Space Hack (PC)

El panorama del videojuego espa?ol nos prepara otro t¨ªtulo que presentamos en exclusiva en Meristation. Se trata de Space Hack, un juego que podr¨ªamos englobar en la categor¨ªa de rol/acci¨®n y que est¨¢ claramente inspirado en la saga Diablo. La gente de 46TSM Games, con sede en Barcelona, ha tenido la amabilidad de ofrecernos en exclusiva una demo del juego en estado alpha durante nuestra visita a sus oficinas.

?sta no representa el estado final del juego, ni mucho menos, pero nos ha dado una idea general bastante buena del aspecto que lucir¨¢ este t¨ªtulo cuando est¨¦ acabado a finales de este mismo a?o. Sabemos que actualmente, Space Hack est¨¢ casi terminado, y la gente de Rebelmind est¨¢ trabajando duro ultimando los detalles finales. Pero vayamos a ver de qu¨¦ trata este t¨ªtulo.

?sta consist¨ªa en trasladar fuera de nuestro planeta a los convictos en enormes naves de transporte de aspecto muy peculiar, con una unidad de direcci¨®n y toda una serie de biosferas en la parte posterior. Las biosferas vienen a ser algo as¨ª como peque?os mundos envasados, tierras aut¨®nomas con atm¨®sfera, terreno y sol artificial propios que pueden ser dejados caer sobre la superficie de cualquier planeta para proporcionar casa a los colonos hasta que ¨¦stos consigan traer la situaci¨®n bajo control.

Maximus XV es una de estas naves de transporte. En su interior, los prisioneros, equipados con algunas herramientas e instrumentos b¨¢sicos para colonizar nuevas tierras, poco pod¨ªan imaginar su destino final. Y tampoco hubiesen llegado a sospechar nunca que tambi¨¦n iban a necesitar armas. Durante el pac¨ªfico viaje de la nave, ¨¦sta top¨® con la peor pesadilla para los pilotos espaciales: Black Nebula, una entidad gravitacional que aspira todo lo que est¨¢ a su alcance.

Evidentemente, consigui¨® tragarse a Maximus XV, llev¨¢ndole hasta una zona inexplorada en la que no eran precisamente los primeros visitantes en llegar. Ese submundo estaba plagado de criaturas alien¨ªgenas que hab¨ªan aprendido a sobrevivir aliment¨¢ndose de los reci¨¦n llegados. En un corto espacio de tiempo, las criaturas, que ya hab¨ªan empezado a asaltar la nave, fueron invadiendo una biosfera tras otra para sorpresa de los prisioneros, que no pudieron ofrecer ninguna resistencia.

Sin embargo, las cosas cambiaron en la ¨²ltima de las biosferas. Con armas improvisadas, la gente consigui¨® repeler el ataque, aunque segu¨ªan estando bajo peligro, rodeados por una horda de incontables enemigos. El ¨²nico modo de salir vivo de all¨ª era llegar al m¨®dulo de teletransporte de emergencia y usar sus poderosos motores para liberarse.

Sin embargo, el camino hasta el m¨®dulo conduce por todas las biosferas, ahora colonizadas por criaturas alien¨ªgenas. S¨®lo una persona ser¨ªa capaz de conseguirlo, el mejor de entre los mejores: Space Hack, un ex marine condenado por insubordinaci¨®n que fue un h¨¦roe de guerra en sus mejores tiempos.

Pasando al juego en s¨ª, en la demo hemos podido ver tres de las 45 localizaciones que tendr¨¢ el t¨ªtulo completo. Si antes te dec¨ªamos que el juego est¨¢ inspirado en Diablo, ya podr¨¢s hacerte a la idea de c¨®mo ser¨¢ la mec¨¢nica a seguir: oleadas de bichos que surgen de cualquier punto del escenario y que pretenden aniquilarnos a toda costa cayendo a nuestros pies a medida que los vamos masacrando.

Para ello podremos utilizar una gran variedad de armas, muchas de ellas algo arcaicas para los tiempos que corren, como espadas, mazas, hondas o arcos, pero hay que tener en cuenta que los colonos no disponen de la tecnolog¨ªa suficiente para crear equipos m¨¢s sofisticados. Sin embargo, s¨ª que ser¨¢ posible obtener armas de energ¨ªa, conseguidas de forma ilegal a trav¨¦s de los controladores del ¨¢rea.

Por otra parte, contaremos tambi¨¦n con equipo muy diverso que nos ayudar¨¢ a completar las misiones que se nos encomienden. Desde elementos para protegernos en el combate, como cascos, escudos o armaduras, hasta botiquines de alta tecnolog¨ªa y reponedores de energ¨ªa, que obtendremos bien recogi¨¦ndolo de los despojos de nuestros enemigos, o bien comerciando con otros prisioneros.

Todo esto se puede controlar f¨¢cilmente desde una ventana de inventario accesible y manejable de manera sencilla. De hecho, toda la interfaz en s¨ª es muy sencilla y completa, as¨ª como el sistema de control del personaje y el modo de c¨¢mara, que se dirige con la rueda del rat¨®n. De esta manera es muy f¨¢cil girar la c¨¢mara cuando y c¨®mo queramos mientras realizamos cualquier otra acci¨®n.

Uno de los puntos clave del juego es la construcci¨®n del personaje. Al igual que otros t¨ªtulos del mismo g¨¦nero, el protagonista est¨¢ definido por unas caracter¨ªsticas b¨¢sicas: fuerza, destreza, conocimiento y constituci¨®n. La habilidad al manejar ciertas armas o dispositivos est¨¢ ligada a ¨¦stas cualidades, que podremos aumentar a base de puntos que se nos otorgar¨¢n cada vez que subamos de nivel. As¨ª, quien se quiera especializar en luchas cuerpo a cuerpo deber¨¢ intentar primar la fuerza por encima de las otras caracter¨ªsticas, mientras que las armas a distancia depender¨¢n de la destreza, los art¨ªculos de tecnolog¨ªa del grado de conocimiento, etc.

El apartado gr¨¢fico, a diferencia del juego en el que se inspira, est¨¢ en real-time 3D y cuenta con unos efectos bastante buenos. Los mundos en los que se desarrolla la acci¨®n son muy variados, incluyendo desde ¨¢reas des¨¦rticas hasta zonas de alta tecnolog¨ªa, pasando por bosques o terrenos pantanosos. El surtido enemigos tampoco se queda corto, con m¨¢s de 90 especies alien¨ªgenas a las que machacar, entre las que se incluyen jefes y sub-jefes. La m¨²sica industrial consigue crear una buena atm¨®sfera, y los efectos de sonido que hemos podido escuchar en la demo eran muy correctos.