The Waylanders
- PlataformaPC4.5
- G¨¦neroAcci¨®n, RPG
- DesarrolladorGato Salvaje
- Lanzamiento02/02/2022
- TextoEspa?ol
- VocesIngl¨¦s
- EditorGato Salvaje
The Waylanders, an¨¢lisis. Los celtas se quedaron cortos
Analizamos The Waylanders para PC, un juego desarrollado en Espa?a por Gato Salvaje basado en la cultura celta, muy conocida en el norte de la pen¨ªnsula.
Hoy se est¨¢n viendo las influencias de aquellos juegos modernos que marcaron una ¨¦poca a muchos jugadores que hoy d¨ªa se dedican a traernos m¨¢s diversi¨®n que nunca. Dragon Age supo marcar a un tipo de jugador tradicional que quer¨ªa y necesitaba buenas historias junto a un gameplay muy t¨¢ctico que atesor¨® momentos inolvidables. Los desarrolladores de The Waylanders aceptan y admiten las influencias de este popular RPG y se nota en estructura y gameplay, aunque el resultado final no sea el esperado.
La pen¨ªnsula ib¨¦rica ha sido hogar de decenas de culturas a lo largo de su historia. Una de ellas fueron los celtas, una cultura que comparti¨® origen con Irlanda pero que establecieron parte de sus creencias en el norte del territorio. Galicia es uno de ellos, y sus desarrolladores han querido crear una experiencia basada en las creencias de esta cultura y, en ocasiones, hacer honor a su tierra.
Es una l¨¢stima que esta cultura tan poco aprovechada no sea lo suficientemente explotada en The Waylanders. No consigue atrapar al jugador porque realmente no sigue una estructura narrativa clara con la que hacerle entender al jugador c¨®mo funcionaba esta cultura. El c¨®dice ayuda a ahondar en sus criaturas, as¨ª como a conocer en profundidad a los celtas, pero falla dosificando una narrativa en la que el hilo se pierde m¨¢s pronto que tarde.
Las historias que se crean en The Waylanders consiguen nuestra atenci¨®n porque se toman su tiempo en contextualizarnos y a explicarse claramente, pero cuando eso ocurre, ese hilo narativo acaba abruptamente con elipsis narrativas que te sacan por completo de aquella historia que tan bien hab¨ªa empezado. Ocurre pr¨¢cticamente siempre y creemos que es uno de sus mayores problemas, porque la base que consiguen es buena.
RPG sin la R
Los personajes no se quedan atr¨¢s, claro est¨¢. De hecho, son muy interesantes y gozan de gran personalidad. No solo pueden adoptar y variar entre distintas clases, sino que evolucionan con el paso del tiempo. Las historias propias de cada uno de ellos generan un gran inter¨¦s y se nota que a The Waylanders se le da mejor contar peque?as historias que no una grandilocuente. Nos ha sorprendido que a nivel narrativo hayan creado a tantos personajes y se genere el inter¨¦s suficiente con ellos, aunque echamos en falta una mayor interacci¨®n entre personajes del mismo grupo, entablando amistades, romances o simples conversaciones que apoyen sus propias historias.
Este componente m¨¢s rolero no hace acto de presencia. Hay pocas decisiones que cambien el curso de la historia significativamente o que afecten a tu relaci¨®n con los personajes. Las opciones a elegir en los di¨¢logos son casi siempre para conocer m¨¢s sobre ese personaje en concreto, la historia del mundo o de la misi¨®n en s¨ª, pero nada que afecte a su narrativa. Por este mismo motivo, no comprendemos por qu¨¦ nuestro personaje no habla o tiene personalidad propia porque, al final, no consigue ejercer su funci¨®n de avatar del jugador en The Waylanders.
Lo que m¨¢s nos escama de todo esto es la rapidez con la que se unen nuevos compa?eros al equipo. No hab¨ªan pasado ni 5 horas desde que hab¨ªamos empezado que pr¨¢cticamente ten¨ªamos a la totalidad de los miembros disponibles. No hay tiempo para acostumbrarse y entender las habilidades, debilidades y fortalezas de cada personaje que ya se ha unido otro que comparte casi todos los atributos, sin posibilidad de maniobra o elemento diferenciador que te haga elegir entre uno y otro, o almenos eso ocurre en la primera mitad de The Waylanders.
Toda la historia se acaba desmoronando por culpa de un guion variopinto que no se aclara en qu¨¦ posici¨®n colocarse. Se debate entre toques humor¨ªsticos y una seriedad que no le sienta nada bien, dando tumbos de aqu¨ª para all¨¢ sin un rumbo fijo en el que el jugador pueda prestarle algo de atenci¨®n. De hecho, donde destaca The Waylanders es en los momentos de humor gracias a unas animaciones faciales y un estilo art¨ªstico preciosista que lo hace visualmente bello. Sin embargo, la sensaci¨®n y acabado general parece acercarse a un juego de principios de la generaci¨®n pasada o finales de hace dos pero, como decimos, no desmerece para nada el acabado final gracias a una direcci¨®n art¨ªstica bien planteada.
