Hay franquicias de videojuegos que desaparecen completamente, y otras que pierden su identidad con el paso del tiempo hasta convertirse en algo totalmente distinto a la idea original. Los t¨ªtulos que engloban el primer grupo, sobre todo cuando son buenos, suponen una verdadera tragedia para los fans, impotentes ante el hecho de que sus h¨¦roes favoritos no vayan a volver a las consolas. Pensamos en sagas como Medievil, Onimusha o Dino Crisis, con tanto potencial; pero los juegos que corresponden el segundo bloque, el de las franquicias mutantes, son peores. Porque vemos c¨®mo la transformaci¨®n no hace m¨¢s que avanzar y la forma en que parece imposible volver atr¨¢s. Resident Evil -como otros survival horror de los 90, v¨¦ase Silent Hill- es quiz¨¢ el caso m¨¢s notorio de este cambio de mec¨¢nicas y enfoque, ya desde Resident Evil 4, donde la cosa funcion¨® magn¨ªficamente como un soplo de aire fresco. Pero la llegada de Resident Evil 5, mucho m¨¢s arcade, sin apenas puzles y enfocado a la acci¨®n, desvirtu¨® completamente el concepto original de la saga; Resident Evil 6, con su prometido regreso a los or¨ªgenes, qued¨® como algo a medio gas al ser aquella afirmaci¨®n s¨®lo cierta en un 25% del total: algunos momentos de las fases de Leon S. Kennedy. El resto, m¨¢s de lo mismo. Curiosamente, mientras que en consolas dom¨¦sticas y PC la franquicia experimentaba este cambio, en las port¨¢tiles naci¨® un peque?o proyecto alternativo que conten¨ªa -ahora s¨ª- los ingredientes de aquellas a?oradas primeras entregas. Controlar la munici¨®n, saber en qu¨¦ gastar cada bala de pistola o escopeta, el gusto por la ambientaci¨®n opresiva y el buen dise?o de niveles, premiando la exploraci¨®n y el backtracking. Lleg¨® bajo el nombre de Resident Evil Revelations y se lanz¨® t¨ªmidamente en Nintendo 3DS, convirti¨¦ndose en uno de los grandes exclusivos de la plataforma. El juego funcion¨® fant¨¢sticamente a nivel de ventas, con la cr¨ªtica y los usuarios volcados en su premisa, lo que llev¨® a Capcom a lanzarlo en 2013 en consolas dom¨¦sticas (PS3, 360, Wii U) adem¨¢s de PC. Y de ah¨ª a lo que tenemos hoy entre manos, su continuaci¨®n, que recupera las bases del original y las ampl¨ªa incorporando novedades a nivel jugable, un nuevo escenario y un apartado t¨¦cnico m¨¢s s¨®lido, am¨¦n de una nueva forma de distribuci¨®n -epis¨®dica- que puede gustar m¨¢s o menos, pero que hay que aceptar. Adem¨¢s, llega a un precio razonablemente bajo: 25€ por sus cuatro episodios, similar a lo que estamos viendo con otros lanzamientos de similar tirada como los proyectos de Telltale Games o el reciente Life is Strange.
Comienza la aventura El juego completo llegar¨¢ a tiendas f¨ªsicas el pr¨®ximo 18 de marzo, as¨ª que de momento s¨®lo podemos hablar de su primer episodio, que arranca con Claire Redfield en una especie de fiesta de recepci¨®n que pronto se va al traste con la llegada de una fuerza policial. La imagen se funde a negro y cuando abrimos los ojos estamos en una prisi¨®n. La puerta de la celda de Claire se abre, y r¨¢pidamente escuchamos a nuestra amiga Moira gritando al otro lado, y con un juego de c¨¢maras se descubre que alguien nos ha llevado all¨ª para llevar a cabo el juego del gato y el rat¨®n. La historia parte, desde este punto, de la necesidad de escapar de este complejo de seguridad y descubrir porqu¨¦ diablos hemos sido trasladados all¨ª. Esto ocurre en la primera mitad del episodio, pues en la segunda pasamos a controlar a Barry Burton, que llega a cierta localizaci¨®n tras recibir un mensaje de auxilio. En su caso, cuenta con el soporte de una ni?a que encuentra en la costa, Natalia Korda, que parece tener algunas habilidades especiales. Durante este arranque se sientan as¨ª las bases de la trama, y es algo que se hace sorprendentemente bien: misterios a medio resolver, localizaci¨®n intrigante y criaturas del averno, y personalidad marcada de sus protagonistas. Capcom ha hecho un buen trabajo. Yasuhiro Anpo, director del t¨ªtulo, es un veterano en la franquicia (sus cr¨¦ditos incluyen Resident Evil y Resident Evil 2, adem¨¢s del primer Onimusha) y ha sabido c¨®mo coordinar cada aspecto del juego para darle un aspecto cl¨¢sico sin olvidarse de las innovaciones a?adidas post-Resident Evil 4. En este sentido es un juego continuista, con respecto al Revelations original, apostando por un equilibrio entre la supervivencia y el arcade, consiguiendo algo