Impresiones de Ooblets, una alegre mezcla de g¨¦nero

Un grupo de hipsters ha tomado una isla para crear un supuesto para¨ªso en el que la sociedad se concentra en obtener el caf¨¦ de mejor calidad, las verduras m¨¢s saludables y los vestidos m¨¢s molones. Para ello ha esclavizado a una peque?a raza de engendros a los que pasean a su voluntad, haci¨¦ndoles participar en macabras danzas donde solo uno de estos ¡°Ooblets¡± puede salir ganador. Gracias a la extraordinaria habilidad de estos animales para reproducirse de forma asexual con solo ser plantados y regados regularmente sus numeros se multiplican de forma extraordinaria, aumentando de forma literalmente org¨¢nica la mano de obra barata de la isla. Poco a poco esta sociedad prospera y se libera de la deuda de sus vagos habitantes. ?Pero a qu¨¦ precio?

?Adorable hasta el extremo

Ooblets es la obra debut de Glumberland Games y apareci¨® en Early Access el d¨ªa 15 de Julio. La compa?¨ªa se vio recientemente inmersa en una serie de controversias debido a su decisi¨®n de hacer el juego exclusivo a la Epic Games Store. Un c¨¢ndido blog de los desarrolladores no sent¨® bien a muchos usuarios, lo que llev¨® incluso a las amenazas de muerte hacia los mismos. Se trata de una serie de hechos tremendamente ir¨®nicos dado que est¨¢n centrados en uno de los juegos m¨¢s profundamente adorables que hemos jugado nunca. Al igual que otros juegos del g¨¦nero como Stardew Valley en Ooblets se respira positividad y buenas energ¨ªas, quiz¨¢s con algo m¨¢s de entusiasmo de lo habitual en el g¨¦nero.

Con un estilo que recuerda al Untitled Goose Game pero una paleta de colores m¨¢s parecida a algo como Adventure time, Ooblets es inmediatamente atractivo para aquellos que gusten de los juegos vistosos y llamativamente coloridos se ver¨¢ embelesado por el despliegue en pantalla. Las animaciones de los personajes rebosan entusiasmo y una desbordante energ¨ªa, incluyendo nuestro personaje jugable. Pasados unos segundos sin interactuar con el juego este comenzar¨¢ un bailoteo incesante al ritmo de la banda sonora. En la plaza principal podemos observar un incesante desfile de ciudadanos embarcados en semejantes danzas lo que con el tiempo no podemos evitar mejore nuestro humor.

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Quiz¨¢s donde se hayan pasado de adorables sea en el lenguaje incluido en el juego. Lejos de ser traducido al espa?ol, nos cuesta incluso decir que el juego est¨¦ en ingl¨¦s. Pr¨¢cticamente cada elemento jugable tiene su propio nombre, a cada cual m¨¢s ¡°mono¡± y dif¨ªcil de pronunciar en voz alta. Por supuesto se trata de una decisi¨®n estil¨ªstica y funciona bastante bien con la atm¨®sfera y humor que pretende transmitir el juego. Pero cuando pretende que encontremos 7 ¡°sprooglebaggles¡±, 8 ¡°bomplethorns¡± 17 ¡°thampersquampers¡± y 2 ¡°balloferoos¡± nos veremos recurriendo al glosario de manera m¨¢s que frecuente. Dicho glosario, dicho sea, tiene su propio y pretencioso nombrecito.

Listas de la compra

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Quiz¨¢s el mayor problema del juego a d¨ªa de hoy se relaciona con lo que acabamos de mencionar. Las misiones que encontramos en unas cinco horas de juego consist¨ªan siempre en conseguir distintas cantidades de distintos materiales. Las formas de conseguirlo, por supuesto, es donde se encuentra la jugabilidad. Crear unos buenos sistemas de cultivo, eficientes y autosuficientes, tener buenas relaciones con los ciudadanos, mano de obra ¡°ooblet¡± ingente¡­ son comportamientos que nos llevar¨¢n a conseguir esos objetos que requieren las misiones. Pero nos gustar¨ªa algo m¨¢s de variedad en los objetivos, aunque fuera ocasionalmente.

Donde s¨ª hay algo m¨¢s de variedad jugable y complejidad quiz¨¢s es en las batallas de Ooblets. Estos peque?os seres batallan entre s¨ª como si de pokemones bailarines se tratase, con un sistema de combate por turnos basado en las cartas. Desear¨ªamos que se tratase en su lugar de batallas de ritmo basadas en la m¨²sica, pero en su lugar la danza es solo una tem¨¢tica para el combate. As¨ª podremos usar cartas para aumentar el entusiasmo de nuestros aliados, robar compases a nuestros enemigos, etc. Es un sistema de combate de lo m¨¢s sencillo pero la diversidad bastante elevada de Ooblets hace que dispongamos de variedad a la hora de crear nuestro ¡°mazo¡±. Dicho mazo consiste de Ooblets que nos siguen a todas partes y cada uno de ellos cuenta con una habilidad propia que se a?ade a nuestro mazo. La dificultad de los combates aumenta r¨¢pidamente pero nunca llegar¨¢ a desafiar a los veteranos del g¨¦nero. De todas formas, el hecho de crear nuestro mazo a base de plantar las cartas tiene su encanto, as¨ª como esperar a que germine la siguiente adici¨®n a nuestro mazo.

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La banda sonora del juego, como otros aspectos de su presentaci¨®n,es una agradable mezcla de placenteras melod¨ªas y suave percusi¨®n. Ayuda a meternos en el ritmo suave y lento del juego con dulces susurros de instrumentos de viento e intuimos m¨¢s de un xil¨®fono. Dada la tem¨¢tica musical de las batallas de Ooblets es l¨®gico que algunos de los mejores temas del juego se reserven para las mismas.

Cabe destacar el estado de Early Access del juego. Con menos de una semana en el mercado y sin haber sido lanzado oficialmente es normal que el juego a¨²n no est¨¦ todo lo pulido que puede. Esto es evidente en el ritmo del comienzo del juego, donde r¨¢pidamente nos quedamos sin energ¨ªa lo que nos lleva a un bucle de siestas hasta poder dormir. Tambi¨¦n el ritmo de desbloquear nuevas partes del escenario es algo lento, forz¨¢ndonos a relegarnos a una zona en la que tenemos poco que hacer durante gran parte del principio del juego. Pero las bases para un estupendo juego en el g¨¦nero de la administraci¨®n de granjas con una buena dosis de innovaci¨®n est¨¢n ah¨ª. Con algunos parches, algo m¨¢s de contenido y tras arreglar alg¨²n error este puede ser un juego m¨¢s que digno de atenci¨®n. A d¨ªa de hoy la compra resulta algo m¨¢s complicada de recomendar salvo a los m¨¢s asiduos del g¨¦nero.