Neblina t¨¢ctica
Si entramos algo m¨¢s en materia de gameplay, el caos inunda los combates y sientes como nunca tienes el control de la situaci¨®n, sea cual sea la dificultad en la que juegues. Es cierto que The Waylanders tiene ese componente t¨¢ctico que te permite pausar la partida para mandar ¨®rdenes a cada personaje, pero no logra conseguir esa sensaci¨®n de comuni¨®n entre miembros de grupo con combos o mezcla entre habilidades. Las peleas dan la sensaci¨®n de estar muy individualizadas. Cada personaje es ¨²til a su manera y no logra combinarse bien con el resto a no ser que uses las formaciones.
Esta peculiaridad de los combates es la que m¨¢s nos ha gustado al ofrecer ese aspecto diferenciador que decanta la batalla a tu favor. Cuando formamos equipo con otros dos compa?eros conseguimos unir atributos y ganar nuevas habilidades que, definitivamente, decantan la balanza hacia tu favor. De hecho, son tan poderosas que sin ellas hay combates pr¨¢cticamente imposibles de afrontar individualmente hasta el punto de llegar a abusar de esta t¨¢ctica, un arma de doble filo a nivel de dise?o.
Creemos que, avanzadas las horas, los combates son tan ca¨®ticos e incontrolables que el componente t¨¢ctico carece de sentido al igual que individualizar las ¨®rdenes. ?La soluci¨®n? Las formaciones. Pero no por lo que coment¨¢bamos anteriormente, sino por ser capaces de simplificar las batallas y tener un poco de orden en una IA aliada incapaz de atacar con eficacia por su cuenta.
El equipamiento de los personajes es poco variado y comparten equipo con otros personajes del grupo, aunque te permite modificar ciertos aspectos con gemas para diferenciarlos entre s¨ª. Por otro lado, el sistema comercial carece de absoluto sentido. Tienes dinero en exceso a la m¨ªnima que recojas el bot¨ªn de tus enemigos y vendas lo que te sobre. Es tan sencillo como ineficaz por el simple hecho de que no hay un condicionante que te exija elegir entre una cosa u otra, sino que puedes comprar y vender sin l¨ªmite alguno.
Viajes en el tiempo
Lamentablemente, las asperezas de The Waylanders no acaban aqu¨ª. Si en la primera mitad encontramos un juego decente en algunos aspectos, la segunda mitad es desesperante. Para ser un juego desarrollado en Espa?a, hay una gran cantidad de texto sin traducir y sin terminar. Los desarrolladores est¨¢n al tanto de ello y es algo que hemos podido comprobar durante las posteriores semanas desde su lanzamiento, pero a¨²n les queda un largo camino que recorrer, porque no solo es el texto.
Hay una gran cantidad de bugs en esta segunda mitad donde todo el aspecto visual cambia radicalmente a una ¨¦poca medieval. Si bien es cierto que los m¨¢s graves han sido corregidos, aun quedan muchos que resolver, especialmente a nivel sonoro y gameplay o, el que nos ocurri¨® a nosotros, borrarnos todo el progreso que ten¨ªamos en una actualizaci¨®n.
Conclusi¨®n
Admiramos el valor de The Waylanders por apostar por la cultura celta como base para su historia, pero su mayor problema ha sido intentar parecerse a Dragon Age. Si Gato Salvaje hubiera apostado por algo m¨¢s peque?o, tendr¨ªamos un juego redondo, pero no ha sido as¨ª. El guion es confuso y no acaba de concretar un camino a seguir, los combates carecen de componente t¨¢ctico y clareza visual y las costuras t¨¦cnicas afean un apartado art¨ªstico notable. No negaremos que el viaje en The Waylanders no ha sido el m¨¢s fructuoso y gratificante del mundo, pero nos alegra saber que los desarrolladores est¨¢n al tanto de ello y pretenden modificar y arreglar aquellos aspectos que, actualmente, empa?an una experiencia que estaba siendo correcta.
Lo mejor
- Direcci¨®n art¨ªstica notable.
- Historias individuales interesantes...
Lo peor
- ...pero en su conjunto carece de inter¨¦s.
- Bugs en pr¨¢cticamente todos sus apartados, necesita un pulido urgente.
- La segunda mitad es, en ocasiones, injugable.
- Poca claridad visual en los combates.
Mediocre
Pod¨ªa ser pero no ha sido y tras pasar unos breves minutos con ¨¦l quedar¨¢ archivado en la estanter¨ªa para no jugarlo nunca m¨¢s. No lo compres, no digas que no te lo advertimos.