Shin Megami Tensei: Strange Journey Redux
Shin Megami Tensei: Strange Journey Redux, An¨¢lisis
Shin Megami Tensei nos propone experimentar un viaje extra?o por la Ant¨¢rtida en la port¨¢til de Nintendo, manteniendo la exploraci¨®n de mazmorras, el combate por turnos y las negociaciones con demonios cl¨¢sicas de la saga.
Izanami, la mujer que invita, cre¨® el mundo junto a su esposo, Izanagi. Diosa de la creaci¨®n y la muerte perteneciente al sinto¨ªsmo, fue responsable de la formaci¨®n de las ocho grandes islas de Jap¨®n y del nacimiento de numerosos dioses de la mitolog¨ªa nipona. Este ser divino aparece en varias ocasiones en Megami Tensei y sus numerosas ramificaciones. De hecho, Izanami da nombre a la serie, traducida en espa?ol como ¡°Reencarnaci¨®n de la Diosa¡±, un significado que descibre la naturaleza de Shin Megami Tensei: Strange Journey Redux.
Megami Tensei es una franquicia indudablemente japonesa, pero Strange Journey se acerc¨® m¨¢s que nunca a Occidente con su premisa narrativa, influenciada por pel¨ªculas como La Cosa de John Carpenter. Esta entrega de la saga llega por primera vez a Europa con a?adidos de peso respecto a su anterior encarnaci¨®n para Nintendo DS. As¨ª pues, Shin Megami Tensei: Strange Journey Redux se presenta ante nosotros como un dungeon crawler en primera persona donde luchamos en combates por turnos y reclutamos a demonios para que se unan a nuestra causa en el continente helado de la Ant¨¢rtida.
El Mundo Negro
La trama de este extra?o viaje nos ubica en la Ant¨¢rtida, donde se est¨¢ desarrollando un misterioso suceso conocido como Schwarzwelt. Se trata de un espacio interdimensional que no para de crecer y que amenaza con engullir nuestro planeta, por lo que las Naciones Unidas deciden encubrirlo y enviar un grupo de fuerzas especiales para estudiar y neutralizar su avance. Como no pod¨ªa ser de otra forma, ocurre una desgracia mientras sobrevuelan el Schwarzwelt y los veh¨ªculos se estrellan dentro del fen¨®meno. Sin posibilidad de escapar, los integrantes del equipo se ven forzados a adentrarse en el Schwarzwelt para descubrir su origen y eliminarlo de la faz de la Tierra.
A diferencia de los otros Shin Megami Tensei protagonizados por estudiantes, Strange Journey nos presenta a un grupo de adultos militares con un objetivo claro: destruir el Schwarzwelt. La ambientaci¨®n se acerca a la ciencia ficci¨®n y la tecnolog¨ªa futurista, aunque sigue manteniendo temas cl¨¢sicos de Megaten (abreviaci¨®n de la serie), como la lucha entre el caos y el orden, la teolog¨ªa y la imperfecci¨®n inherente al ser humano. Tengo que destacar que, a pesar de que la historia termina siendo interesante, su desarrollo resulta extremadamente lento y cuando la trama se transmite mayormente a trav¨¦s de grandes bloques de texto e ilustraciones inm¨®viles, puede acabar cansando.
Cara a cara con nuestros demonios
Eventualmente, el protagonista de la historia, un soldado al que le puedes poner nombre, descubre que el Schwarzwelt contiene una hueste de demonios dispuesta a matar a los supervivientes de las naves militares. Ataviado con un traje de combate conocido como Demonica, puede atravesar el ambiente hostil del fen¨®meno paranormal y, tras una serie de acontecimientos, combatir e interactuar con los enemigos.
Los enfrentamientos en Shin Megami Tensei: Strange Journey Redux se asemejan a los combates por turnos de la saga, pero con peque?as particularidades. La clave de la victoria reside en explotar las debilidades elementales de los enemigos, introduciendo todos los movimientos al mismo tiempo y observando c¨®mo se desarrolla una ronda de acciones enemigas y aliadas. Al acertar con una habilidad efectiva, aparte de causar mayor da?o, los aliados realizar¨¢n un ataque autom¨¢tico si su orientaci¨®n espiritual (orden, caos o neutral) coincide con la del personaje principal.
Unos aliados particulares
El ¨²nico integrante fijo de tu equipo es el protagonista, ya que el resto estar¨¢ formado por algunos de los 350 demonios que puedes reclutar a lo largo del juego. Esto se consigue entablando conversaci¨®n con ellos y convenci¨¦ndoles de que se unan a ti o te hagan alg¨²n favor a trav¨¦s de batallas dial¨¦cticas que se dividen en diferentes fases. La primera consiste en escuchar su visi¨®n de varios temas y responder a sus preguntas. Para acertar, tenemos que entender su forma de pensar y elegir la respuesta que consideremos oportuna. Una vez superemos esta parte, tendremos que acceder a sus exigencias, entre las que se encuentran deshacernos de objetos, darles dinero o rendir parte de nuestra vida/energ¨ªa. En estas negociaciones tambi¨¦n influye la Luna, que afectar¨¢ a la actitud de los demonios dependiendo de su estado.
