Monster Energy Supercross 3, an¨¢lisis

Hace unos a?os se hizo famoso un estudio de la Universidad de Pisa en el que se hablaba de ¡°la hormona del amor¡± y se aseguraba que ¨¦sta solo dura dos a?os. Desde luego, sus investigadores no deb¨ªan conocer el idilio entre Milestone y el mundo del motociclismo, porque ambas partes ya llevan veinte a?os de romance y la cosa parece lejos de acabar. La desarrolladora italiana, una veterana de los juegos de velocidad, renueva sus votos con relativa frecuencia y lleva desde principios de siglo ofreci¨¦ndonos sagas como Superbike, SBK, Ride, MotoGP y MXGP. A ellas ha venido sum¨¢ndose desde 2018 la serie Monster Energy Supercross, que se ha convertido en una franquicia anual y lanza este 4 de febrero de 2020 la que ser¨¢ su tercera entrega. Un t¨ªtulo que demuestra la pasi¨®n del estudio por el motocross y que sirve para consolidar la propuesta y demostrar que va muy en serio. ?C¨®mo? Pues con un buen n¨²mero de novedades y un ritmo de mejoras vertiginoso.

Monster Energy Supercross 3 repite como videojuego oficial de uno de los campeonatos m¨¢s importantes del mundo del motocross, el AMA Supercross Championship. Gracias a ello contiene la licencia de todos los pilotos y pistas que formaron parte de las categor¨ªas 450cc y 250cc en la temporada 2019, la cual coron¨® a Cooper Webb, Dylan Ferrandis y Chase Sexton. En total son m¨¢s de 80 pilotos distintos y m¨¢s de 15 pistas diferentes. Adem¨¢s, esta tercera entrega incluye como novedad la presencia de los equipos oficiales, una de las asignaturas pendientes de sus predecesores. Por primera vez en la serie estar¨¢n los colores y logos de los equipos de constructores reales. Solo nos ha faltado que tambi¨¦n tengan los nombres y patrocinadores de verdad (a continuaci¨®n entre parent¨¦sis). Podremos escoger entre marcas como Honda (HRC) y (Rockstar Energy) Husqvarna, pasando por muchas otras como (Monster Energy) Kawasaki, (Red Bull) KTM, (Monster Energy Factory) Yamaha y (JGR/Yoshimura) Suzuki.

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Una temporada de retraso

El compromiso con la realidad no se queda ah¨ª y el modo trayectoria del juego sigue el calendario real de competici¨®n, incluyendo sus pruebas y sistemas de clasificaci¨®n. La ¨²nica pega en este aspecto reside en la ventana de lanzamiento del t¨ªtulo. Al igual que los anteriores, Monster Energy Supercross 3 centra su atenci¨®n en una temporada que termin¨® hace m¨¢s de seis meses y que ya hemos dejado atr¨¢s en el espejo retrovisor. El campeonato 2020 est¨¢ en marcha desde enero y hace que el juego est¨¦ desactualizado, con una mano por delante y otra por detr¨¢s. Habr¨ªa que empezar a buscar una soluci¨®n a este traspi¨¦s temporal de cara a un hipot¨¦tico Supercross 4.

El primer t¨ªtulo de la saga fue uno de los juegos que se regalaron con PlayStation Plus en diciembre de 2019, as¨ª que como m¨¢s de uno ya conocer¨¢ su propuesta, en esta ocasi¨®n vamos a empezar por sus novedades. Sin contar los equipos oficiales, la primera de ellas es la presencia de mujeres por primera vez en la saga. Esto se debe a la inclusi¨®n un nuevo editor de personajes que nos dar¨¢ la posibilidad de elegir el sexo y la apariencia de nuestro avatar. Cada opci¨®n contar¨¢ con su propio set de movimientos y se hac¨ªa necesaria para las cinem¨¢ticas que hay al empezar y acabar cada prueba. Un gui?o al auge de pilotos como Vicki Golden, quien se convirti¨® en 2015 en la primera mujer en competir en el AMA Supercross Championship. Se agradece, pero no hubiera estado de m¨¢s que dicho editor tuviera un mayor y mejor grado de personalizaci¨®n, pues palidece al lado de los que hay para los circuitos y las motos. Adem¨¢s, siendo la primera toma de contacto con el juego, cabr¨ªa esperar una mejor primera impresi¨®n.

