Bichooooooos... ! ! !

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La situaci¨®n del film, heredada de los arrebatadores libros de Robert A. Heinlein, narra con sobradas dosis de humor negro y brutal violencia la guerra que los humanos tienen con los llamados bichos, unos seres alien¨ªgenas de naturaleza ar¨¢cnida que no dudan en arrasar todo lo que encuentren, planetas civilizados inclu¨ªdos. As¨ª, incluso los soldados de la Federaci¨®n sufrir¨¢n m¨¢s de un rev¨¦s al subestimar la inteligencia de los bichos, dando lugar a una serie de carnicer¨ªas adornadas con la abrumadora banda sonora de Basil Poledouris.

Tras un m¨¢s que discreto juego de estrategia, el universo Starship Troopers llega al  mundo de los videojuegos de la mano de Strangelite, programadores de la versi¨®n PC de Crazy Taxi 3. En esta ocasi¨®n, se ha apostado por el g¨¦nero que mejor puede acoger el tema de la guerra contra los ar¨¢cnidos extraterrestres, esto es, todo un se?or first person shooter. Cierto es que en tiempos en los que el g¨¦nero est¨¢ representado por t¨ªtulos del calibre de Half Life 2, Call of Duty 2 o Far Cry, lanzar un fps es algo sumamente arriesgado, porque o arrasas en calidad o te estrellas estrepitosamente.

Pero los de Strangelite no se han cruzado de brazos, y aprovechando la estupenda guinda del film de Verhoven, han desarrollado un motor gr¨¢fico de nombre Swarm capaz de poner en pantalla decenas, decenas y decenas de bichos a la vez. Sus programadores aseguran que el motor es capaz de poner en situaci¨®n hasta trescientos personajes, y os puedo asegurar que Starship Troopers en ocasiones dar¨¢ la sensaci¨®n de ponernos frente a tantos. Lo mejor de todo es que el engine apenas har¨¢ que nuestro ordenador (siempre y cuando sea decente, claro est¨¢) se resienta ante tantos engendros que matar?

Pero? ?es esta la mayor novedad de Starship Troopers? ?Intentan en Strangelite basar el ¨¦xito de su juego en una combinaci¨®n de licencia cinematogr¨¢fica y el poder del n¨²mero? Lo m¨¢s seguro que en ambos casos la respuesta sea afirmativa, pero no se puede negar que Starship Troopers es un producto efectivo, espectacular por momentos y algo entretenido. Ofrece un desaf¨ªo digno y, como a los soldados de la pel¨ªcula, es capaz de haceros pasar muy malos momentos? tanto en el buen como en el mal sentido de la palabra. ?Est¨¢s preparado para unirte a la Federaci¨®n? Recuerda que esta otorga la ciudadan¨ªa? ;-)

Desde luego, pocas veces nos encontraremos ante un first person shooter que nos ponga cara a cara frente a tantos enemigos simult¨¢neamente. Es imposible hacerse a la idea de otro juego de acci¨®n tan cargad¨ªsimo de tantos y tantos horrendos monstruos, y encima tan duros. Pon¨¦os en la piel de un pobre marine al que un enfrentamiento con un solo alien ya es todo un desaf¨ªo? pues imaginad un combate ante tropecientos de estos bichos.

Y ojo, que esto no es Serious Sam. Cada insectoide de Starship Troopers necesita una buena raci¨®n de disparos para neutralizarlo, m¨¢s a¨²n si no apuntamos a sus puntos d¨¦biles. Con una coraza que ya quisiera para s¨ª mismo Robocop, los bichos aguantan lo suyo a la par que se mueven con supina rapidez. Y los hay de todo tipo: la agresiva infanter¨ªa de tierra con sus mortales aguijones, afilados y veloces bichos voladores, gigantescos escarabajos escupefuegos?

A grandes rasgos, lo que ofrece Starship Troopers es la m¨¢s cl¨¢sica acci¨®n en primera persona pero con ciertos a?adidos que le dan bastante car¨¢cter, por supuesto herencia del film. Pero m¨¢s a¨²n, el juego de Strangelite logra transmitir algunas sensaciones que son de agradecer por parte del jugador, puesto que la inmersi¨®n es total. As¨ª, no ser¨¢n pocas veces las que sintamos asombro cuando veamos dirigirse hacia nosotros a una marea de bichos de combate para atacarnos... Agobio cuando te encuentres rodeado por un mont¨®n de monstruos y no des abasto a matarlos. Y Nerviosismo, sobre todo cuando nos sintamos s¨®los en un lugar despejado donde en cualquier momento nos pude salir un bicho bajo nuestros pies y derpedazarnos al momento.

