Recopilatorio de simulaci¨®n

Aunque Simbin es una compa?¨ªa relativamente joven en el mundo de los videojuegos, se ha labrado cierto renombre en nuestro mundillo gracias a la calidad inherente a sus productos desde ya sus m¨¢s tempranos lanzamientos. La apuesta de la desarrolladora n¨®rdica siempre ha estado en el mundo de la conducci¨®n simulada y algo tienen que saber sus integrantes del tema de la velocidad cuando su mismo CEO, Henrik Roos, ha ganado en tres ocasiones el campeonato de Suecia de GT Racing y participado en numerosas pruebas del circuito GT de la FIA.

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Populares mayormente por su franquicia GTR, otro producto deportivo del que en Simbin pueden sentirse orgullosos es el de la serie RACE. Concretamente, la entrega de RACE 07: The official WTCC Game fue analizado en esta casa por nuestro compa?ero Antonio Fajardo a la salida del t¨ªtulo, en Noviembre de 2007 y aunque no es un deporte excesivamente seguido en los territorios de habla hispana (donde prima la F1 y los rallyes), los aficionados a la velocidad por ordenador procuran estar pendientes en todo momento de los movimientos de estas sagas.

Curiosamente, el paquete que tenemos entre manos no es exactamente un juego nuevo en s¨ª mismo; Race On - WTCC '08 & US Muscle es a la vez un pack recopilatorio y una expansi¨®n en una ¨²nica cosa, descubrimiento que puede dejar perplejos a muchos usuarios. Por un lado, el paquete llega con dos discos que incluyen el RACE '07 original, la expansi¨®n STCC que en un principio se distribuy¨® solamente para el mercado escandinavo y despliega la temporada completa de 2008 de la WTTC, nuevos coches, nuevos circuitos y la colecci¨®n American Muscle.

pinchando en este enlace, permanece completamente v¨¢lida a d¨ªa de hoy. De hecho esta es la gran pega que uno le puede achacar al juego en s¨ª mismo: no ya la cantidad de contenido original que se le une o el total que conforma el juego, sino la poca o escasa evoluci¨®n de la franquicia tras dos a?os de demora entre el lanzamiento de ambos productos.

Muchos aficionados a la conducci¨®n 'hardcore' dir¨¢n que, no obstante, permanecer fieles al coraz¨®n del juego es por encima de todo un gran acierto, ya que si por algo son reconocidos los creadores del t¨ªtulo es por abogar por la m¨¢xima fidelidad a la realidad, especialmente en lo que tiene que ver con las entra?as del producto m¨¢s que con el envoltorio del mismo. Una vez m¨¢s, con esta nueva entrega pueden estar tranquilos: el juego es rematadamente dif¨ªcil para aquellos que buscan una aproximaci¨®n arcade y har¨¢ las delicias de los fans de siempre. Asegurado.

Eso significa que existe una doble vertiente: por un lado, los gr¨¢ficos no pueden compararse a ninguno de los productos punteros que copan actualmente el mercado de los compatibles (Dirt 2, Need for Speed) ni de las consolas; por otro lado, permite que no solamente los que posean un PC de la NASA puedan jugar al t¨ªtulo sin tener que actualizar nada de nada, que viene a ser algo de agradecer y m¨¢s en estos tiempos que corren. M¨¢s adelante en el texto y en la ficha t¨¦cnica aparecen las especificaciones completas.

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A pesar de todo, no es que el juego luzca espeluznante a los ojos del usuario medio. Los modelados de los veh¨ªculos se encuentran correctamente realizados, tanto aquellos que ya aparec¨ªan en RACE '07 como los nuevos que han llegado ahora; hay una generosa dosis de pol¨ªgonos que conforma las estructuras de los casi 40 coches disponibles y solamente durante las repeticiones podr¨ªamos decir que adolece de un poco de falta de detalle incluso en su m¨¢ximo nivel de potencia gr¨¢fica.

