Outlast: Whistleblower

Outlast fue una sorpresa del pasado oto?o, un t¨ªtulo de los que llamamos indies que demostr¨® a las grandes superproducciones y grandes editoras c¨®mo regresar de verdad a un g¨¦nero hoy casi olvidado. El manicomio de Mount Massive ha aterrorizado a cientos de miles de jugadores con su propuesta fresca y muy referencial a los survival horror de anta?o, un notable descargable para PlayStation 4 y PC que nos pon¨ªa en la piel de un periodista que debe investigar los extra?os acontecimientos de un centro absolutamente fuera de control -literalmente- y repleto de peligrosos y sanguinarios imprevisibles enfermos mentales. Ambiente s¨®rdido y un viaje a trav¨¦s de las salas y pasillos que, sin ser dif¨ªcil ni variado en ning¨²n momento, lograba una atm¨®sfera de tensi¨®n y nerviosismo como hac¨ªa tiempo que no viv¨ªamos en videojuegos. Ahora llega su primera expansi¨®n o DLC, Whistleblower, un soplo que no es precisamente de aire fresco pero que ampl¨ªa la experiencia.

Un nuevo punto de vista y unas horas antes de los acontecimientos del original. Esta vez llevamos al que da el chivatazo, al informante, al sopl¨®n del incidente del psiqui¨¢trico, al m¨¢s cuerdo de los internos, al consciente de la ida de manos absoluta y violent¨ªsima que se est¨¢ gestando en Mount Massive. Se trata de Waylon Park, el inform¨¢tico con zapatillas deportivas y camiseta que env¨ªa el correo electr¨®nico de socorro a Miles -protagonista de Outlast- al principio del juego y que resulta aqu¨ª ser un trabajador de la Murkoff Corporation. Un viaje en su trastocada memoria y un nuevo periplo a trav¨¦s de los pasillos y salas rec¨®nditas del manicomio para intentar recordar qu¨¦ ocurri¨® exactamente, c¨®mo se dispar¨® el caos y la violencia m¨¢s cruda en las instalaciones m¨¦dicas, tambi¨¦n qu¨¦ secretos se esconden detr¨¢s del macabro experimento. Ciertamente, este Whistleblower es algo m¨¢s s¨¢dico y atrevido que el t¨ªtulo original, vuelve a hacer un especial gusto por lo visceral y lo macabro.

Ampliar

Manejar a Park recuerda en todo al control de Miles, no hay cambios entre las mec¨¢nicas de personaje y particular sistema de visi¨®n en la oscuridad s¨²per frecuente desde la caracter¨ªstica c¨¢mara de v¨ªdeo y su visi¨®n nocturna o infrarroja. Este DLC es continuista hasta decir basta, no sorprende en absoluto y solo busca ampliar y atar los cabos de historia que Outlast dej¨® sueltos. Su trama no falla, en absoluto, est¨¢ muy bien hilada con la original y consigue mantener el inter¨¦s del jugador con su esquema de recuerdos, cada vez m¨¢s espeluznantes y esclarecedores. Pero no se puede decir que haya en general tantos sustos y momentos inolvidables de verdadera tensi¨®n y crueldad, esta expansi¨®n est¨¢ claramente impulsada por las explicaciones dram¨¢ticas y no pretende tener el impacto que s¨ª logra de primeras el desagradable viaje inicial de Miles.

Ya en los primeros compases se dejan ver las intenciones de Red Barrels Studios con Whistleblower, con un arranque muy volcado con la personalidad de Park, sus pasos algo m¨¢s tranquilos e iluminados en los s¨®tanos, las conexiones con el env¨ªo del mensaje de socorro al protagonista del primer juego... Son solo dos horas de tensi¨®n, aproximadamente, y de nuevo cuatro niveles de dificultad (Normal, Dif¨ªcil, Pesadilla y Demente) que en general est¨¢n por debajo de los est¨¢ndares y vuelven a no hacer demasiado dif¨ªcil llegar al final de la desarmada aventura. La c¨¢mara, sus pilas, el silencio y la oscuridad para mantenernos ocultos volver¨¢n a ser la ¨²nica v¨ªa de escapatoria. Se echan de menos novedades puramente jugables que podr¨ªan haberse probado en la f¨®rmula con este DLC. Mando en mano y salvando las perplejidades ps¨ªquicas del nuevo y descontrolado protagonista, resulta un verdadero m¨¢s de lo mismo, eficaz otra vez, pero previsible y sin frescura.

