Sherlock Holmes y el Rey de los Ladrones
- PlataformaPC7
- G¨¦neroAventura gr¨¢fica
- DesarrolladorFrogwares
- Lanzamiento19/06/2008
- TextoEspa?ol
- VocesEspa?ol
La ardua labor detectivesca
El detective m¨¢s famoso de la historia se enfrenta en esta ocasi¨®n al escurridizo ladr¨®n de guante blanco Ars¨¨ne Lupin en la nueva aventura gr¨¢fica de Frogwares.
Frogwares nos trae la cuarta entrega de su serie de aventuras gr¨¢ficas consagrada al detective m¨¢s famoso de la historia, Sherlock Holmes. El perspicaz personaje nacido de la mente del escritor Sir Arthur Conan Doyle deber¨¢ enfrentarse, en esta ocasi¨®n, al escurridizo ladr¨®n de guante blanco Ars¨¨ne Lupin, que planea ridiculizar al Imperio Brit¨¢nico.
Desde luego, nuestro cometido en este nuevo 'crossover' no se presenta, a priori, tan arriesgado y emocionante como el del anterior cap¨ªtulo de la saga, donde -recordemos- el locuaz investigador tuvo que v¨¦rselas con una secta de adoradores Cthulhu, pero no os enga?¨¦is: las refinadas artima?as del personaje literario de Maurice Leblanc nos plantear¨¢n un desaf¨ªo -como m¨ªnimo- igualmente sugestivo (y en ocasiones, adem¨¢s, incluso m¨¢s desquiciante).
El reputado detective se encuentra tocando el viol¨ªn en su casa del 221b de Baker Street cuando recibe una enigm¨¢tica correspondencia que aparece firmada por el c¨¦lebre ladr¨®n. En la misiva, Lupin amenaza con robar un valioso tesoro de la ciudad de Londres. En ese punto se sit¨²a el inicio de la aventura y da comienzo un tit¨¢nico duelo entre dos brillantes mentes que nos llevar¨¢ a recorrer los m¨¢s emblem¨¢ticos lugares y monumentos de la capital inglesa: la Torre de Londres, el Buckingham Palace, el Museo Brit¨¢nico y la National Gallery.
El desarrollo de la trama se basa en el t¨ªpico juego del gato y el rat¨®n repetido hasta la saciedad en el celuloide con thrillers como Seven o El Coleccionista de Huesos. Nuestro narcisista rival quiere demostrarnos que es m¨¢s listo que nosotros, y para ello deja a prop¨®sito toda una serie de pistas sobre los pr¨®ximos robos que va a efectuar. T¨ªpico s¨ª, pero la f¨®rmula se amolda a la perfecci¨®n en el engranaje argumental de esta aventura, consiguiendo mantener vivo nuestro inter¨¦s hasta el final de la misma.
Como su predecesor en la saga, y a diferencia de la mayor¨ªa de t¨ªtulos de este g¨¦nero, Sherlock Holmes y el Rey de los Ladrones se desarrolla desde una perspectiva en primera persona. Si bien el apartado gr¨¢fico del juego no es ninguna maravilla, este aspecto, unido a una lograda ambientaci¨®n, consigue que la experiencia de juego sea muy inmersiva.
Los detallados escenarios recrean fielmente la arquitectura victoriana londinense, y determinadas c¨¦lebres localizaciones, como el Museo Brit¨¢nico y la National Gallery -que cuentan con reproducciones reales de las obras y art¨ªculos que albergan- han sido representadas con mucho esmero. Desgraciadamente, estos entornos se muestran carentes vida. En ellos escasean personajes controlados por la IA, los cuales, adem¨¢s, permanecen casi siempre en una posici¨®n excesivamente est¨¢tica.
En el aspecto gr¨¢fico, el contrapunto a los magn¨ªficos escenarios lo ponen los modelados humanos. El dise?o art¨ªstico de ¨¦stos es notable, pero denotan una escasa carga poligonal y sus animaciones son, en ocasiones, algo toscas. Por otro lado, sus rostros apenas muestran expresividad.
A lo largo de la aventura nos pondremos en la piel de varios personajes, principalmente de Sherlock Holmes y de su inestimable compa?ero el Dr. Watson, los cuales manejaremos siempre de la misma forma. Nos desplazaremos por el entorno usando por defecto la consabida combinaci¨®n de teclas WASD y dirigiremos la vista hacia una direcci¨®n moviendo el rat¨®n. Sobre los objetos con los que podemos interactuar aparecer¨¢ un icono indic¨¢ndonos qu¨¦ acci¨®n podemos realizar, pero deberemos estar muy cerca de ellos y mirarlos directamente para que esto ocurra.
Durante la partida, pulsando el bot¨®n derecho del rat¨®n aparecer¨¢ un men¨² desde el que podremos acceder a nuestro inventario de objetos, a un registro de los di¨¢logos que han tenido lugar hasta la fecha, a los documentos que hemos recopilado, a los informes sobre nuestros progresos en la investigaci¨®n y a un mapa de la zona. En el mapa aparecer¨¢n se?alizadas distintas localizaciones mediante un c¨ªrculo, a las cuales podremos desplazarnos instant¨¢neamente con un solo clic.
El desarrollo del juego es completamente lineal, pero eso no significa que sea f¨¢cil avanzar. Al contrario, la dificultad de algunos enigmas y puzles puede llegar a ser frustrante. Para resolverlos, generalmente tendremos que revisar una y otra vez los documentos y di¨¢logos y, tal como se desprende de lo que hemos dicho m¨¢s arriba, examinar minuciosamente cada cent¨ªmetro del escenario en busca de pistas. Por otro lado, hubiera sido interesante a?adir un apartado en el que se indicara claramente los objetivos a realizar, ya que en ocasiones ¨¦stos no quedan muy claros.
En cuanto al apartado sonoro, la mejor parte se la lleva sin duda el doblaje, que ha sido realizado ¨ªntegramente en espa?ol. M¨¢s de treinta actores de nuestro cine se han encargado de dar voz de forma magistral a todos los personajes que aparecen en el juego. Una vez m¨¢s, debemos alabar el excelente trabajo realizado por FX Interactive en la completa localizaci¨®n del producto a nuestro idioma. Y con respecto a la banda sonora, las inspiradas partituras de corte cl¨¢sico que nos acompa?an durante el juego reflejan y potencian a la perfecci¨®n la atm¨®sfera de intriga.
Concluyendo, nos encontramos ante un producto con una factura t¨¦cnica notable, a un precio muy asequible y muy entretenido, pero cuya excesiva dificultad lo convierte en un t¨ªtulo s¨®lo apto para jugadores pacientes y experimentados. Abstenerse ne¨®fitos.
- Completa localizaci¨®n al espa?ol y excelente doblaje
- Magn¨ªfica recreaci¨®n de algunas localizaciones
- La inspirada trama
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.