre si teletransportamos un bloque y justamente este aparece al lado de una pared, al no tener la mec¨¢nica de agarra, solo podremos empujarlo y nos obligar¨¢ a salir para reiniciar de nuevo el mapa. No obstante, los combates son simples y planos, aunque con los jefes si podremos llegar a frustrarnos en m¨¢s de una ocasi¨®n, ya que nuestro ritmo se fundamentar¨¢ en los movimientos y acciones que haga el propio enemigo. Sin embargo, estos est¨¢n presentados de manera divertida con un concepto muy humor¨ªstico y que nos aliviar¨¢ de esa sensaci¨®n de combates tan incomprendidos.

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Una est¨¦tica llamativa con m¨²sica agradable

Turnip Boy es una colorida aventura de acci¨®n en 2D con unos gr¨¢ficos que est¨¦ticamente atraen por aquellos gui?os a los cl¨¢sicos como Zelda, por su paleta de colores llamativa y la idealizaci¨®n de cada detalle. Tambi¨¦n sorprende el trabajo art¨ªstico completo con la creaci¨®n de unos personajes llamativos, con encanto y personalidad, siendo productos alimenticios y que dan paso a un humor realmente s¨®lido. Aun as¨ª, algunos movimientos de pantalla se mueven a una velocidad diferente hacia d¨®nde va nuestro personaje y en algunos combates esto puede ser inc¨®modo debido a que te focaliza mal y te sientes torpe. La m¨²sica es un complemento fundamental para nuestro viaje, es agradable, pegadiza y anima a deslizarnos por todos y cada uno de sus mapas, adem¨¢s de conocer m¨¢s a cada habitante.

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