bastante complicado y es que cualquier jugador pueda sentirse c¨®modo dependiendo aquello que busque: ni es un 'mata-mata' donde podemos gastar balas como si sobrasen, ni permite tener errores si optamos por el m¨¢ximo nivel de dificultad. En este aspecto es mod¨¦lico, dando adem¨¢s posibilidad de rejugar el episodio tras completarlo la primera vez (algo que puede hacerse en apenas una hora y media) con diferentes opciones como hacerlo contrarreloj -es decir, lo m¨¢s r¨¢pido posible- o con un modo invisible, que oculta a los enemigos del mapa y evidentemente nos pone en alerta para tratar de memorizar patrones de movimiento. Para los que no conozcan el Revelations original, huelga decir que se trataba de un t¨ªtulo de aventura, acci¨®n y exploraci¨®n en tercera persona, y eso es algo que se mantiene en esta secuela. La primera mitad de la campa?a controlaremos a Claire, que es capaz de enfrentarse a las amenazas a las que hace frente con un cuchillo, una pistola y una escopeta, desbloqueadas de forma progresiva seg¨²n avanzamos. El objetivo en este tramo es salir de la prisi¨®n, para lo cual hay que reactivar la electricidad en el complejo, buscar una pieza de engranaje para abrir una puerta y con ello salir al exterior. En este segmento el juego es bastante sencillo, bas¨¢ndose simplemente en explorar por varias puertas sin apenas grandes quebraderos de cabeza. Los enemigos son escasos, salvo en cierto momento en el que aparecen en grupo y damos con una secuencia tensa, pero en global es particularmente asequible. No hay puzles a resolver y todo se basa en la exploraci¨®n. Claire cuenta con el apoyo de Moira, la hija de Barry Burton, que tiene un rol de soporte consistente en utilizar una linterna para iluminar zonas del escenario y golpear a los enemigos para defenderse con una barra de hierro. El control entre ambos personajes puede intercambiarse en todo momento y es decisivo, por ejemplo, porque Moira puede apuntar a zonas muy oscuras para dar con cartuchos u objetos ocultos. La segunda mitad del episodio la pasamos con Barry, y hacemos el camino opuesto al de Claire y Moira. Con ¨¦l, empezamos en el exterior de la prisi¨®n, en concreto en un muelle con nuestra embarcaci¨®n, hasta que damos con una ni?a, Natalia. Barry es bueno con las armas por lo que su forma de enfrentarse a los enemigos es m¨¢s frontal, y con ¨¦l encontraremos m¨¢s desaf¨ªos a la hora de acabar con las criaturas que aparecen en este entorno de pesadilla. El soporte, en esta ocasi¨®n, lo aporta la peque?a, que es capaz de 'ver' a trav¨¦s de las paredes o de sentir la presencia de los enemigos, adem¨¢s de que por su peque?o tama?o puede colarse por agujeros o rendijas para pasar al otro lado de zonas cerradas y as¨ª abrir puertas o hacer otro tipo de acciones. Como ocurr¨ªa en el caso anterior, podemos alternar el control de ambos personajes y la cooperaci¨®n es clave. Sobra decir, por cierto, que existe un modo cooperativo que no delega al segundo personaje a la IA sino que permite a cualquier otra persona unirse a nuestra partida, lo cual siempre es mucho m¨¢s divertido. Con Barry entraremos en la prisi¨®n, debido caminar por los mismos entornos que con Claire y finalmente saldremos hacia la zona desde la que recibi¨® el mensaje de auxilio. Adem¨¢s de todo lo anterior, para darle m¨¢s chicha al juego podemos mejorar habilidades de los personajes tales como tener m¨¢s potencia de fuego o aguantar m¨¢s golpes. Rejugando la historia obtendremos puntos suficientes para conseguir las mejoras y es algo que nos interesar¨¢, ya que el t¨ªtulo est¨¢ repleto de desbloqueables, a modo de 'logros/trofeos internos', adem¨¢s de coleccionables que est¨¢n bastante bien escondidos durante la campa?a. Al margen de ¨¦sta, por cierto, contamos con un modo Asalto en el que encontramos m¨²ltiples pruebas enfocadas, esta vez s¨ª, al arcade puro y duro: acabar con series de enemigos que atacan a un cristal (el tower defense de toda la vida), limpiar el escenario de zombis y otras criaturas, recoger potenciadores por el escenario, subir de nivel, mejorar a los personajes, etc¨¦tera. Este modo tiene opciones online, dicho sea de paso, como subida de puntuaci¨®n a rankings. Igualmente, hay bastante material desbloqueable (galer¨ªas con dise?os, archivos secretos, etc.) y numerosos desaf¨ªos in-game. En resumen es un episodio que ofrece suficientes extras como para recomendarse, m¨¢s a su precio de salida.