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Un multijugador a la altura

Pero si existe una novedad importante en esta entrega esa es la presencia de servidores dedicados. El online de los anteriores era un p¨¢ramo desierto donde las partidas se rellenaban con bots y en el que ten¨ªamos por costumbre no cruzarnos con nadie. Monster Energy Supercross 3 ofrece su propia infraestructura en l¨ªnea para garantizar que hay vida m¨¢s all¨¢ de la CPU y minimizar tanto el lag como la posible latencia. Eso s¨ª, los servidores estar¨¢n disponibles para todas las versiones del juego menos para Nintendo Switch. Una decisi¨®n sobre la que Milestone no ha querido dar demasiadas explicaciones. La compa?¨ªa no solo ofrece este nuevo soporte de red, sino que adem¨¢s ha incorporado nuevos modos multijugador. Se conservan los cl¨¢sicos (carreras est¨¢ndar, triple corona y showdown para 8 jugadores) y se a?aden un modo de eliminaci¨®n, otro con puntos de control y un tercero llamado ¡°b¨²squeda del tesoro¡±. Por si fuera poco los servidores tambi¨¦n ofrecen salas privadas, partidas con reglas completamente personalizables y la que se ha convertido en nuestra nueva opci¨®n favorita, la conducci¨®n libre por el complejo, en la que ahora se nos permite invitar a nuestros amigos para entrenar y probar maniobras de forma cooperativa. Es el m¨¦todo perfecto para aprender a jugar: acompa?ados y entre risas.

Si el modo online cumple lo que promete ser¨¢ un gran paso adelante, ya no solo para la saga, sino para Milestone, a la que siempre se le ha resistido este apartado. El resto de mejoras son a nivel gr¨¢fico y jugable. En las primeras entraremos despu¨¦s, mientras que las segundas son toda una serie de ajustes muy espec¨ªficos en el manejo del juego. El sistema de f¨ªsicas sigue dando pasos hacia delante, se nos ha liberado por completo a la hora de rotar en el aire y se ha progresado tambi¨¦n en las reacciones de los pilotos al comportamiento de la moto. Modificaciones necesarias, s¨ª, pero a¨²n queda mucho camino por recorrer.

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Un juego no apto para todos

Ahora s¨ª, para los que no conozcan la propuesta y no hayan probado los anteriores, Monster Energy Supercross 3 es un juego de simulaci¨®n muy exigente y con una curva de aprendizaje muy violenta. Es un t¨ªtulo muy dif¨ªcil a¨²n activando todas las ayudas y automatismos posibles, y por supuesto queda lejos del g¨¦nero arcade. Es una aproximaci¨®n a esta disciplina que no se hab¨ªa visto en el pasado. Un enfoque realista que demanda paciencia y habilidad a los mandos. Si aceptamos todo esto, el t¨ªtulo puede hacer las delicias de los fan del supercross y es capaz de mantenernos horas y horas a los mandos con una cantidad de contenidos m¨¢s que notable. Su oferta es francamente amplia: un modo trayectoria, pruebas individuales (los modos multijugador, pero con rivales manejados por la IA), contrarrelojes con marcadores online, exploraci¨®n libre para que recorramos a nuestra bola el complejo de pr¨¢cticas, campeonatos (donde escoger entre varias series de carreras) y por ¨²ltimo, un buen pu?ado de desaf¨ªos (que van desde uno contra uno hasta pruebas de conducci¨®n perfecta, pasar por puertas o hacer piruetas). Menci¨®n aparte merece el editor de escenarios, que nos permite crear nuestros propios circuitos y subirlos a la red para compartirlos con el resto de jugadores. Podremos elegir el tipo de salida, los desaf¨ªos de sus rectas, los whoops, poner puentes, saltos, tabletops y, en definitiva, alargar la vida ¨²til del t¨ªtulo tanto como queramos. Monster Energy Supercross 3 no tendr¨¢ ning¨²n problema en aguantar hasta la entrega del a?o que viene.

Sin embargo, aunque son muchos modos y muy completos, la mayor¨ªa ya estaban en anteriores entregas... y de forma muy parecida. El editor de escenarios, por ejemplo, podr¨ªa haberse animado a incluir pistas al aire libre. Sus creaciones siguen siendo cubiertas en vez de a?adir variedad. Hubiera sido divertido poder trastear con los tres tipos climas del juego (despejado, mojado y lluvioso). Algo parecido ocurre con respecto al modo trayectoria. Guarda m¨¢s similitudes que diferencias con respecto al de su primera entrega. Por aquel entonces fue muy aplaudido. Era una campa?a sorprendente y prometedora, con m¨¢s opciones de las que esper¨¢bamos, pero en estos dos a?os apenas ha habido evoluci¨®n. No le pedimos al t¨ªtulo que compita de pronto con las historias de NBA 2K o FIFA, los gigantes del g¨¦nero deportivo, pero s¨ª que podr¨ªa ir incorporando poco a poco algunas de sus caracter¨ªsticas. A bote pronto, para seguir completando temporadas se nos ocurre la necesidad de incentivos m¨¢s all¨¢ de los contratos (r¨¦cords hist¨®ricos, por ejemplo). Lo mismo ocurre con los modos extra, que a¨²n siendo abundantes, podr¨ªan depararnos alguna sorpresa de una edici¨®n a otra (pilotos cl¨¢sicos del mundo de la competici¨®n, alg¨²n campeonato extraoficial, etc¨¦tera). Son ideas r¨¢pidas y seguramente mejorables, pero permiten vislumbrar que el t¨ªtulo todav¨ªa puede ser mucho mejor. No deber¨ªa conformarse con el notable, como viene haciendo.

