Busco t¨¢ctica perdida

En la historia del videojuego son cientos -puede que incluso miles- los casos en los que se hace uso de una jugosa y conocida licencia para aderezar a un t¨ªtulo con desigual suerte. En la ¨¦poca de los 8 bits, Ocean era la abanderada de sacar juegos basados en licencias de la gran o la peque?a pantalla, y hoy el panorama sigue siendo igual con compa?¨ªas como EA y sus numerosos juegos sobre ESDLA, o pr¨®ximamente Sega, que se est¨¢ procurando licencias sobre pel¨ªculas y sagas como Iron Man -que a¨²n no ha salido- o Alien.

Cualquiera que tenga memoria hist¨®rica videojueguil sabr¨¢ que los resultados no han sido para nada homog¨¦neos y si bien nos encontramos juegos que bajo la licencia nos permiten disfrutar de nuestros personajes favoritos con un producto de calidad, en muchos otros casos dicha licencia solo sirve de maquillaje para intentar incentivar a la compra de un producto que, sin dicho nombre en la portada, no atraer¨ªa la atenci¨®n de nadie. Aunque ver aparecer el sello de Bethesda pueda dar esperanzas a m¨¢s de uno, por desgracia nos encontramos en el segundo caso.

Argumento

Una bonita introducci¨®n en forma de v¨ªdeo con voz en off nos abre paso al juego. El video es bueno, intrigante y atrayente. Y aqu¨ª termina lo mejor del juego. De hecho, ni siquiera nos introduce correctamente en la historia del juego. Da incluso la sensaci¨®n de que dicho v¨ªdeo introductorio podr¨ªan haberlo insertado en muchos otros juegos y el resultado hubiese sido el mismo. El gui¨®n en s¨ª nos viene dado en forma de textos, ya sea como narraci¨®n o como di¨¢logo de alg¨²n personaje mostrando su cara y lo que dice.

El juego comienza poni¨¦ndonos en liza de una mesa de negociaci¨®n Klingon y a nosotros como novato de la academia y aspirantes a tener nuestra propia embarcaci¨®n estelar. A partir de ah¨ª, un tutorial en forma de pruebas de aptitud nos presentan a toda la plantilla que nos acompa?ar¨¢ durante el juego pero la historia en si no se desvela y al principio de hecho no sabemos muy bien qu¨¦ relaci¨®n guarda la mencionada mesa de negociaci¨®n con nosotros. Aunque sin querer destripar nada seguramente os podr¨¦is imaginar por qu¨¦ derroteros ir¨¢ todo.

Gr¨¢ficos

El aspecto gr¨¢fico del juego es bastante desolador, y es que realmente el espacio exterior no da mucho de s¨ª. Se podr¨ªa haber aprovechado la falta de elementos en pantalla para presentar unas naves de factura envidiable, pero aunque no tienen mal aspecto, denota que no se ha aprovechado en absoluto la capacidad geom¨¦trica de la m¨¢quina que nos ocupa.

Es m¨¢s, ni siquiera se han molestado en crear unos fondos de lejan¨ªa acordes y bellos, sino que s¨®lo vemos la inmensidad vac¨ªa del universo. Los planetas, de hecho, en lugar de ser parte del fondo est¨¢n generados en 3D, lo cual m¨¢s que una ventaja es un inconveniente, quedando irreales, muy al contrario del efecto esperado. Nos hemos encontrado en mas de una ocasi¨®n con que aquel planeta que se ve en la lejan¨ªa de repente resulta que no es que est¨¦ en la lejan¨ªa sino simplemente que es totalmente plano y falto de detalle y de un tama?o rid¨ªculo. Cuando queremos darnos cuenta del truco, nos hemos estrellado contra ¨¦l.

Audio

El juego cumple escuetamente en cuanto a los efectos sonoros sin alardes pero sin poder echarle en cara ninguna falta. La banda sonora por otro lado es algo curioso. La m¨²sica es buena, seguramente extra¨ªda de las m¨²ltiples pistas incluidas en pel¨ªculas de Star Trek o la propia serie. El problema es que la m¨²sica da la sensaci¨®n de no acompa?ar a la acci¨®n con momentos ¨¢lgidos de gran calidad que intentan fomentar la ¨¦pica del juego, pero que por desgracia acompa?an a situaciones m¨¢s pobres del desarrollo.

