Red Orchestra: Heroes of Stalingrad
La segunda guerra mundial no ha muerto. Tripwire se ha encargado de que sea m¨¢s realista que nunca en una segunda entrega de Red Orchestra que promete estar en primera l¨ªnea de los FPS b¨¦licos.
Hace ya unos cuantos a?os un grupo de amigos decidieron crear un mod para un concurso de NVIDIA llamado 'Make something Unreal' (literalmente 'Haz algo irreal', pero jugando con el nombre del Unreal engine). Crearon as¨ª el mod para Unreal Tournament 2004, 'Red Orchestra: Combined Arms'; el resultado fue el primer premio, y con ello el acceso a las licencias gratuitas del Unreal Engine 2.5 y el 3.0. Con semejante premio (y es que no son baratas), estos chicos de Roswell, Georgia, pensaron que ya era el momento de dar el paso definitivo y crearon su propio estudio de desarrollo. Corr¨ªa el a?o 2005 y Tripwire interactive hab¨ªa nacido.
El primer juego que desarrollaron fue el Red Orchestra: Osfront 41-45 un shooter t¨¢ctico en primera persona ambientado en el frente oriental durante la segunda guerra mundial. Lo que ten¨ªa que ser en un principio un FPS para un solo jugador, con un elemento multijugador secundario, deriv¨® en un juego centrado pr¨¢cticamente en su totalidad en un multijugador donde prevalece el realismo por encima de otros shooters por todos conocidos. Pese a que el modo un jugador se limit¨® a un simple modo de entrenamiento la formula no le fue mal del todo a Tripwire que vendi¨® medio mill¨®n de copias de su juego y recibi¨® criticas m¨¢s que favorables por todo el mundo. Pero ya han pasado m¨¢s de cuatro a?os desde Osfront 41-45 y se acerca otro de los episodios m¨¢s tristes e interesantes por igual de la campa?a oriental: Stalingrado.
Heroes of Stalingrad quiere llevar el realismo de su antecesor al m¨¢ximo nivel, donde peque?os detalles significan mucho en el campo de batalla. Por ejemplo, despu¨¦s de una carrera evitando las balas necesitaremos de un peque?o espacio de tiempo para recobrar el aliento, porque si no nos va ha ser imposible apuntar, adem¨¢s que aqu¨ª no existen crucetas para indicarnos donde van a ir nuestras balas. Esto est¨¢ llevado a su m¨¢xima expresi¨®n cuando actuamos de francotirador, donde la tensi¨®n consigue que estemos totalmente involucrados en los sucesos del juego.
Porque de eso trata gran parte de jugar a Heroes of Stalingrad; de estar en una esquina de una calle en ruinas, con la respiraci¨®n agitada, donde la ¨²nica manera de saber la munici¨®n que te queda es quitar el cargador de tu arma y adivinar por su peso si te quedan muchas o pocas balas. No es una decisi¨®n por parte de los dise?adores hecha a la ligera. La verdad que algo tan obvio en la mayor¨ªa de los shooters como es el saber las balas que nos quedan con un simple vistazo a la esquina de la pantalla, aqu¨ª es m¨¢s un recurso t¨¢ctico. El peso de tu cargador puede decidir si te lanzas en una ofensiva o prefieres verlas venir. Pero dudar¨¢s.
Nuestro hombre sigue en una esquina, con precauci¨®n observa el movimiento enemigo. Aqu¨ª la vida vale mucho y no se atreve a perderla en una acci¨®n a lo Rambo. As¨ª que decide disparar a ciegas al grupo que se mueve calle abajo. El poder disparar a ciegas viene siendo algo com¨²n ¨²ltimamente en los shooters, pero es un disparo a ciegas con truco. Con truco porque ves al enemigo, y nuestro protagonista le cuesta algo m¨¢s acertar, pero ah¨ª termina todo. En las calles de Stalingrado, cuando disparas a ciegas no tienes ni idea de si le has dado a alguien o no y tienes miedo de echar un vistazo para ver el resultado por si le has dado tu posici¨®n a un francotirador. Tensi¨®n.
Los mapas son enormes, replicas de los lugares reales y se ha tratado de que puedas resguardarte en pr¨¢cticamente todo el escenario, con una diferencia importante: mientras que en otros FPS acabas encontrando siempre casualmente lugares hechos a medida para que te cubran lo justo y puedas disparar por encima, en Heroes of Stalingrad te puedes parapetar en todas partes, pero nada hecho a tu medida. Adem¨¢s tendr¨¢s que tener en cuenta si dejas a la vista un pedazo de ti mismo. Deber¨¢s tambi¨¦n saber el calibre de las balas enemigas, porque depende de donde est¨¦s, el cemento puede no ser lo suficientemente grueso como para detenerlas.
Otra de las posibilidades que nos ofrece el juego es la de comandar nuestras pelotones para intentar acabar t¨¢cticamente con el enemigo. Es gratificante poder dise?ar un buen ataque t¨¢ctico sobre los flancos del enemigo. Tambi¨¦n dispondremos de cooperativo en varios modos, incluido el campa?a de Stalingrado. Pero siempre deberemos avanzar con precauci¨®n, porque puedes parar las hemorragias con vendas, si no son muy dram¨¢ticas. En caso de que la perdida de sangre sea irreversible no podr¨¢s hacer mucho m¨¢s que rezar.
Tambi¨¦n a la hora de llevar veh¨ªculos como el tanque, se ha adoptado una filosof¨ªa mucho m¨¢s realista que en otros juegos. Podremos ponernos en la piel del ca?onero, del comandante o del conductor, alej¨¢ndonos as¨ª de que el veh¨ªculo sea una simple extensi¨®n de uno mismo, recibiendo da?os como si fuera un soldado cualquiera. En esa atmosfera claustrof¨®bica podremos cambiar de posici¨®n e incluso tomar el mando de nuestro compa?ero abatido. Aqu¨ª contaremos con la particularidad del que avista y marca los objetivos es el comandante, nada de apuntar y disparar.
Imaginaos esa tensi¨®n acumulada por tener que estar pendiente de mil cosas en partidas multijugador con 64 jugadores; una delicia. Aunque al igual que su predecesor esta fundamentalmente enfocado al multijugador tendr¨¢ un modo campa?a para un solo jugador, donde se recrear¨¢n desde el lado sovi¨¦tico o alem¨¢n las escaramuzas m¨¢s importantes de la gran batalla. Podemos decir que gracias a Tripwire la segunda guerra mundial no ha muerto, y ya est¨¢n trabajando en una expansi¨®n, Rising Storm, que cubrir¨¢ el conflicto en el Pacifico Sur. Red Orchestra 2: Heroes of Stalingrad tiene prevista su publicaci¨®n durante el tercer cuarto de este a?o en PC. Estamos impacientes.
Red Orchestra 2: Heroes of Stalingrad
- Acci¨®n
Tripwire Interactive recupera la saga Red Orchestra con Red Orchestra 2: Heroes of Stalingrad para PC, una secuela que usa el Unreal Engine 3 y nos devuelve al frente oriental de la segunda guerra mundial.