Ampliar

El dise?o de los entornos, la colocaci¨®n de los enemigos y otros peligros, o los focos de luz sugerentes que agudizan a¨²n m¨¢s la atm¨®sfera agobiante son aciertos que se repiten en Whistleblower y dejan claro qu¨¦ aspectos fueron los mejores de Outlast. A cambio, tambi¨¦n se repite la disposici¨®n de inter¨¦s descendente que hace del tramo final algo menos impactante o espeluznante que el arranque. La poca variedad de situaciones sostiene esto. No obstante, hay en esta ampliaci¨®n una gran idea que verdaderamente se ha amortizado, el canibal. Este enemigo concurrente est¨¢ magn¨ªficamente dise?ado y aparece para protagonizar los mejores momentos. Su presencia es notoria solo por el sonido que consigue desprender y acaba marc¨¢ndolo, sus patrones de actuaci¨®n algo m¨¢s amplios que los del resto de enemigos y su aspecto es absolutamente macabro. Es lo que m¨¢s recordaremos de esta expansi¨®n, pues por bastante de lo dem¨¢s bien podr¨ªa confundirse con el original que ampl¨ªa.

En cuesti¨®n audiovisual, Whistleblower no es tampoco ninguna sorpresa. Ni deb¨ªa pretender serlo, pues manteniendo los fant¨¢sticos est¨¢ndares gr¨¢fico y sonoro que ya nos dej¨® Outlast iba a salir airoso de cualquier valoraci¨®n dubitativa. El Unreal Engine 3 vuelve a comportarse y, aunque no a su mejor nivel sobre todo en materia de planos cercanos, consigue dibujar estampas bien resueltas t¨¦cnicamente, que juegan con la luz, las animaciones r¨¢pidas, cre¨ªbles y agresivas, los efectos de superficies y detalles, etc. Es cierto que hay estancias de Mount Massive claramente mejor acabadas que otras, igual que enemigos con un modelado m¨¢s s¨®lido, animaciones m¨¢s fluidas o habitaciones m¨¢s llenas que otras. Hay desajustes visuales que no nos dejan hablar de un juego realmente puntero en materia gr¨¢fica, pero al menos s¨ª que muy realista e infalible.

Ampliar

Ampliar

Ampliar

Sobre sonido, la gama de efectos y m¨²sica estridente vuelven a marcar un apartado tambi¨¦n notable al que solo cabe pedirle doblaje al castellano y algunos FX m¨¢s para elementos reiterativos y frecuentes como la c¨¢mara o los gemidos de los internos. Los sustos se consiguen en gran medida gracias al espl¨¦ndido trabajo sonoro, en c¨®mo los efectos se solapan perfectamente con lo que vemos en pantalla, y en c¨®mo el silencio m¨¢s l¨²gubre es roto ¨²nicamente por gritos desgarrados de dolor, paranoia y sufrimiento. El doblaje original anglosaj¨®n est¨¢ a muy buen nivel y ayuda a conseguir la atm¨®sfera asfixiante y oscura que caracteriza a Outlast y a este primer DLC. Los subt¨ªtulos en castellano ayudar¨¢n a quien no domine el idioma, est¨¢n perfectamente traducidos y adaptados, aunque hay algunos desajustes como textos en otro idioma, meros bugs que se pueden arreglar f¨¢cilmente y a buen seguro se corregir¨¢n.