Star Wars: Episode I Starfighter (PlayStation 2)

Tras a?os en los que la excusa para no sacar un buen videojuego era que las caracter¨ªsticas de las consolas se quedaban peque?as para los prop¨®sitos de los programadores, ahora ya no es ¨¦sta una excusa v¨¢lida. La nueva generaci¨®n de consolas, incluida la recientemente presentada GameCube, est¨¢n pensadas para potenciar las buenas ideas y los videojuegos sorprendentes.

LucasArts nunca ha sido reacio a la sorpresa, y con las franquicias peliculeras que tienen aseguradas de por si, el placer y el gusto se ponen del lado de los jugones mundiales. Ahora, por fin, podremos sentir el v¨¦rtigo de las batallas a¨¦reas del universo Star Wars con toda la magnitud gr¨¢fica que se merecen.

C¨®mo dijo Hevia: "Lo bien fechu, bien parez", as¨ª los programadores de LucasArts han esperado el momento oportuno para lanzarse a la programaci¨®n de lo que puede ser uno de los t¨ªtulos de referencia en estas nuevas consolas. Estamos hablando de Star Wars Episode I: Starfighter.

Este nuevo t¨ªtulo de la franquicia nos meter¨¢ de lleno en la invasi¨®n del planeta Naboo por parte de la Federaci¨®n de Comercio, y nos dar¨¢ a elegir entre tres personajes diferentes para hacer frente a la gran cantidad de misiones de combate que tendremos que afrontar, en este juego que sigue paralelamente las aventuras narradas en la pel¨ªcula del "T¨ªo" Lucas.

Como dijimos antes, tenemos tres personajes centran las misiones, Rhys Dallows, un piloto de las Fuerzas de Seguridad Reales de Naboo, Vana Sage, fue cadete en los escuadrones de cazas estelares de las Fuerzas de Seguridad Reales de Naboo mientras que ahora su DNI pone mercenaria, y Nym, un personaje a caballo entre mercenario y aventurero que acaba tomando parte activa de la defensa del planeta.

La historia nos har¨¢ controlar a estos miembros por orden. Primeramente manejaremos el caza estelar de Rhys durante el primer tercio de las misiones para luego dar el salto y subirnos a bordo de la nave de Vana, el Guardian Mantis, para, finalmente, tomar el papel de Nym, en un bombardero estelar antes de que nos encontremos de lleno en la batalla final en pleno espacio exterior, codo con codo junto a Anakin Skywalker, otra vez en un caza estelar de Naboo.

Los cazas estelares son unos veh¨ªculos monoplazas modelo Naboo Royal N-1, desarrollado por los ingenieros de naves espaciales del palacio de Theed y que pese a su aspecto fr¨¢gil y diminuto est¨¢ equipada con dos ca?ones l¨¢ser gemelos y un doble cargador de torpedos de protones, adem¨¢s de ir equipado con un robot modelo R2 que se encarga de la optimizaci¨®n y control de los sistemas as¨ª como de las reparaciones en pleno vuelo.

Pero no s¨®lo podremos utilizar este modelo de nave, aunque sea el modelo "estelar", sino que tendremos a nuestra disposici¨®n cerca de veinte modelos distintos con los que hacer frente a la gran cantidad de enemigos que nos esperan y que, por supuesto, apuntan mejor que los de la pel¨ªcula. Hasta un total de cincuenta naves enemigas diferentes nos vamos a encontrar. Todo un reto.

Entre transbordadores de droides, cazas de combate y ATTs no vamos a tener tiempo de recrear nuestra vista con los lujosos escenarios y la maravillosa recreaci¨®n de estos que en el juego se hacen.

LucasArts se ha preocupado de hacerlo todo bien desde el principio y ha dise?ado un nuevo "engine" para este juego, que dem¨¢s de recrear cada modelo con una calidad abrumadora conseguir¨¢ moverlo a 60 frames por segundo.

La recreaci¨®n de todas estas naves y tanques se hace en tres fases. En la primera se modela la nave a la perfecci¨®n y se colocan las primeras texturas. En la segunda fase se colocan las texturas extra y en una tercera se preparan los cambios del modelado y las texturas correspondientes a los da?os y las aver¨ªas.

Tendremos que aventurarnos en 14 "atm¨®sferas" diferentes, que aunque la mayor¨ªa de ellas transcurren en diferentes planetas de este espectacular universo, tiempo tienen para levarnos al espacio exterior donde la vista se extasiar¨¢ con la recreaci¨®n de multitud de naves de la Federaci¨®n de Comercio y de las lejanas estrellas que iluminar¨¢n dicha batalla.

Si en el caso de las batallas en el espacio exterior a sensaci¨®n de amplitud es tremenda, en el de las batallas que tienen lugar en planetas, no deja de ser igual de sorprendente. S¨ª en otros simuladores nos lanzamos a subir rectos hasta donde nos dejen llegar enseguida topamos con una limitaci¨®n del juego que nos lo impide. Aqu¨ª no. Es m¨¢s, cuando giremos y empecemos a bajar descubriremos cu¨¢n alto hemos subido. Fabuloso.

Algunos planetas ser¨¢n recreados con todo lujo de detalles como uno de ellos basado en agua y que est¨¢ plagado de cataratas, o un planeta de car¨¢cter volc¨¢nico y que est¨¢ ba?ado por mares de lava o incluso otros m¨¢s parecidos a nuestra rom¨¢ntica luna y que tambi¨¦n se han visto abrasados por los impactos de meteoritos errantes.

A todo esto ayudar¨¢n y de qu¨¦ manera, las caracter¨ªsticas de las nuevas consolas, que conseguir¨¢n que el horizonte se vea en todo momento, que no haya sesiones de "popping-up", que no haya niebla por doquier, que la sensaci¨®n de velocidad sea vertiginosamente fiel a las pel¨ªculas.

Y para cerrar, el juego, inicialmente iba a estar acabado para estas Navidades, pero unos retrasos de ¨²ltima hora han obligado a Lucas a fijar el lanzamiento para el primer quarto del 20001. Mientras tanto... ?qu¨¦ la fuerza os acompa?e!.