The World Ends with You -Final Remix- , an¨¢lisis Switch

Durante los primeros compases de The World Ends with You el desconcierto del protagonista se ve reflejado en el del propio jugador. Como si de un Harold Crick ataviado con cascos y moderna sudadera a juego se tratase, Neku se siente desorientado, no recuerda pr¨¢cticamente nada de su pasado y, para m¨¢s inri, oye voces en su cabeza. ?Sorpresa!; es capaz de percibir lo que piensa la gente que se encuentra a su alrededor y, adem¨¢s, esta habilidad ser¨¢ una de las claves para superar lo que, a las primeras de cambio, parece ser un macabro juego que se prolongar¨¢ durante siete d¨ªas.

Y lo hace en un distrito de Shibuya plagado de ruido, actividad en sus establecimientos, vanguardismo est¨¦tico en sus j¨®venes transe¨²ntes y carteles publicitarios eye-popping en sus fachadas. Otro handicap m¨¢s para un Neku introspectivo, que mira con recelo al resto de la gente y que busca ese tipo de tranquilidad que solo le brinda la soledad. Demasiado tarde. Empieza a conocer compa?eros de viaje, todo el mundo parece empe?ado en que espabile y, adem¨¢s, colaborar con estas personas (catalogadas como jugadores a trav¨¦s del c¨®digo de los segadores) ser¨¢ fundamental para superar las pruebas que van apareciendo diariamente en sus tel¨¦fonos m¨®viles.

Y volvemos a otro de los elementos que sorprenden del juego: durante sus numerosas l¨ªneas de texto, la trama tiene muy en cuenta no solo las conversaciones habituales, sino tambi¨¦n lo que piensa el protagonista y los NPC, quienes muestran caras o ¡°Personas¡± ¡ªvalga el s¨ªmil a una saga que mantiene algunos puntos en com¨²n con la que nos ocupa¡ª diferentes y (muchas veces) se guardan para s¨ª lo que realmente sienten.

It¡¯s a Wonderful World

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Lejos de lo que pueda dar a entender su envoltorio de juego de acci¨®n JRPG, m¨¢s all¨¢ del car¨¢cter visual ideado por un disruptivo y gamberro a nivel art¨ªstico Nomura, el planteamiento de este particular t¨ªtulo no solo ofrece una visi¨®n interesante acerca de la juventud en Jap¨®n y sus inquietudes con la llegada del nuevo milenio, sino que ahonda en la percepci¨®n que tenemos del mundo, en la interpretaci¨®n que cada uno damos a lo que sucede a nuestro alrededor, y en c¨®mo fraguamos nuestra personalidad a medida que se desarrollan nuestras habilidades cognitivas. Y lo mejor es que todo ello se traduce en la experiencia jugable por medio de diferentes mec¨¢nicas, que intervienen tanto en el desarrollo de la aventura como en el devenir de los combates, as¨ª como en el progreso de nuestros personajes mientras suben de nivel.

La trama de The Word Ends with You es fundamentalmente lineal, aunque nos da alg¨²n que otro respiro con retos espec¨ªficos de combate y escuetas tareas secundarias. A lo largo de la aventura deberemos resolver una serie de misiones para lograr llegar al siguiente d¨ªa sin ser eliminados por los segadores: en este particular juego del que poco conocemos, si tenemos la certeza de que las personas comunes no son capaces de percibir nuestra presencia, m¨¢s que nada porque nosotros nos encontramos en el plano del IM (Infra-Mundo).

Para ello, y como otra de las claras referencias a la cultura pop de principios del 2000, contaremos con la ayuda de diferentes pines (que nos permitir¨¢n utilizar distintas habilidades en combate y aplicar estados beneficiosos), variada ropa y complementos de marcas muy diferentes para aumentar nuestros stats (la importancia de la moda y las tendencias en cada parte de Shibuya tambi¨¦n tendr¨¢ repercusi¨®n jugable), y de nuestra propia cartera (muchas veces los enemigos soltar¨¢n pines que deberemos canjear por yenes). El consumismo es otro de los mecanismos que hace avanzar la aventura, permiti¨¦ndonos vestir con mejor ropa, con complementos m¨¢s caros, a la vez que nos dar¨¢ acceso a comida selecta en forma de consumibles. El coleccionismo es un pilar bastante importante del t¨ªtulo que nos ocupa.

