Patapon 2
- PlataformaPSP8
- G¨¦neroSimulaci¨®n
- DesarrolladorSCE Japan Studio
- Lanzamiento12/03/2009
- TextoEspa?ol
- EditorSony Computer Entertainment
A ritmo de Chaka
Justo cuando se cumple un a?o desde la aparici¨®n de Patap¨®n en occidente, Sony lanza al mercado ?Don Chaka', la esperada continuaci¨®n de la historia protagonizada por estos carism¨¢ticos guerreros bidimensionales, peque?os espartanos que libran batallas ¨¦picas con el fin de asegurar su supervivencia, con sus c¨¢nticos y fiestas por todo lo alto. La obra de Rollito se expande con m¨¢s posibilidades de juego, nuevas unidades y un modo cooperativo que garantiza diversi¨®n asegurada entre varios amigos.
Patap¨®n fue una de las sorpresas del cat¨¢logo de PSP la temporada pasada. Este mes de febrero se cumple un a?o desde que la obra de Rolito viese la luz en tierras niponas, precedida de una gran expectaci¨®n, con el consiguiente ¨¦xito de ventas que le aup¨® entre los primeros puestos de los juegos m¨¢s vendidos de aquel a?o. ?Cu¨¢l es el secreto de Patap¨®n? No es muy dif¨ªcil acertar esta respuesta, ya que m¨¢s all¨¢ de su fr¨¢gil apariencia gr¨¢fica, este t¨ªtulo esconde un enorme potencial relacionado con la estrategia y todo lo relacionado con ella. Adem¨¢s lo hace en formato en desuso como son las dos dimensiones, explotando el potencial de una consola que en ocasiones puntuales ha sabido demostrar su potencial y capacidad para representar toda clase de ideas, por absurdas que puedan parecer sobre el papel.
De Patap¨®n 2: Don Chaka s¨®lo cab¨ªa espera uno t¨ªtulo id¨¦ntico al original que ampliase todo lo que ya se conoc¨ªa, y efectivamente as¨ª ha sucedido. El t¨ªtulo era anunciado en el pasado Tokyo Game Show, siendo uno de los m¨¢s destacados de la feria, no s¨®lo en lo que respecta a la port¨¢til sino tambi¨¦n al PlayStation Network, un servicio por el que tambi¨¦n se puede adquirir el juego, ajeno al formato f¨ªsico que encontramos en el mercado. La propia Sony confirm¨® los rumores con un anunciamiento que iba directo al grano. Surgi¨® entonces la promesa de encontrar un t¨ªtulo que ampl¨ªa un 200% la aventura original, en la misma t¨®nica que coment¨¢bamos en su d¨ªa con LocoRoco2.
Un juego m¨¢s grande, mejor en todos los aspectos, en el que se han corregido algunos aspectos que no convencieron al p¨²blico en su d¨ªa. Incluir tres modalidades de dificultad en la m¨¢s evidente de todas ellas, una opci¨®n que se ha incluido con el claro prop¨®sito de facilitar a los menos h¨¢biles el disfrutar de un t¨ªtulo eminentemente r¨ªtmico, en el que la estrategia ocupa un lugar privilegiado, pero no exclusivo. Precisamente por este motivo destaca la concepci¨®n de esta franquicia, obra del artista Rolito, donde se combina sabiamente la m¨²sica, las melod¨ªas y el buen ambiente con la mente; la necesidad de pensar, de analizar las circunstancias antes de entrar en acci¨®n es fundamental para garantizar el ¨¦xito, pero no es el ¨²nico elemento al que debemos prestar atenci¨®n.
A los Patap¨®n les ha ca¨ªdo una suerte inmensa al aterrizar, casi sin quererlo, en una costa desolada que pueblan los Kamenpon y los Akumapon, dos razas que tratar¨¢n por todos los medios de evitar que nuestra tribu se asiente en la zona. Se trata de una raza desconocida, pr¨¢cticamente incapaz de entablar conversaciones coherentes entre s¨ª, y que protagonizan varias de las escenas m¨¢s c¨®micas que se han dado lugar en la serie. Entre ellas, una aparici¨®n majestuosa en uno de sus campos de concentraci¨®n, en donde sin incapaces de defenderse de la invasi¨®n enemiga. Se miran entre ellos, dan ¨®rdenes, pero nadie es capaz de entrar en acci¨®n. Al menos a priori, ya que en cuesti¨®n de segundos nos veremos afrontando una nueva situaci¨®n de peligro de la que s¨®lo nuestro ingenio ser¨¢ capaz de sacarnos. Lo mismo sucede con las distintas unidades de batalla, a cada cual m¨¢s estramb¨®tica y extravagante.