Decididamente lo mejor que se ha trabajado y que sigue una constante en la serie es en la gesti¨®n de las f¨ªsicas. Todo responde de una manera bastante convincente, no solamente tras los deslices que podamos tener acariciando las carrocer¨ªas de los oponentes sino tambi¨¦n en las curvas, las aceleraciones, los frenazos... el juego nos hace sentir el peso que tienen los distintos modelos de todas las marcas y las ENORMES diferencias que existen entre pilotar un coche europeo o un coche americano, que requieren en s¨ª mismos un aprendizaje aparte.

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Existe deformaci¨®n en la chapa y elementos correspondientes a la superestructura de los coches, con distintos grados de credibilidad ajustables mediante las opciones. Por ejemplo, es posible disponer de espejos virtuales si los originales han volado debido a un intercambio de pintura con un rival; tambi¨¦n funcionan con correci¨®n los movimientos de cabeza - y de c¨¢mara - siguiendo la orientaci¨®n de la curva (un detalle de calidad de Simbin aqu¨ª) y las distintas perspectivas ofrecidas cumplen su cometido sin m¨¢s, excepto la de primera persona que sobresale del resto por a?adir una dosis de realismo extra que recomendamos probar por lo menos una vez, al margen de que aumente considerablemente la dificultad.

Hay sin embargo algunos puntos negros que destacar, con respecto a las limitaciones del motor gr¨¢fico de las que habl¨¢bamos al comienzo: tanto texturas como sombreado dejan bastante lugar para la mejora, as¨ª como el tratamiento de los entornos de los circuitos, que son muy planos, pesados y repetitivos, como ya pasaba en RACE '07. Tampoco el juego dispone de una presentaci¨®n a la altura de los grandes (el HUD es un ejemplo de esto), si bien resulta pr¨¢ctica y funcional como asimismo lo es el apartado auditivo, que cumple pero sin demasiados alardes.

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Para empezar, Race On nos pone a los mandos de la temporada 2008 de la WTCC, am¨¦n de las del 2006 y 2007 incluidas en Race '07, y eso supone algunos a?adidos nuevos. En 17 categor¨ªas de coches distintas encontramos hasta casi una cuarentena de veh¨ªculos, a destacar ?nuestro' flamante SEAT Le¨®n TDI y los americanos; todo el mundo que ha visto la pel¨ªcula Transformers ha querido conducir un Camaro y ahora tenemos la oportundidad, junto al CT-V (indomable de buenas a primeras) o el SRT8, un V8 que en las curvas parece pesar como un tanque.

Tambi¨¦n se han aumentado el n¨²mero de circuitos hasta un total de 47, inclusive algunos m¨ªticos de Imola o Laguna Seca, un habitual de muchos t¨ªtulos de conducci¨®n, pasando por entornos urbanos y otros m¨¢s paisajistas. A pesar de las variantes sobre un mismo trazado que se han hecho de los escenarios (vueltas parciales, cambios en el sentido habitual de la marcha, cortes y ?atajos') lo cierto es que el n¨²mero de posibilidades sumadas de coches y carreras nos parece m¨¢s que aceptable para un t¨ªtulo de estas caracter¨ªsticas.

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Desde el men¨² principal podemos acceder a los modos de juego, que son b¨¢sicamente cinco: carrera, campeonato, contra-reloj, multijugador y pr¨¢ctica. La carrera r¨¢pida es donde empezaremos a familiarizarnos con todos los pormenores de Race On, ya que es posible configurar si queremos lanzarnos directamente a la l¨ªnea de salida o tratar de disfrutar de la experiencia de un fin de semana 'completo', rondas de entrenamiento y vueltas de clasificaci¨®n incluidas.

Evidentemente es posible - y recomendable - ponerse a practicar con el juego en cualquier lugar y con cualquier m¨¢quina, ajustando nuestra respuesta a la informaci¨®n que recibimos del HUD. Pronto descubriremos que se trata m¨¢s de recomendaciones que de reglas estrictas con lo que, como siempre, la pr¨¢ctica hace la perfecci¨®n. Disputar algunas pruebas contra el reloj, tanto offline como online si lo hemos activado por Steam, sirve para comprobar c¨®mo est¨¢ nuestro nivel contra nuestro propio fantasma guardado o comparado con el de los mejores del mundo.