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Una de las pruebas recurrentes a lo largo de la historia tendr¨¢ que ver con la eliminaci¨®n del ¡°Ruido¡±, entes que pululan alrededor de la gente sin que se den cuenta, y que intervienen de forma poco beneficiosa en sus vidas. Un paralelismo coherente con su manifestaci¨®n en la realidad lo encontrar¨ªamos en la saturaci¨®n de informaci¨®n, en la agresividad de las campa?as publicitarias de barrios como Akihabara y en la asfixiante actividad de estos particulares lugares en hora punta. Escaneando el entorno gracias a las habilidades de uno de nuestros pines, desvelaremos la presencia de dichos entes mal¨¦ficos y podremos atraerlos pulsando sobre ellos. A partir de ah¨ª, se desarrollar¨¢ una cadena de combates realmente fren¨¦ticos y emocionantes.

Combate sincronizado

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Este ser¨ªa uno de los puntos m¨¢s interesantes para hablar de los diferentes esquemas de control de este Final Remix para Nintendo Switch. Podremos disfrutar del juego que nos ocupa en modo port¨¢til o en dock, teniendo la opci¨®n tambi¨¦n de elegir entre es sistema de control t¨¢ctil o el que combina puntero (v¨ªa Joy-Cons desacoplados) y botones. Desde ya os podemos asegurar que la forma id¨®nea nos obliga a utilizar el modo t¨¢ctil, por lo que resulta una experiencia bastante decepcionante hacerlo en la pantalla del televisor por medio de la utilizaci¨®n de un ¡ªpoco ¨¢gil e inexacto¡ª puntero.

Es en los combates donde se pone de relieve este problema. En niveles avanzados necesitaremos pulsar sobre los enemigos, ¡°cortar¡± sobre nuestro personaje o sus antagonistas en diferentes direcciones para enlazar combos, ataques cuerpo a cuerpo o proyectiles hacia distintas direcciones, y combinar diferentes t¨¦cnicas de sincronizaci¨®n con nuestro compa?ero (todo jugador necesita uno para luchar) que dan lugar a ataques devastadores (donde se genera un peque?o minijuego de cartas en el que buscar parejas o pulsar siguiendo una sucesi¨®n num¨¦rica asegurar¨¢ una multiplicaci¨®n del da?o y del loot).

Adem¨¢s, si pulsamos cerca de Neku pasaremos a controlarlo de forma t¨¢ctil, pudiendo hacer desplazamientos cortos o deslizamientos r¨¢pidos para escapar de los ataques m¨¢s feroces de nuestros enemigos. El combate es variado, muy activo, multiplica sus posibilidades a medida que nos asignamos pins (perks) distintos y requiere de habilidad en los retos m¨¢s avanzados. Algo, desafortunadamente, no compatible con el sistema de control con puntero, por lo que recomendamos encarecidamente disfrutar de The World Ends with You ¨C Final Remix en modo port¨¢til con el control t¨¢ctil.

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En todo buen JRPG que se precie, el desarrollo de los personajes es vital. Como hemos dicho antes, es importante comprar en las tiendas m¨¢s famosas de Shibuya, evolucionar los personajes por medio del combate y subir de nivel los pines que vayamos consiguiendo. Elegir qu¨¦ pines llevar (al principio tendremos s¨®lo dos espacios para habilidades, luego van aumentando), dotar a nuestro compa?ero de buen equipo (no lo manejamos directamente en el combate m¨¢s all¨¢ de darle peque?as ¨®rdenes para que ataquen, salvo en el nuevo modo cooperativo donde un amigo puede hacerlo) tambi¨¦n asegurar¨¢ una sincronizaci¨®n cada vez mayor, lo que generar¨¢ m¨¢s posibilidades de victoria por medio de buenas decisiones estrat¨¦gicas. En esta ocasi¨®n, el s¨ªmil de la sincronizaci¨®n con nuestro compa?ero lo encontrar¨ªamos en la evoluci¨®n de las relaciones ¡ªpor ejemplo, al principio no existe qu¨ªmica entre Neku y Shiki, elemento que ir¨¢ cambiando¡ª y en la importancia de abrirnos a nuestros seres queridos.