Un grupo que anda en una excursi¨®n de reconocimiento se encuentra inesperadamente con una enorme roca que bloquea su camino. Dentro de la roca, por inexplicable que parezca, se encuentra lo que m¨¢s tarde se dar¨¢ a conocer como un ?h¨¦roe', una nueva unidad fundamental para la partida que adem¨¢s se convierte en el protagonista de cualquier modo multijugador que encontramos en el t¨ªtulo. Nuestro h¨¦roe cambia de forma, de ataques, incluso de armas; todo depende de la disposici¨®n del usuario de cara a ajustar a este personaje seg¨²n nuestras necesidades en el combate -si bien la mayor¨ªa ata?en al dise?o y no tanto a su efectividad dentro de la batalla-, y a la hora de la verdad se torna como uno de los pocos personajes que disponen de habilidades realmente contundentes, sin el cual b¨¢sicamente cuesta el doble traspasar cualquier obst¨¢culo de la orograf¨ªa.
El dise?o de los escenarios vuelve a correr cargo de Rolito. El artista no se ha andado con rodeos a la hora de planificar un entorno curioso, llamativo, con continuos cambios atmosf¨¦ricos con rayos asesinos, tormentas tropicales, nieve, parajes des¨¦rticos, etc¨¦tera. Tan pronto nos encontramos en selva como en un paraje desolado, aunque indistintamente de este factor se puede palpar una mayor preocupaci¨®n por variar los escenarios, por otorgarles algo m¨¢s de vida, riqueza y variedad de texturas. Se han incluido m¨¢s edificios, terreno moldeable para incomodarnos o sencillamente como barrera para librar interesantes combates con flechas y lanzas. Luego tambi¨¦n encontramos otros tantos en los que el cuerpo a cuerpo es fundamental, todo en dependencia de c¨®mo se hayan estructurado los edificios -torres, establos, pseudo-castillos, etc¨¦tera- que encontramos por el camino.
A medida que derribamos contrincantes -tanto enemigos como animales a los que cazamos- obtenemos objetos, alimentos y ¨²tiles necesarios para concebir nuevas unidades, a las que tendremos que evolucionar manualmente siguiendo una curiosa y tremendamente bien elaborada l¨ªnea ascendente que exige cada vez m¨¢s recursos para aumentar no s¨®lo de nivel, sino tambi¨¦n de cara a conseguir esas nuevas unidades de las que tanto hemos hablado. De aqu¨ª se puede extraer, por poner un ejemplo, a la unidad voladora, una de las m¨¢s reclamadas por los usuarios y que aqu¨ª no podremos desbloquear llegar al ecuador de la partida. Es una entre tantas, entre las que tenemos que a?adir a los magos, lanceros, unidades con hacha -de cuerpo a cuerpo-, los m¨²sicos -bastante in¨²tiles en los primeros compases y hasta que suben de nivel-, etc¨¦tera.
Exactamente lo mismo que se puede esperar del apartado gr¨¢fico, que sigue exactamente la misma l¨ªnea de su antecesor con una dr¨¢stica importancia de los cambios meteorol¨®gicos, aqu¨ª denominados milagros, que tendremos que aplicar cuando sea necesario con el objetivo de cambiar las circunstancias de combate. Es otra de las novedades secundarias que a?aden m¨¢s profundidad pero que apenas destacan del resto, como los minijuegos que disputamos en el modo cooperativo, donde tendremos que pulsar los botones de la PSP de un modo similar a DJ Max Fever, tratando de acertar el ritmo justo en el momento adecuado. Varios cambios que contribuyen a mejorar la apariencia general del juego. Desde el aspecto art¨ªstico al sonoro, todo recuerdo mucho a Patap¨®n, siendo dif¨ªcil dejar de tener la sensaci¨®n de que b¨¢sicamente estamos ante una expansi¨®n que, efectivamente, ampl¨ªa todo lo que ya se conoc¨ªa, pero realmente no a?ade nada que vaya a sorprender o a variar el planteamiento del t¨ªtulo.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.