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Y es que gr¨¢ficamente Starship Troopers hace gala de alta tecnolog¨ªa. A base de un intensivo uso del bump-maping, las texturas parecen cobrar vida retorci¨¦ndose en un lujoso comp¨¢s de luces y sombras, observ¨¢ndose en todo momento un detalle realmente alto en casi todos los elementos del juego. El inteligente uso del DirectX 9 se deja ver desde los primeros compases, donde alucinantes efectos de transpariencias, blur, shaders varios y luces a tutipl¨¦n se hacen las absolutas protagonistas.

Claro est¨¢, hasta que hacen acto de aparici¨®n las decenas y decenas y decenas de enemigos. Bichos con muy mala leche inundar¨¢n la escena sin pr¨¢cticamente afectar al rendimiento del motor gr¨¢fico, algo verdaderamente digno de elogio. La fluidez constante (probado de forma ¨®ptima en un Athlon 64 3400 con humildes GeForce FX 5700) denota que Swarm es un engime bastante optimizado, pero el observar tantos elementos m¨®viles y muy detallados en acci¨®n sin que la tasa de im¨¢genes por segundo sufra es ya de sobresaliente. Nada m¨¢s que por este detalle, a pesar de las ortop¨¦dicas animaciones, Starship Troopers se hace un t¨ªtulo digno de menci¨®n.

El dise?o de todos los elementos del programa, aunque algo desangelados, est¨¢ inspirado en la pel¨ªcula de Paul Verhoven, compartiendo en concepci¨®n los uniformes de nuestros soldados, las naves, las armas y las formas de los bichos, pr¨¢cticamente calcados a los originales. Igualmente, lo que no pod¨ªa faltar, y que en la propia pelicula llam¨® mucho la atenci¨®n (llegando incluso a generar en su d¨ªa mucha pol¨¦mica y problemas con el nivel de clasificaci¨®n de edades) es el festival de gore gratuito que esta nos ofrec¨ªa. Toda una serie de desmembraciones, amputaciones varias, decapitaciones por doquier... y m¨¢s cosas que sufrir¨¢n los pobres soldados a manos de los terribles bichos.

Habiendo poca variedad de enemigos, todo queda compensado por el marem¨¢gnum de insectoides que agreden al un¨ªsono. Se le podr¨ªa pedir m¨¢s, pero el espect¨¢culo de ver atacar a los escarabajos gigantes, los juegos de luces por la noche bajo las estelas de plasma azul, las naves bombardeando con napalm a los bichos... Todo muy fiel al esp¨ªritu de 'Las Brigadas del Espacio', y lo que es m¨¢s importante, sumamente espectacular.

Finalmente, queda comentar que el juego no est¨¢ doblado al castellano, aunque s¨ª disponemos de subt¨ªtulos. Dentro de las discretas voces de reparto tenemos ah¨ª la voz del guaperas Casper Van Diem, protagonista del film; pero al igual que los efectos sonoros, y como hemos citado antes, queda todo eclipsado por las magnas composiciones del se?or Poledouris. No han sido grabadas de la orquesta que toc¨® las originales del film, sino que han sido recreadas a base de teclado. De todos modos, no suena nada mal y a?ade un toque ciertamente ¨¦pico al asunto.

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Pero poco m¨¢s. Tras los correctos gr¨¢ficos y la virtud del engine Swarm de inundar la pantalla de bichos, las doce misiones de Starship Troopers caen por su propio peso en una vor¨¢gine de reiteraci¨®n de elementos muy poco positiva. Objetivos demasiado cl¨¢sicos tipo 'coge esto y ll¨¦valo all¨ª' o 'protege al t¨¦cnico durante un minuto' se repiten cubiertos constantemente bajo el manto de unas oleadas de insectos de nula IA... una y otra vez lo mismo.

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Esto ser¨ªa permisible si las situaciones fuesen tan variadas como en un principio pintan, pero aunque tengamos que movernos por los nidos subterr¨¢neos, en bases abandonadas o por la superficie de un planeta infectado, la metodolog¨ªa l¨²dica ser¨¢ siempre igual, con los mismos enemigos saliendo sin cesar y con todo arrastrado por un torrente de monoton¨ªa dif¨ªcil de evitar. Para colmo, las armas, salvando aquellas que llevamos desde un principio, son algo tristes, como es el caso del bazooka, menos efectiva que las destituciones de los entrenadores del Real Madrid.

Starship Troopers posee sus virtudes jugables. Si eres fan de la pel¨ªcula, te ver¨¢s inmerso en ella, con la estupenda recreaci¨®n del sentimiento de agobio y nerviosismo que provocan los infernales alien¨ªgenas al rodearnos y destrozarnos vivo. Pero si no, este fps no es del todo una elecci¨®n clara si tenemos en cuenta que, ahora mismo, en el mercado hay discos mucho m¨¢s sugerentes. A¨²n as¨ª, el juego de Strangelite es un shooter de la vieja escuela, cl¨¢sico en sus formas y tremendamente sencillo de manejar. Divertido en peque?as dosis.

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