La dificultad de dichos combates evoluciona a lo largo de los d¨ªas, llegando a plantear momentos retantes y, adem¨¢s, ofreci¨¦ndonos la posibilidad de variar dicha dificultad (por medio de una barra deslizante que nos pondr¨¢ en desventaja seg¨²n nuestras preferencias, junto a un selector que cambia entre f¨¢cil, normal y dif¨ªcil) con el premio consiguiente: m¨¢s puntos de experiencia al superar cadenas de combates y un loot mucho m¨¢s interesante, pues los enemigos soltar¨¢n una cantidad de pines mayor. Como sucedi¨® en la adaptaci¨®n para dispositivos iOS y Android, los combates a doble pantalla del original se adaptan de forma precisa al uso de una sola imagen en movimiento, siendo su jugabilidad bastante profunda y divertida. Lo peor: que la efectividad del sistema a doble pantalla del original no ha sido, todav¨ªa, igualado en ninguna adaptaci¨®n vigente, lo que resta fluidez y posibilidades a la hora de combinar el manejo de nuestro protagonista y, sobre todo, su compa?ero.

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El poder cognitivo como motor del cambio

M¨¢s all¨¢ de los enfrentamientos contra enemigos finales o el objetivo de eliminar el ¡°Ruido¡± que se manifiesta en forma de seres reconocibles (como lobos, sapos, p¨¢jaros y un largo etc¨¦tera), para avanzar en el juego de los segadores tambi¨¦n deberemos interactuar con el entorno y, m¨¢s espec¨ªficamente, con la gente que se encuentra en el MR (Mundo Real).

Muchas veces se nos presentar¨¢n conflictos que deberemos resolver de forma espec¨ªfica, observando aquello que preocupa a determinados personajes no jugables, intentando rescatar informaci¨®n de fuentes externas a esos conflictos y, una vez con los valiosos datos (en forma de ideas) en nuestro poder, tendremos la opci¨®n de cambiar la forma de pensar y razonar de dichos personajes.

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Como apuntan Jos¨¦ Dahab y Carmela Rivadeneira en su art¨ªculo de investigaci¨®n ?Por qu¨¦ pensamos?, durante nuestro desarrollo cognitivo aprendemos a interpretar la realidad objetiva por medio de diversos mecanismos cerebrales (en su mayor¨ªa intuitivos) para lograr una imagen resumida y ¡°manejable¡± de dicha realidad en base a nuestras vivencias, el entorno que nos rodea y las capacidades particulares que nos brinda nuestra individualidad. En The World Ends with You tendremos que moldear la realidad subjetiva de otros personajes que, ante un conflicto espec¨ªfico, no encuentran una salida clara.

Como hemos apuntado a lo largo del art¨ªculo, la trama de The World Ends with You trata temas complejos, los integra en la experiencia jugable y, de paso, pone de relieve preocupaciones particulares que afectan a la sociedad japonesa en particular, y a una gran parte de la sociedad moderna a nivel general.

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No es extra?o, en este punto, ver reflejados en los personajes del juego que nos ocupa problemas recurrentes en series, Animes e incluso realities (Terrace House ser¨ªa un buen ejemplo) como la importancia de ponerse metas personales y profesionales, destacando a aquellos con un futuro incierto o con la costumbre de vivir el momento como personas menos proclives al ¨¦xito. Beat o Neku podr¨ªan pertenecer al primer grupo, mientras que personajes como Shiki cuentan con una ilusi¨®n, posiblemente nacida de una apasionada vocaci¨®n, que les lleva a tener un objetivo por el que luchar. No obstante, esto no les hace inmunes a todo tipo de preocupaciones y complejos dif¨ªciles de sobrellevar.

Como era de esperar, para disfrutar de la trama y el carisma de los personajes que conforman el videojuego que nos ocupa es de vital importancia atender a las conversaciones y los textos que nos iremos encontrando. Una de las mejores noticias de la versi¨®n Final Remix de Nintendo Switch es que, por primera vez, podremos disfrutar de una localizaci¨®n completa al castellano. Ya no hay barreras para poder disfrutar al 100% de este original JRPG el cual, f¨¢cilmente, puede brindarnos m¨¢s de 20 horas de juego teniendo en cuenta el cap¨ªtulo exclusivo de esta versi¨®n, los nuevos retos y misiones, y el tiempo dedicado al minijuego de chapas Tin Pin Slammer.

