An¨¢lisis: The Invisible Hours

An¨¢lisis: The Invisible Hours

Agatha Christie fue una persona muy especial. Muy muy especial. Todos tenemos nuestras man¨ªas e idiosincrasias, eso est¨¢ claro, pero no todos tenemos m¨¢s de 80 obras a nuestras espaldas, ni somos capaces de ser los novelistas m¨¢s vendidos de la historia (tras Shakespeare). Tampoco son muchos los que pueden presumir de haber escrito el que es considerado como mejor libro polic¨ªaco de todos los tiempos, ni los capaces de imponerse a una sociedad machista, que encima puedan hacer de arque¨®logos y hasta logren desaparecer durante unos d¨ªas de la faz de la Tierra. De haza?as as¨ª solo era capaz Agatha Christie. Sin embargo, a¨²n sin conocerla, siendo part¨ªcipes de lo particular de su ser y sabiendo que hablamos desde el desconocimiento propio de alguien ajeno a la ¨¦poca, estamos seguros de que a Agatha Christie le hubiera encantado The Invisible Hours. No nos cabe duda de que ella, la primera de las personas a las que se menta en el apartado "Special Thanks" de los cr¨¦ditos, estar¨ªa m¨¢s que orgullosa de tama?o homenaje. En unas semanas se estrenar¨¢ en los cines de todo el mundo Asesinato en el Orient Express, pel¨ªcula basada en la obra hom¨®nima de la autora que, por muchas estrellas que haya sumado a su plantel, parece ir a atentar contra su legado y el del maravilloso Sidney Lumet. Mucho tiene que remar y trabajar Kenneth Branagh, porque este 2017 le ha surgido un enorme y dign¨ªsimo competidor a la hora de hablar de qui¨¦n ha hecho el mayor y m¨¢s sentido tributo a la reina del misterio, y ese rival es Tequila Works.

?Menudo a?o para el estudio! Seguramente sea olvidado por muchos en las recapitulaciones de los pr¨®ximos meses, seg¨²n se acerquen las uvas, pero han sido de lo m¨¢s prol¨ªfico de 2017, una aut¨¦ntica di¨¢spora de talento y creatividad. No contentos con brindarnos el esperado y aclamado Rime, o con la agradable sorpresa previa que supuso su colaboraci¨®n con Cavalier Game Studios en The Sexy Brutale, la desarrolladora madrile?a se ha sacado de la manga un nuevo y notable t¨ªtulo con el que rubrica su destreza y rompe todav¨ªa m¨¢s barreras. No parece haber g¨¦nero capaz de resist¨ªrseles.

El t¨ªtulo se mueve en ese difuso g¨¦nero de las novelas interactivas (ambos t¨¦rminos -"novelas" e "interactivas"- cogidos con pinzas, entre muchas comillas). Un g¨¦nero que, si bien hunde sus ra¨ªces en la aventura gr¨¢fica, no deja de ser un reci¨¦n nacido, y a pesar de ello parece estar francamente de moda en la actualidad. Una magn¨ªfica noticia si atendemos a lo bien que le sienta al sector, cuya narrativa ha revitalizado a base de ofrecer propuestas tan rompedoras como innovadoras.

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Parece que fue ayer cuando Quantic Dream y Telltale Games se las ve¨ªan y deseaban para defender Heavy Rain y The Walking Dead de aquellos que cargaban contra su propuesta y lo poco interactivo de ¨¦sta. Nadie sab¨ªa (ni sabe) c¨®mo catalogar y etiquetar sus obras... y casi que mejor as¨ª. ?Walking Simulator? ?Los nuevos Point and Click? ?No es un juego, no es una pel¨ªcula?, que dice el propio estudio nada m¨¢s empezar. Es igual. Cada vez hay m¨¢s oferta y m¨¢s adeptos. Cada vez tenemos m¨¢s proyectos del estilo, atrevidos y rompedores. En apenas un lustro, las propias Quantic Dream y Telltale parecen haber quedado desafasadas al seguir ofreciendo con sus nuevos t¨ªtulos (Detroit y Batman, por ejemplo), lo mismo que ya hicieran en 2010 y 2012. Despu¨¦s de todo, tras Dear Esther, The Stanley Parable, The Vanishing of Ethan Carter, That Dragon Cancer, Firewatch, What Remains of Edith Finch? y tantos y tantos otros, no somos los mismos. 