Jugabilidad 

Llegamos al punto clave del an¨¢lisis. Y nos gustar¨ªa poder decir que la escueta factura t¨¦cnica del t¨ªtulo se ve empeque?ecida por un gran apartado jugable pero por desgracia ¨¦ste apartado va 'a juego' con el resto de aspectos del cartucho.

Puede llegar a ser entretenido, pero requiere echarle horas y acostumbrarte a su mec¨¢nica. Mec¨¢nica nada sencilla, pues incluso reci¨¦n pasado el tutorial te queda la sensaci¨®n de que necesitar¨ªas repetirlo para asimilar todo lo que te comprimen en tan poco espacio, sobre todo si pretendes jugar utilizando las combinaciones de botones en lugar de la pantalla t¨¢ctil. No es, por tanto, un juego de jugabilidad y diversi¨®n inmediata sino que requiere algo de dedicaci¨®n y tom¨¢rselo con calma.

Y es que el control, aunque a priori es intuitivo gracias a la pantalla t¨¢ctil, es bastante engorroso. Por un lado podemos utilizar combinaciones de botones para todo, pero el manejo de la nave de esta forma es menos preciso y tampoco podemos disparar los ca?ones que queramos en cada momento en el orden que nos convenga para tener en cuenta la posici¨®n de cada ca?¨®n y la cadencia de disparo.

Sin embargo, si optamos por utilizar el l¨¢piz t¨¢ctil, nos encontramos con combates sin pausa en los que el enemigo no para de dar vueltas alrededor nuestra y dispararnos y nosotros debemos de cambiar entre tres pantallas: distintas una para los escudos, otra para la navegaci¨®n y otra para disparar los distintos ca?ones y ver cuales est¨¢n recargados y cu¨¢les no. Hay que lidiar con todas a la vez para moverte, esquivar, mantener una distancia conveniente cercana para atacar y alejarte mientras recargas, girar para ir disparando con ca?ones recargados mientras se cargan los usados, recargar los escudos... y claro, todo sin dejar de mirar la pantalla de arriba.

En cuanto al desarrollo del juego en s¨ª, es bastante escueto. Tiene poco de estrategia y las misiones son bastante repetitivas aunque algo maquilladas. Por ejemplo, encontraremos misiones en las que hay que ir a cierto lugar a despejar la zona de enemigos y otras en las que alguna nave en apuros nos pide ayuda y debemos ayudarla, pero al final siempre nos limitamos a hacer lo mismo: disparar a los enemigos -que siempre se ven claramente y se autofijan- y procurar eliminarlos antes de que ocurra algo que como puede ser que eliminen a nuestro navegante en apuros o a nosotros mismos, por supuesto.

Un aliciente para el buen trekkie es la historia, que se desarrolla mediante textos y di¨¢logos. Es posible escoger en ciertos momentos la respuesta o con qui¨¦n queremos hablar, lo que puede cambiar el desarrollo del resto de las conversaciones. Pero en realidad, el t¨ªtulo es totalmente lineal, ya que escojas lo que escojas siempre ocurrir¨¢ lo mismo, siempre tendremos que ir a los mismos sitios y realizar las mismas misiones.

Y entre misi¨®n y misi¨®n nos encontramos como hilo conductor esos textos y, simplemente, viajar de un sector a otro hasta que llegues a alguno donde hay acci¨®n. Los amantes de la serie, de nuevo disfrutar¨¢n de todo este momento, pero los que buscan ir al grano se preguntar¨¢n qu¨¦ sentido tiene que salga un texto diciendo 've a sector X' para que al ir y llevar un rato navegando salga otro diciendo 'hay alguien en el sector Y' y luego al llegar directamente te digan 'nos han atacado del sector Z' y venga, al sector Z a hacer la limpieza de la basura espacial de turno.

Otro aliciente es la capacidad de ir acumulando puntos para mejorar tu nave, o incluso ir pilotando otras enemigas en el modo escaramuza. Y es que claro ?qu¨¦ juego de estrategia que se precie no tiene modo escaramuza? No tiene muchas opciones pero al menos puedes escoger entre mayor variedad para batirte y, como curiosidad, en las opciones puedes escoger que los paneles de las naves Klingon no est¨¦n traducidos... es decir, que vendr¨¢n en idioma klingon. Es un detalle, la verdad.