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La parte no tan buena es que, posiblemente, nos encontremos con elementos mon¨®tonos a la hora de realizar las misiones principales del juego as¨ª como durante el transcurso de los numerosos combates a los que nos enfrentaremos, pues su esquema no cambia lo suficiente ni propone nuevos rumbos a lo largo de la aventura. No obstante, eso no quita que estemos ante uno de los JRPG m¨¢s originales, arriesgados y sorprendentes del cat¨¢logo actual de Nintendo Switch, acompa?ado adem¨¢s por una factura audiovisual cargada de identidad.

Rompedora est¨¦tica y fascinante agresividad audiovisual

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Tetsuya Nomura, Gen Kobayashi y Takayuki ?dachi dotan de una identidad visual ¨²nica al universo de The World End with You. Partiendo de un dise?o de personajes similar al de la saga Kingdom Hearts, aunque con un tono m¨¢s agresivo y contundente tanto en los protagonistas como en la representaci¨®n de los entornos (m¨¢s cercano al de la serie Persona que al de otros t¨ªtulos de Square-Enix), el t¨ªtulo que nos ocupa posee un estilo visual propio.

Detr¨¢s de una aparente carencia de dominio de la perspectiva c¨®nica se esconde una intenci¨®n surreal y desconcertante en la representaci¨®n de los escenarios del IM. Como si ?dachi forzara hasta el extremo los angulosos edificios y carteles publicitarios de Shibuya para marear al jugador, para introducirlo en un inframundo de contrastes donde la utilizaci¨®n del parallax no siempre se comporta de la forma esperada, donde es f¨¢cil quedarse anonadado por este peculiar tono grafitero WildStyle, m¨¢s propio de artistas del Bronx como Tracy 168.

En una ¨¦poca copada por grandes y variados referentes est¨¦ticos como puedan ser Viewtiful Joe u Odin Sphere, el t¨ªtulo que nos ocupa manten¨ªa el tipo a pesar de ser un videojuego de Nintendo DS. Es cierto que sus versiones Remix suponen un salto en resoluci¨®n y calidad visual general (tanto esta como la Solo de dispositivos m¨®viles), es una pena que no se haya aprovechado para potenciar los ¡ªde por si meritorios¡ª cortes cinem¨¢ticos y los personajes in-game con un n¨²mero mayor cuadros de animaci¨®n, para poder competir con los ¨²ltimos t¨ªtulos bidimensionales de Vanillaware o UbiArt Framework en ese sentido.

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Otro de los pilares del t¨ªtulo de Square-Enix lo encontramos en su espectacular banda sonora, definida por una brutal combinaci¨®n de estilos, sus memorables temas (nos encantan cortes como Long Dream, Twister, Someday o las nueva mezcla de Ooparts) y su calidad sonora, llevada a un nuevo nivel en sus versiones Remix gracias al inigualable talento de Takeharu Ishimoto. Con una combinaci¨®n de g¨¦neros que nos recuerdan a t¨ªtulos como los de la saga Persona, en The World Ends with You el tono arriesgado y llamativo de su planteamiento est¨¦tico se combina con una banda sonora rompedora y rica, donde podemos encontrar rock, j-pop, techno, dance, hip-hop, temas cantados tanto en japon¨¦s como en ingl¨¦s y unas notables interpretaciones por parte de voces como Ayuko Tanaka, Cameron Strother o Mai Matsuda.

Todo ello combinado con unos efectos sonoros acordes con la tem¨¢tica, algunas voces en ingl¨¦s que intensifican las batallas (una pena no contar con ellas en los di¨¢logos como a?adido de esta versi¨®n, hubiese sido genial escuchar a los protagonistas en japon¨¦s) y un conjunto que, de forma arm¨®nica, nos ofrece una experiencia jugable y audiovisual muy fresca y sorprendente.

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Nota: 8

T¨ªtulo analizado en Nintendo Switch con un c¨®digo facilitado por la editora.