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La din¨¢mica central del juego sin embargo reside en el modo campeonato, en el que se simula una temporada completa en base a los ajustes que hemos realizado, siendo posible configurarlo a nuestro antojo. Competir en un campeonato es lo m¨¢s parecido al modo 'carrera' que vamos a encontrar en Race On y es tal vez una de las ausencias m¨¢s destacables del juego ya que, a la larga, todo se reduce a competir una y otra vez sobre las mismas pruebas sin observar otra progresi¨®n que en los tiempos que se realicen en ellas.

Evidentemente no esper¨¢bamos de Simbin algo similar a ganar 'experiencia' como pilotos que afectara al realismo del juego, pero es que tampoco hay dinero que ganar para adquirir mejores coches, otros patrocinadores u otros equipos. Eso significa que desde el principio dispondremos de todo lo que necesitemos para lanzarnos a la consecuci¨®n del campeonato, seamos unos pilotos novatos o unos veteranos en los juegos de conducci¨®n.

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Eso s¨ª, las posibilidades para modificar el coche van mucho m¨¢s all¨¢ de lo que estamos acostumbrados a ver en un t¨ªtulo de estas caracter¨ªsticas, algo que ya forma parte del ADN de la desarrolladora. No solamente hablamos de cambios cosm¨¦ticos, sino incluso de profundos cambios en la mec¨¢nica, geometr¨ªa, transmisiones, relaciones, pares, comportamiento y eficacia de los frenos, neum¨¢ticos, suspensiones... hasta la posici¨®n del asiento del piloto puede modificarse, para que uno pueda hacerse a la idea.

Por eso, el verdadero punto fuerte del juego y desde donde Race On destaca por encima de los dem¨¢s es en su realismo. Da casi igual que los gr¨¢ficos no luzcan igual de bien que en otros juegos m¨¢s actuales, porque en s¨ª lo importante es como se manejan los coches. Y Race On es exigente en este aspecto, incluso en su nivel de dificultad m¨¢s bajo, pero no decimos esto de forma peyorativa sino al contrario, porque existe una tendencia natural a la simplificaci¨®n en los tiempos que corren. Eso s¨ª, el juego se adaptar¨¢ a nuestro sistema de control: teclado, rat¨®n, pad de mando y el m¨¢s recomendable, un volante force feedback. En nuestro caso, un Logitech que respond¨ªa perfectamente.

Para mejorar en el juego hay que practicar, sin ninguna duda. El HUD nos proporciona una gran cantidad de informaci¨®n b¨¢sica como tac¨®metro, veloc¨ªmetro y posici¨®n en la carrera tanto nuestra como de los rivales. Pero tambi¨¦n muestra la direcci¨®n de la siguiente curva y un c¨®digo de colores con su ¨¢ngulo, as¨ª como la marcha 'recomendada' a la que debemos tomarla: es menos intuitivo que en Forza o NFS, pero funciona. Tambi¨¦n se muestran los mensajes del jefe de boxes o de la direcci¨®n de carrera por si debemos acatar alg¨²n tipo de penalizaci¨®n.

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Existe la posibilidad de jugar online tanto en LAN como en Internet. En total una carrera la pueden disputar hasta 24 coches simult¨¢neamente y se pueden crear sesiones privadas y p¨²blicas, as¨ª como un servidor dedicado para aquellas comunidades que puedan permitirse uno. La interfaz del multijugador tambi¨¦n podr¨ªa mejorarse sustancialmente porque se nos antoja anticuada y hab¨ªa adem¨¢s cierto lag en todas nuestras partidas online, pero nos ha sido imposible determinar si era problema de la conexi¨®n o intr¨ªnseco al juego.

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