The Invisible Hours es una nueva y maravillosa mezcla entre Diez Negritos y La ratonera. Est¨¢n todos los componentes de ambos cl¨¢sicos del g¨¦nero polic¨ªaco: una mansi¨®n tenebrosa situada en mitad de la nada; una serie de hu¨¦spedes sospechosos que llegan a la misma invitados y atra¨ªdos por su anfitri¨®n; y un misterioso e inexplicable crimen durante la primera de sus noches de estancia. Al igual que en ambas obras, aqu¨ª los personajes, perseguidos todos ellos por su pasado, tienen en com¨²n lo fr¨¢gil de sus coartadas, la enorme cantidad de m¨®viles por los que podr¨ªan haber cometido el crimen.. y secretos. Ante todo, un buen pu?ado de secretos. 

El t¨ªtulo es a Agatha Christie lo que Virginia a Twin Peaks y David Lynch. Mientras dure, har¨¢ las delicias de todo aquel que busque una buena historia. A nosotros nos ha llevado en torno a las 5 horas completarlo y sacarle la pr¨¢ctica totalidad de coleccionables (con su correspondiente platino). Durante las mismas nos hemos re¨ªdo, sorprendido y visto con la boca abierta, hemos lanzado c¨¢balas e hip¨®tesis, seguido a sospechosos, enlazando ideas y descubrimientos y nos hemos congratulado de aquello que logr¨¢bamos adivinar antes de que saliera a la luz. Nos ha pillado con la guardia baja lo maravilloso de su ambientaci¨®n, personajes, di¨¢logos y tramas, as¨ª como el ingenio y la inteligencia con la que se desarrollan y desenvuelven los acontecimientos. Es una historia que nos han contado una y otra vez. El Cluedo, vaya. Y a¨²n as¨ª nos sigue cogiendo por sorpresa y deleitando como si fuese la primera. Qu¨¦ sencillo. Qu¨¦ genial. Divertido y entretenido de principio a fin.

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Ahora bien, durante el juego nos limitaremos ¨²nica y exclusivamente a movernos por el escenario atendiendo a la representaci¨®n de los distintos personajes. Como mucho podremos interactuar con los coleccionables repartidos por el lugar: fotograf¨ªas, noticias de prensa, entradas del diario de la v¨ªctima y cartas. Como si de Gone Home se tratara. Aunque jugaremos con el tiempo y nos acordaremos de The Sexy Brutale, nada parecido a los puzles y la estrategia planteados por aquel dentro del ¨¢mbito jugable.

La gran novedad reside en el punto de vista y el uso de, como dec¨ªamos, el tiempo. En cualquier momento podremos parar la acci¨®n, rebobinarla o acelerar la misma. Podr¨ªa recordarnos a Last Day of June, pero hay dos diferencias. La primera, que nosotros no podremos intervenir en ninguno de los acontecimientos de la trama. La segunda, que hacer de Moiras o Parcas es mucho m¨¢s org¨¢nico, m¨¢s fluido y directo. Inmediato. De igual manera contamos con total libertad para recorrer la isla y la mansi¨®n en la que tiene lugar la historia. Eso hace que haya muchas formas de jugar.

Podemos marcar a un personaje, seguirle y ver qu¨¦ hace y c¨®mo se comporta en todo momento. O tambi¨¦n podemos optar por ir por libre, investigando la mansi¨®n a nuestro antojo y espiando a uno u a otro seg¨²n nos les vayamos encontrando. Existe la opci¨®n de completar toda la historia junto a uno de los personajes, rebobinar al acabar y empezarla junto a otro para rellenar lagunas. Todos los miembros de la obra est¨¢n vivos y cuentan con su propia coreograf¨ªa, bien pensada y calculada. Hacen su papel por la casa, al margen de d¨®nde estemos nosotros.

Estar en el sal¨®n mientras dos personajes discuten y ver a otro de ellos al fondo, de refil¨®n, espi¨¢ndoles, no tiene desperdicio. Querremos ir de inmediato con dicho "esp¨ªa" y ver qu¨¦ hace, o ir con ¨¦l y retroceder el tiempo para ver por qu¨¦ ha decidido espiarles y con qu¨¦ fin. Del mismo modo nos crucaremos con algunos "actores" mientras vamos junto a otros en la direcci¨®n opuesta, o suceder¨¢n diversas cat¨¢strofes lejos de aquel al que segu¨ªamos porque llam¨® nuestra atenci¨®n. En definitiva, estaremos continuamente viajando en el tiempo para saber qu¨¦ ha pasado en todo momento. Colarnos en cada habitaci¨®n, en cada conversaci¨®n. Hasta nos apetecer¨¢ estar junto al cad¨¢ver o la puerta principal para ver qui¨¦n se acerca y pasa por ah¨ª.