Aunque es un sistema entretenido y que engancha, en parte por el af¨¢n de coleccionismo que este tipo de juegos incitan, resulta decepcionante descubrir que las conversaciones se repiten con mucha facilidad entre diferentes tipos de demonios. A partir de este realizaci¨®n, las negociaciones se tornan algo predecibles, incluso forzadas. En vez de tratar de entender y conocer a un demonio, en realidad acabas adivinando las respuestas por intuici¨®n y memorizaci¨®n, un proceso demasiado artificial para una mec¨¢nica con este planteamiento.
Sacrif¨ªcalos a todos
Muchos de los demonios disponibles en el juego solo se pueden adquirir mediante fusi¨®n, un proceso en el que se sacrifican varios de tus aliados para crear uno nuevo. Aqu¨ª tambi¨¦n pueden intervenir las esencias de demonio, que se otorgan de diversas formas, aunque la m¨¢s f¨¢cil consiste en luchar junto a una determinada criatura. Este sistema expande las posibilidades de la formaci¨®n de tu equipo, adem¨¢s de incentivar de forma org¨¢nica el cambio de escuadra.
Otro aspecto de Shin Megami Tensei: Strange Journey Redux que aporta profundidad al t¨ªtulo son las Apps. Estas aplicaciones otorgan todo tipo de habilidades y efectos, ampliando las posibilidades de exploraci¨®n y combate a medida que avanzas por las largas mazmorras. Todos los elementos de Strange Journey van sumando poco a poco hasta crear un conjunto de sistemas que conforman un dungeon crawler extenso y cuidado en el que poder perderse durante las m¨¢s de cuarenta horas de juego que dura la historia principal.
Los pecados del viaje
La larga duraci¨®n de Shin Megami Tensei: Strange Journey Redux no ser¨ªa una pega si no fuese por varios detalles que empa?an la experiencia y entre los que destacan dos en particular. Por una parte est¨¢ la navegaci¨®n de las mazmorras desde una perspectiva en primera persona. Los fondos de los escenarios son bastante simples a nivel visual y se vuelven irremediablemente repetitivos con el paso de las horas. A pesar de que las propias mazmorras se han dise?ado bien y ofrecen elementos que promueven su exploraci¨®n, el tedio de ver siempre las mismas texturas y moverse de forma limitada consiguen aburrir r¨¢pidamente, provocando que mires m¨¢s a la pantalla del mapa que al propio nivel.
Por otra parte se encuentra la interfaz, algo anticuada para los est¨¢ndares actuales. Los desarrolladores deber¨ªan de haber aprovechado el remasterizado para inlcuir detalles como que se puedan colocar marcadores en el mapa o pasar el texto m¨¢s r¨¢pido. Como en el caso de los elementos positivos, estos puntos negativos, sumados a la exasperante exploraci¨®n de los escenarios, contribuyen a que el progreso del juego se pueda hacer un poco cuesta arriba.
El Seno del Pesar
A pesar de que no nos llegase a Europa en su momento, es importante destacar los a?adidos que Redux incluye en el juego base debido a sus efectos colaterales, en el buen sentido. En el t¨ªtulo original pod¨ªas conseguir hasta tres finales diferentes dependiendo de las respuestas que tomes a lo largo del juego y de tu alineaci¨®n espiritual: orden, caos o neutral, como los tipos de demonios. Ahora se han ampliado a seis, uno nuevo por cada orientaci¨®n posible. Esto se debe a la irrupci¨®n de dos nuevos elementos: Alex, un misterioso personaje empe?ado en matarte, y el Seno del Pesar, una gran mazmorra opcional con sus propias reglas y mec¨¢nicas. Resultan adiciones interesantes e influyentes para la historia y plantean un desafio original y entretenido, pero las constantes batallas con Alex terminan cansando, ya que a menudo te obligan a volver atr¨¢s e incluso a repetir previos enfrentamientos.
Al tratarse de un remaster, tambi¨¦n incluye una esperable mejora gr¨¢fica respecto a su encarnaci¨®n en Nintendo DS. En este sentido, sus responsables han mejorado el look general del juego pero conservando su esencia, aunque eso incluya mantener el tedioso planteamiento de las mazmorras. Redux tambi¨¦n se encuentra doblado al japon¨¦s, pero los textos nos llegan en ingl¨¦s. Por ¨²ltimo, se suman al juego una mayor cantidad de espacios de guardado, junto a la posibilidad de guardar en casi cualquier momento de la partida y contar con m¨¢s demonios disponibles para usar, en concreto 18.
Lo que m¨¢s destaca entre los a?adidos visuales es un entretenido opening animado que nos introduce de lleno en la atm¨®sfera e historia de Strange Journey, gracias tambi¨¦n a la estupenda m¨²sica de Shoji Meguro. El compositor japon¨¦s es responsable de la gran mayor¨ªa de bandas sonoras de Megami Tensei y sus m¨²ltiples subsagas, y nunca defrauda en sus trabajos. En esta entrega, Meguro se aleja de los instrumentos contempor¨¢neos presentes en gran parte de sus obras para, en su lugar, optar por una orquestaci¨®n cercana a las marchas militares y los cantos gregorianos, creando as¨ª un ambiente maduro y oscuro desde una aproximaci¨®n minimalista. El resultado casa con la tem¨¢tica de Strange Journey a la perfecci¨®n, ayudando a los jugadores a progresar en su ardua traves¨ªa con sus hipn¨®ticos acompa?amientos.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.