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Simulaci¨®n con may¨²sculas

Volviendo al apartado de simulaci¨®n, Monster Energy Supercross 3 convalida varias asignaturas de ingenier¨ªa y trae de regalo el carnet de conducir. El juego nos invita a cambiar de marchas, controlar el peso del piloto, su postura, la fuerza que ejecutamos sobre el manillar y la forma de aterrizar tras cada salto. Por si fuera poco, antes de cada carrera tendremos a nuestra disposici¨®n multitud de opciones para configurar nuestra moto, como la precarga que le ponemos, la rigidez de los muelles, el sistema de amortiguaci¨®n, la transmisi¨®n, etc¨¦tera, etc¨¦tera. Las propias pruebas contribuyen a esto y pueden pasar de durar un pu?ado de minutos a m¨¢s de una hora en funci¨®n del tipo de experiencia que busquemos. El grado de complejidad y realismo que busquemos depende por entero de nosotros.

L¨¢stima que los tutoriales son pocos y se antojan inservibles. Lejos de acercar el amor por el motocross al gran p¨²blico, el juego crea una barrera invisible con los m¨¢s ne¨®fitos en la materia y rechaza a los reci¨¦n llegados. Su curva de aprendizaje es una locura. No solo exige habilidad, sino tambi¨¦n que aprendamos por arte de magia algunos conceptos que no vienen explicados en ninguna parte. Si es vuestro primer Monster Energy Supercross y no est¨¢is demasiado versados en los juegos de simulaci¨®n, preparaos para quedar en ¨²ltima posici¨®n durante muchas carreras (pero muchas, muchas). El problema surge cuando no sabemos qu¨¦ estamos haciendo mal o c¨®mo podemos mejorar. Sin duda es uno de los grandes problemas del t¨ªtulo. No da ninguna facilidad y puede ser muy frustrante. La mayor¨ªa tirar¨¢n la toalla antes de descubrir sus virtudes.

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Barro en la pantalla

En lo que al apartado t¨¦cnico se refiere, Monster Enery Supercross 3 hace un esfuerzo muy agradecido. Queda lejos de la excelencia, pero por momentos el resultado es muy vistoso. El juego hace uso del Unreal Engine 4 y presume de un framerate bastante s¨®lido y estable para la gran cantidad de pilotos que hay en pantalla. Cuenta con m¨¢s animaciones que nunca, el degradado de las pistas es palpable, los juegos de luces con focos y fuegos artificiales son bastante resultones e incluso tiene detalles de factor¨ªa propia, como el movimiento de la ropa en funci¨®n de la velocidad y el viento. Por desgracia, las caras siguen sacadas del Museo de Cera de Madrid, los modelados se antojan extra?os a la vista y en las ca¨ªdas es mejor no mirar, m¨¢s que por el posible accidente, por la forma de caer del personaje, un mu?eco de juguete. Siguen faltando texturas, impactos, expresiones, p¨²blico, suciedad y toda clase de detalles, pero lo m¨¢s importante est¨¢ conseguido. Su valiente modo foto da buena muestra de esto.

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En lo sonoro, el juego llega con comentaristas en ingl¨¦s (sin subt¨ªtulos), aunque todos los textos de los men¨²s est¨¢n traducidos al castellano. Los efectos pasan sin pena ni gloria, siendo algo repetitivos e incapaces de diferenciar entre motores, ajustes y situaciones. El paquete viene aderezado de varias melod¨ªas, ninguna reconocible, y alguna canci¨®n underground de artistas como Kyle Devine. Ambas se escuchan de fondo durante los men¨²s y las propias carreras. A falta de presupuesto el apartado est¨¢ bien resuelto, pero a veces es demasiado gen¨¦rico, como estar en una tienda de ropa, y es probable que acab¨¦is en vuestras propias playlist.