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Hemos echado en falta varias velocidades a la hora de acelerar y hacer retroceder el tiempo, as¨ª como la posibilidad de pulsar un bot¨®n y ver de inmediato qu¨¦ hora es con exactitud sin necesidad de recurrir al men¨² (cuando repitamos varias veces algo, sabremos en qu¨¦ minuto ocurri¨® aquello que queremos ver). Tambi¨¦n, con respecto a la realidad virtual, nos hubiera gustado la opci¨®n de movernos de manera normal, como lo har¨ªamos sin gafas. Es decir, sin saltitos y fundidos a negro. Hay veces que nos ha costado colocarnos justo donde quer¨ªamos debido a las opciones de movimiento que ten¨ªamos. No demasiado, nunca se hace engorroso, pero se hubiera agradecido tener esa posibilidad. Por lo dem¨¢s, el juego no presenta ning¨²n problema de peso. Quiz¨¢s no sea todo lo impactante y rompedor de algunos de los coet¨¢neos de su g¨¦nero que hemos citado antes, y quiz¨¢s su precio de salida se antoje excesivo a estas alturas, pero para los que buscan algo del g¨¦nero negro no hay nada igual, y el precio siempre puede variar.

A nivel audiovisual cumple sin grandes alardes. No tira de parafernalia efectista con la que aprovechar la realidad virtual (m¨¢s all¨¢ de la lluvia o del confeti de los primeros compases). Es un t¨ªtulo bastante sencillo, de aspecto cartoon y acabado agradable. Aunque la tecnolog¨ªa de realidad virtual da para lo que da, lo que hace que uno ya est¨¦ acostumbrado a los dientes de sierra y cierto efecto borroso, no es lo m¨¢s espectacular que nos hemos echado a la cara con las gafas de Sony, ni mucho menos. A veces nos costar¨¢ discernir si un personaje est¨¢n hablando y moviendo los labios. Si alguno sale fuera de la casa y se moja, no sabremos con facilidad si es sudor o si verdaderamente est¨¢ mojado. Es dif¨ªcil apreciar detalles que en un juego de detectives se nos pueden hacer cruciales. Adem¨¢s existe alguna problema leve con las puertas, que transparentan si nos acercamos demasiado y provocan efectos raros.

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En cualquier caso, los campos m¨¢s importantes cumplen con nota. Desde las soberbias animaciones de los personajes a lo fluido de su coreograf¨ªa por la casa. El juego va como la seda. Del mismo modo, su ambientaci¨®n es de lo m¨¢s llamativo de la obra. Situado a finales del siglo XIX, principios del XX, se ubica en mitad de la Guerra de las Corrientes librada entre Thomas Alva Edison y Nikola Tesla, dos de los personajes del juego (que mezcla fantas¨ªa y realidad y nos har¨¢ establecer parecidos y querer saber m¨¢s). El aspecto de ambos inventores, el parecido del laboratorio de la mansi¨®n con aquel de Colorado Springs en el que trabaj¨® Tesla, la subtrama de la radio que parece aludir a la radio que, seg¨²n Tesla, tra¨ªa transmisiones extraterrestres...

La mansi¨®n sacada de nuestra imaginaci¨®n, con alguna que otra pintura negra de Goya por las paredes... Genial. A nivel sonoro es m¨¢s impresionante si cabe, con un doblaje para quitarse el sombrero (que permite escoger el idioma de las voces en cualquier momento) y una serie de efectos sin los que la ambientaci¨®n no ser¨ªa tan redonda y perfecta. El hecho de poder escuchar las conversaciones de otras salas como un susurro har¨¢ que nos pique el gusanillo de saber m¨¢s, y nos har¨¢ estar siempre alerta.

Sobre la realidad virtual contamos con todo tipo de opciones de movimiento (menos la que cit¨¢bamos antes). Si bien no es la experiencia m¨¢s inmersiva que hemos probado, ya que incita a estar parado y situarnos como si de un director de cine o una c¨¢mara de seguridad nos trat¨¢semos, no da ningun problema para su calibraci¨®n y no ofrece ning¨²n amago de mareo o n¨¢usea, siendo solo un plus para esta maravillosa aventura.

*Este an¨¢lisis se ha hecho con una copia digital del juego para PS4 y PS VR cedida por Tequila Works.